El Rubius, AuronPlay o Las Ratitas, son algunos de los youtubers que triunfan en España y que consiguen rentabilizar sus canales de Youtube. La creación de contenido audiovisual en plataformas online es un sector muy competitivo y con un alto grado de incertidumbre, sin embargo, ofrece grandes oportunidades y democratiza el acceso al público. Así lo explica Enrique Couto, uno de los tres integrantes de VisualPolitik, el primer canal de habla hispana dedicado al análisis político, económico y social.

Según explica, se puede monetizar en poco tiempo los vídeos en la plataforma a través de la publicidad que Youtube inserta en el contenido, sin embargo, existe una alta oscilación en los ingresos percibidos dependiendo de criterios como la procedencia de las visitas, la edad y el sexo del público, la hora a la que se realiza la visualización… múltiples criterios que cambian día a día lo que crea una «máxima incertidumbre» en cuánto a las ganancias percibidas.

«Hay una variabilidad enorme. Te puedes encontrar con que 1.000 visitas procedentes de un país de Centroamérica te generen cero euros, o que 1.000 visitas de EEUU pues te puedan generar 3 dólares. Además los criterios cambian cada día», explica Couto.

Esto hace que muchos youtubers busquen otras fuentes de ingresos alternativas para garantizar cierta estabilidad. «Hay canales que ingresan menos pero luego lo compaginan con publicidad directa. Por ejemplo nosotros lo que estamos haciendo este año es la búsqueda directa de patrocinadores y de anunciantes», expone el creador de VisualPolitik.

Pese a las complicaciones para subsistir en el sector, Couto defiende que «Youtube es un marketplace fantástico. El mejor espacio para los creadores de contenido audiovisual». Expone que la plataforma online te permite llegar a «una cantidad de gente enorme» y que la competencia es libre lo que genera un incentivo para mejorar los productos audiovisuales. Añade que «Youtube es una plataforma extraordinaria ya que es una de las pocas que comparte ingresos con los creadores» y asegura que la mayor parte de los beneficios redunda en los youtubers.

Señala, a su vez, que algunas mejoras que podría introducir la plataforma de visualización de vídeos son mayor asesoramiento para los creadores de contenidos así como ayudas para generar esos ingresos adicionales a la publicidad de Youtube. «Al final los creadores somos pequeños y desarrollar el contenido  no es fácil. Requiere muchas horas y además hay mucha competencia e incertidumbre en cuanto a los ingresos», expone Couto, por lo que defiende que la plataforma ayude a los creadores a encontrar financiación y agradece iniciativas como la que Youtube ha puesto en marcha en EEUU para lanzar merchandising de diversos canales.

En esta línea, preguntado por el reciente sindicato, Fairtube, creado por youtubers para trasladar sus necesidades a la plataforma multinacional, Couto opina que es «bueno que haya un espacio de dialogo entre youtubers» pero que «no debe ser tomado como algo negativo hacia Youtube». «Soy un gran defensor de la plataforma y de los creadores libres. El hecho de que haya una movilización que es lógica y normal, no implica que haya un problema con la plataforma. Yo creo que Youtube es el lugar perfecto para los creadores de contenido digital hoy en día», expone.

Los youtubers a cargo del primer canal de habla hispana sobre análisis político y económico, VisualPolitik.

VisualPolitik nació en 2016 para cubrir un hueco que existe en los medios de comunicación y «contar el trasfondo de las propias noticias y explicar a la gente como el mundo en el que vivimos está cambiando todos los días». Actualmente, tiene dos canales, uno en castellano y otro en inglés, que suman más de 2 millones de suscriptores y tiene entre 7 y 10 millones de visualizaciones mensuales. El canal en el que trabaja Couto junto a sus dos compañeros, Alberto Rodríguez y Enrique A. Fonseca, ofrece análisis de temas de actualidad. Aprovechamos para preguntarle por su opinión respecto a algunos de estos asuntos.

-¿Qué opinión te merece la guerra comercial entre EEUU y China? ¿Nos acerca a una nueva recesión mundial?

-La guerra comercial, si tuviera que hacer una valoración, te voy a hacer una valoración muy negativa. Al final si algo demuestra la evidencia y la experiencia es que cuando se levantan barreras al intercambio de personas, capitales o mercancías, eso redunda en un empobrecimiento general. No hay mayor contribución a la paz y al entendimiento de los pueblos que dos sociedades que cooperan y trabajan juntas y precisamente la guerra comercial consiste en imponer barreras, aranceles y restricciones legales a ese tipo de cooperación voluntaria que se ha demostrado tan beneficiosa. Por ese lado tenemos una perspectiva muy crítica.

Nosotros entendemos que la seguridad jurídica es muy importante, entonces la administración, en este caso EEUU, no debería jugar con la seguridad jurídica, la confianza y los proyectos empresariales de miles y miles de inversores. La seguridad jurídica y la facilidad de movimiento tiene que estar siempre garantizada y estar fuera del juego político. Tiene que haber otros mecanismos de presión.

Sobre si esto puede contribuir a una recesión. Desde marzo del año 2009 la economía internacional lleva creciendo prácticamente de forma ininterrumpida. Estamos hablando de un periodo de tiempo que supera con creces a los ciclos medios de crecimiento. Tarde o temprano, evidentemente, llegará un congelamiento de la actividad económica y probablemente una marcha recesiva.

Yo no sé aventurar si eso se va a producir a final de 2019 o de 2020. Lo que sí soy capaz de aventurar es que los próximos años van a ser fantásticos porque hay un continente como es Asia que está emergiendo a toda velocidad. Cada año 130 millones de personas dejan atrás la pobreza para integrarse a las clases medias.

Más allá de que pueda haber o no una pequeña recesión coyuntural que es algo frecuente y normal y a lo que no tenemos que tener miedo. Lo que tenemos que estar es preparados para hacer frente a esa situación pero creo que los próximos años van a ser muy buenos.

-¿Estamos preparados los países europeos?

-Yo creo que hay dos Europas. Una que tiene las finanzas públicas ordenadas y ha hecho un proceso de desapalancamiento muy importante en los últimos años. Que tiene la capacidad de aplicar políticas públicas capaces de responder a ese impacto económico externo que pueda producirse. En cambio, hay otra serie de países que no están tan bien preparados. Esta el caso de Italia, el de Grecia y también, en cierto modo, el caso de España.

Son países que después de años de recuperación y crecimiento siguen anclados en déficits públicos elevados con niveles de deuda pública muy elevadas y con muchísimas rigideces en sus mercados laborales y en sus mercados productivos. Entonces, yo creo que estamos peor preparados para una posible desaceleración futura. Además tenemos una serie de retos que en los próximos años nos van a castigar como la inversión de la pirámide demográfica y creo que no se están haciendo todos los esfuerzos que se deberían hacer para prepararse ante estos escenarios.

-Preguntarte también por el desacuerdo en la izquierda española para conformar un gobierno, ¿Ves a Pedro Sánchez con posibilidades de renovar su cargo como presidente?

-Me cuesta hacer predicciones de futuro porque para ello tendría que tener una bola de cristal. Lo que sí creo es que desde el punto de vista analítico, Sánchez debería ser presidente. Tanto Ciudadanos como el PP tendrían que ejercer un papel de responsabilidad de estado y abstenerse para permitir a Sánchez ser presidente.

Entre otras cosas porque en España vivimos en un régimen parlamentario donde el debate político y los cambios políticos se dan a partir del debate parlamentario. Y el hecho de que haya un gobierno ejerciendo no implica que el debate parlamentario desaparezca. Además una abstención facilitaría la comunicación entre los grandes partidos de España para poder llegar a acuerdos parlamentarios para impulsar las reformas que el país necesita.

-Por último, ¿qué te parece el acuerdo con Mercosur?

-Personalmente, creo que facilitar el intercambio comercial siempre es un avance y una gran oportunidad para todos. Es verdad que el campo en España puede tener un problema de competitividad, pero ante eso hay que responder con mecanización y productividad.

Por ejemplo Nueva Zelanda, que tiene una gran libertad de comercio con el resto del mundo nos demuestra que la agricultura puede ser un sector pujante. Es decir, que es un sector que más allá de la protección pública puede ser competitivo y sobrevivir. Lo que hay que hacer es adaptarse.

El acuerdo de Mercosur es una necesidad entre dos economías que hasta ahora han estado poco integradas. Sería un error que España se distanciará de Latinoamérica. No podemos plantear un futuro donde vivamos con sectores económicos que dependen de la protección pública, porque eso no es sostenible.