Celebrity coins: De la falsa cripto de Cristiano Ronaldo al NFT de Trump

Durante los últimos días han circulado rumores de que el futbolista más famoso del planeta, Cristiano Ronaldo, iba a lanzar su propia criptomoneda: el CR7 token. La noticia de estas nuevas celebrity coins corrió como la pólvora en redes sociales y atrajo a miles de personas que quisieron invertir rápidamente. Sin embargo, la realidad era otra. Se trataba de un fraude: algunos oportunistas aprovecharon la fama del actual jugador del Al Nassr para crear monedas digitales falsas y venderlas como si fueran oficiales.

En cuestión de minutos, uno de esos supuestos tokens de Ronaldo llegó a mover más de 140 millones de dólares, pero enseguida perdió casi todo su valor, dejando a muchos inversores con fuertes pérdidas.

En realidad, Cristiano Ronaldo nunca anunció una criptomoneda propia. Su única incursión en este terreno ha sido a través de colecciones de objetos digitales (NFT) en colaboración con la plataforma de trading de criptomonedas Binance. Los expertos recuerdan que este tipo de engaños son frecuentes: se crean monedas con el nombre de una celebridad, se inflan artificialmente los precios y después desaparecen los promotores.

Las celebrity coins más conocidas

El consejo de los analistas es claro: desconfiar de supuestas criptos de famosos y comprobar siempre en canales oficiales si existe realmente un proyecto detrás. La incursión de caras conocidas en este mundo no es nuevo.

En los últimos años, es habitual que figuras del mundo del espectáculo, la música, el deporte y la política hayan decidido sumarse a la ‘fiebre’ de las celebrity coins lanzando sus propios activos digitales. Sin embargo, la mayoría de estos proyectos acabaron entre la polémica, la falta de credibilidad o, directamente, el abandono. A través de este reportaje, analizamos los casos más destacados, qué sucedió después y qué enseñanzas deja este fenómeno.

Donald Trump: de crítico a vendedor de NFT

El presidente de Estados Unidos fue, durante años, un detractor del mundo cripto, al que tachaba de «peligroso». Sin embargo, en 2022 sorprendió con el lanzamiento de su colección de NFT Trump Digital Trading Cards, vendidas como cromos digitales con su imagen en poses de superhéroe o vaquero.

El proyecto fue un éxito inicial: se agotaron en cuestión de horas y recaudó millones de dólares. No obstante, con el tiempo el valor de reventa se desplomó y hoy esas colecciones tienen más valor como curiosidad política que como inversión rentable.

Elon Musk: el hombre que mueve Dogecoin

El CEO de Tesla y SpaceX no ha lanzado una criptomoneda propia, pero su influencia en el mercado es innegable. Musk ha sido el gran impulsor de Dogecoin, una criptomoneda nacida como broma en 2013 y que alcanzó picos de capitalización millonarios gracias a sus tuits.

Aunque no es su creador, su implicación ha sido tal que muchos lo perciben como una figura casi oficial del proyecto. Dogecoin sigue existiendo, pero muy lejos de sus máximos históricos, y la comunidad cripto lo ve como un ejemplo de cómo el poder de una celebridad puede inflar artificialmente un mercado.

Kim Kardashian: una multa millonaria

La estrella de los realities estadounidenses se vio envuelta en una polémica con la criptomoneda EthereumMax (EMAX). En 2021, promocionó el token en sus redes sociales sin advertir de manera clara que se trataba de publicidad pagada.

La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) intervino y le impuso una multa de 1,26 millones de dólares. El caso se convirtió en uno de los ejemplos más mediáticos de lo que se conoce como celebrity shilling: cuando famosos promocionan proyectos cripto de dudosa credibilidad.

Caitlyn Jenner: un lanzamiento fugaz

La exatleta olímpica y estrella televisiva anunció en 2024 el lanzamiento de su propio token, JENNER, en la red Solana. La noticia generó una fuerte expectación en redes sociales, pero pronto aparecieron dudas sobre si se trataba de un proyecto legítimo o una maniobra especulativa.

El token tuvo un pico de actividad inicial, pero al poco tiempo perdió tracción y su valor cayó en picado, pasando a engrosar la larga lista de memecoins de vida corta.

Dalas Review: la apuesta española

El youtuber español lanzó la memecoin Pambicoin (PAMBI) en mayo de 2024. El token se disparó tras el debut, pero dos días después acumulaba una caída del 91,4%, dejando atrapados a muchos compradores iniciales. La moneda se listó en el exchange BitMart, al que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ya había calificado como «chiringuito» no autorizado para prestar servicios de inversión.

Dalas Review defendió públicamente que no vendió sus monedas, sino que movió fondos a un wallet secundario; aun así, la confianza se evaporó y, pocas semanas más tarde, impulsó un segundo intento con PAMBII. A día de hoy, el proyecto original de Pambicoin permanece con baja liquidez y cotizaciones testimoniales, recordando lo volátil que es este tipo de activos cuando dependen del tirón de un influencer.