Ingrid Graells, TTC: "Lo difícil no es crear tecnología para el turismo, sino que esta perdure en el tiempo"

Hablando con Ingrid Graells uno percibe de forma inmediata su pasión por un turismo más innovador, sostenible y humano. Presidenta desde 2024 del Tech Tourism Cluster (TTC) y con más de dos décadas de experiencia en Beroni, su visión combina tecnología y colaboración empresarial para transformar el sector. Firme defensora del talento y de la visibilidad femenina, su trayectoria inspira a las nuevas generaciones a abrirse camino sin renunciar a sus valores.

– Has trabajado más de dos décadas en Beroni. ¿Cómo ha evolucionado el turismo desde que empezaste y cuál es tu papel actual en Tech Tourism Cluster?

El turismo ha evolucionado muchísimo. Siempre ha sido un sector resiliente y muy adaptable, pero también ha experimentado cambios muy rápidos, especialmente para responder a las necesidades de una industria global como la nuestra, que se basa en mover viajeros y acercarlos a nuevas culturas.

En estos 25 años que llevo dedicada al sector del turismo he vivido una transformación profunda, especialmente digital, pero también cultural, en la manera de trabajar y de entender las distintas culturas empresariales. Al final, el turismo funciona a nivel global y exige colaboración entre empresas de todo el mundo.

Anticiparse a las tendencias, clave del éxito

– Como pionera en la transformación tecnológica del sector, ¿cuáles dirías que han sido tus mayores aciertos profesionales a la hora de anticiparte a las tendencias?

En tecnología, es fundamental conocer las disciplinas emergentes y saber adaptarlas a las necesidades reales de los usuarios que son, al final, los que mueven a esa industria. En turismo, hay que tener en cuenta dos realidades distintas pero que caminan siempre de manera paralela y que son las necesidades de los usuarios B2B y las del público final, el usuario B2C. Ambos demandan tecnología, pero con necesidades diferentes y como ya he dicho, siempre caminan en paralelo.

El mayor acierto, tanto personal mío como de Beroni, ha sido apostar fuerte por la consultoría y la formación para nuestro público, no solo a los clientes, sino también a nuestros colaboradores. Porque lo difícil no es crear tecnología, lo difícil es que esa tecnología perdure en el tiempo. Consiste en dar ese servicio posventa en el que esa tecnología que se ha creado se adapte a la evolución del propio tiempo. Este sería uno de los grandes aciertos de la compañía en general.

A nivel personal, he tenido la suerte de crecer profesionalmente en áreas que me han dado un profundo conocimiento no solo técnico, sino también de los desafíos reales a los que se enfrentan los clientes a la hora de adoptar todo ese proceso de digitalización. Mi objetivo: tener una comprensión mayor sobre cómo poder acertar con las disciplinas tecnológicas y que sean realmente soluciones que impacten en la industria y que perduren en el tiempo

Sostenibilidad, tecnología y turismofobia: el gran reto

– ¿Cómo hacer confluir sostenibilidad, calidad turística y tecnología ante retos como la turismofobia o la masificación?

Se trata de un tema que preocupa muchísimo a la industria. Hace años, la prioridad del sector era democratizar el viaje: que cualquiera pudiera viajar al otro lado del mundo. Hoy vivimos el otro extremo, en el que esa democratización se ha producido gracias, en una parte muy importante, a la tecnología tanto en el ámbito facilitador como transformador cultural, pero nos ha generado problemas de saturación que impactan a nivel social, económico y medioambiental.

La buena noticia es que, como sociedad, tenemos capacidad para detectarlo ya que se trata de un problema de sociedad y de país que está encima de la mesa de muchos gobiernos. En esta línea, la tecnología va a seguir jugando un papel determinante. Ya existen plataformas capaces de gestionar flujos turísticos, distribuir a los visitantes y evitar la concentración en un único punto. Esto no significa perder turistas, sino organizarlos mejor para que no vayan todos al mismo sitio y a la misma hora, ya que ya se ha visto que tiene un impacto negativo en las tres áreas: económica, medioambiental y social.

De todas formas, la sostenibilidad no es solo medioambiental. Es también económica y social. La tecnología, cuando se diseña bien, puede cruzar estas tres áreas. Podemos redirigir visitantes a zonas menos conocidas, pero con un gran valor, para equilibrar el impacto y generar beneficios en todo el territorio.

Clústeres para cooperar y visibilizar

– ¿Qué papel tienen los clústeres como el vuestro en visibilizar a las mujeres líderes y en aportar soluciones a estos retos? ¿Existen otras iniciativas como la vuestra en otras ciudades de España?

Clústeres especializados en tecnología aplicada al turismo no somos tanto. El primero se constituyó en Baleares, nosotros somos el tercer clúster que se constituyó en España, y en solo tres años hemos reunido a 122 socios. Eso es una declaración de intenciones de que en el territorio era necesario  reunirnos para compartir conocimiento para luego poder cocrear proyectos.

En un país de pymes y micropymes como el nuestro, trabajar de forma colaborativa es vital. El clúster aporta una hoja de ruta común, gracias a ese conocimiento compartido facilita que las ideas se conviertan en realidad. A veces, como empresas tecnológicas, podemos desenfocarnos de lo realmente relevante a nivel social. El clúster nos ayuda a mantener el rumbo.

Tenemos grandes ejes de acción, y uno clave es el talento. Por eso trabajamos con universidades y entidades del conocimiento. También aplicamos la filosofía del valor compartido, entendiendo la sostenibilidad desde la perspectiva de la empresa: económica, social y medioambiental.

– ¿Qué herramientas ayudan a las pymes a implementar políticas de igualdad y visibilidad femenina?

Desde el clúster promovemos buenas prácticas y proyectos que faciliten a las empresas aplicar políticas de igualdad. Muchas de nuestras empresas ya participan en estos programas, y hemos visto un aumento en los programas de prácticas y formación dual en carreras STEAM.

Las mujeres tenemos un gran potencial creativo, pensamiento crítico y estamos más acostumbradas a la resolución de problemas. Son habilidades esenciales tanto en la vida como en tecnología. El problema es la falta de visibilidad. Existen muchas mujeres en tecnología aplicada al turismo, pero existen barreras a la hora de participar en foros, ponencias o consejos de administración, que es algo que promueve la visibilidad y los referentes.

Si compartimos fotos en Linkedin donde no hay mujeres o su presencia es muy minoritaria es  muy difícil que las nuevas generaciones vean oportunidades en este sector.

Por ello, necesitamos referentes y esto lo he visto en mi propia experiencia como presidenta del TTC. Al estar al otro lado ves cómo hay seguimiento del público tanto de nuevas generaciones de mujeres como de aquellas que no lo son, que se dedican al sector tecnológico y que quizás no han promocionado más dentro de sus carreras por tener esa falta de referentes.

Con lo cual, en primera persona te puedo decir que lo he vivido y que no tenía esta percepción antes de ocupar este puesto y de ver al otro lado cómo sí son necesarios estos referentes, sobre todo en sitios de responsabilidad, directivos y consejos de administración, donde realmente nuestra visión más crítica y nuestra creatividad puedan tomar un papel importante en las decisiones que se vayan a tomar en el ámbito de la industria.

Centrarse en el talento

– ¿Tú has vivido obstáculos en tu carrera o los has percibido al liderar el clúster?

En mi caso concreto, al asumir la presidencia del Tech Tourism Cluster, todo ha sido positivo. Más que centrarnos en mujeres u hombres, creo que debemos hablar de talento. Yo he tenido la suerte de rodearme de profesionales con talento, independientemente de su género. Y el talento es lo que permite dar oportunidades a las personas que tenemos al lado.

Yo me considero afortunada porque ese talento que da la primera junta fundadora del clúster éramos hombres y mujeres. Pero, finalmente éramos personas con mucho talento que creemos en dar oportunidades a los profesionales que tenemos al lado.

En el sector tecnológico aplicado al turismo es muy importante elegir profesionales con talento que estén a tu lado y los que estamos en posiciones de responsabilidad tenemos el poder de dar esa oportunidad.

En TTC siempre ha habido compañías muy comprometidas desde su nacimiento con personas que realmente tienen mucho talento y que contribuyen a dar esas oportunidades, indistintamente si eres un hombre o una mujer.

TravelTech del presente y del futuro

– ¿Qué tendencias ves como clave en el futuro del turismo tecnológico? ¿En qué trabajáis actualmente?

La inteligencia artificial es ya una realidad, no el futuro. Y sobre ella se construyen otras disciplinas clave como la robótica y el blockchain. Estas tres tecnologías están transformando la forma de desarrollar software y están democratizando el acceso tecnológico, incluso para las pymes.

En el clúster ya tenemos empresas de referencia que prototipan robots para mejorar la experiencia en los aeropuertos o cómo estos en los hoteles pueden apoyar servicios de recepción o servicios de logística.

Y concretamente, a lo mejor en agencias de viajes y otros servicios que no necesitan tanto
de la presencialidad operativa, pero sí necesitan herramientas como chatbots, asistentes
virtuales o todo lo que es la gestión del dato.

De hecho, la inteligencia artificial nos ha permitido manejar una cantidad de datos y facilitar a plataformas que nos den conclusiones y que tomen decisiones teniendo en cuenta esos datos. Todo ello con la base de la computación cuántica y computación en la nube, que ha sido realmente el gran clic, que ha permitido que los que nos dedicamos a desarrollo de software realicemos unas aplicaciones que, a día de hoy, todas las empresas pueden acceder. Yo creo que esa ha sido la gran evolución, que en 2025 esto ya es una realidad de hace unos años.

Antes, quizá la tecnología, por accesibilidad de desarrollo tenía unos costes más elevados y ahora estamos hablando de que casi todo el software es SaaS. Esto permite ese pago por alquiler de uso que ha permitido al usuario acceder a una tecnología que, quizás hace tan solo cinco años atrás no era tan accesible porque requería de una inversión económica más importante y de un gran aprendizaje.

A día de hoy las disciplinas como la IA, el blockchain y la robótica son claves para disponer de softwares muchísimo más versátiles y fáciles de aprender, lo que redunda en mayores beneficios para las pymes que van a usar esa tecnología. 

Integrar lo personal con lo profesional

– ¿Qué te parece la iniciativa Mujeres al Timón de Economía 3 para dar visibilidad a mujeres líderes como tú?

Me encanta. Iniciativas como esta son fundamentales porque permiten dar visibilidad a mujeres que lideran desde el talento y la experiencia real. Es un privilegio participar y compartir mi trayectoria, porque ese testimonio puede ayudar a otras mujeres en momentos clave de decisión profesional.

Creo que lo más inspirador es poder hablar desde lo vivido. Las mujeres, además, tendemos a integrar siempre lo profesional con lo personal, y eso también debe ser parte del discurso. Porque no es incompatible tener una carrera exitosa y una vida personal satisfactoria. Solo necesitamos herramientas, y proyectos como este ayudan precisamente a ofrecer esas herramientas y a mostrar que el camino es posible.