Avanza lentamente la reconstrucción de los municipios afectados por la DANA que golpeó la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre. Los pueblos de la ‘zona cero’ enfrentaron la última semana con prudencia y preocupación debido a una nueva alerta por otro temporal. Afortunadamente, esta segunda DANA no causó grandes daños materiales, lo que permitió que las labores de limpieza y desescombro continuaran, pese a las complicaciones ocasionadas por las recientes lluvias.
La operatividad de las infraestructuras en la provincia se va recuperando gradualmente, como demuestra la reactivación de la línea de AVE Valencia-Madrid, mientras continúan las labores de limpieza. Sin embargo, aún queda mucho por hacer para restablecer la normalidad en los municipios afectados y para que tanto servicios públicos como empresas privadas puedan reconstruirse por completo.
Más de dos centenares de fallecidos
El último balance oficial del Centro de Integración de Datos del pasado jueves sitúa en 216 la cifra total de víctimas mortales registradas a causa de la DANA, mientras que la cifra de desaparecidos continúa en 16. A todas las personas fallecidas se les ha practicado ya la autopsia y todas ellas están también plenamente identificadas.
De las 216 identificaciones, 168 se han producido gracias al análisis de huellas dactilares y 45 por ADN, mientras que tres casos se corresponden con identificación hospitalaria en vida.
Más de un centenar de las víctimas mortales contabilizadas hasta ahora en la DANA de Valencia tenían 70 años o más de edad, y nueve eran menores.
Pérdidas en viviendas, vehículos e infraestructuras
Casi tres semanas después, sigue siendo difícil calcular la magnitud de las pérdidas ocasionadas por las inundaciones. Según datos del programa europeo de satélites Copernicus, aproximadamente 325.000 personas y más de 75.000 viviendas se encuentran en la denominada zona cero de la DANA que ha devastado la comarca de l’Horta Sud.
El temporal dejó más de 100.000 vehículos varados en las carreteras cercanas a las áreas más afectadas. Un total de 192.000 solicitudes de indemnización han sido ya presentadas ante el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), de las cuales hasta 110.000 están vinculadas con vehículos o automóviles
En cuanto a los costes de la reconstrucción tras la catástrofe, una primera estimación provisional del Gobierno y la Generalitat Valenciana señala que serán necesarios 2.600 millones de euros para restaurar las infraestructuras dañadas en la región.
Por otro lado, la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) calcula que las pérdidas en el sector agrario valenciano superan los 1.089 millones de euros. Solo los daños en cultivos agrícolas pendientes de recolección ascienden a 278 millones, siendo los más perjudicados los cítricos (192 millones), los caquis (54 millones), las hortalizas (24,8 millones) y los aguacates (7,2 millones).
Ayudas del Gobierno y de la Generalitat
Tan solo unos días después de las inundaciones, tanto Generalitat Valenciana como Gobierno de España se pusieron en marcha para lanzar ayudas para la reconstrucción de las zonas afectadas.
Hasta la fecha, el Gobierno de España ha anunciado dos paquetes de medidas para atender las necesidades derivadas de las inundaciones: un primer paquete de 10.609 millones de euros y un segundo paquete de 3.764 millones. Entre las medidas anunciadas, se contemplan ayudas directas sin límite de renta, que incluyen hasta 60.480 euros para la reparación de viviendas habituales, hasta 10.320 euros para la reposición de muebles y electrodomésticos, y hasta 36.896 euros para comunidades de vecinos. Además, se destinarán 3.500 millones de euros en indemnizaciones para familias y empresas que han perdido sus vehículos.
En el ámbito empresarial, el Gobierno financiará ayudas directas, que oscilarán entre 5.000 y 150.000 euros, con el compromiso de abonarlas en un plazo máximo de un mes. También se activarán prestaciones por cese de actividad equivalentes al 70% de la base de cotización.
Por otro lado, se pondrán en marcha medidas laborales y fiscales específicas. Entre ellas, se incluyen los ERTEs para trabajadores con actividad suspendida, sin coste para las empresas, y la incapacidad temporal extraordinaria por motivos físicos o psicológicos, con el cobro del 75 % del salario desde el primer día. Asimismo, se permitirá el aplazamiento del pago del IRPF y de las cuotas a la Seguridad Social.
Desde la Generalitat Valenciana se han aprobado 50 millones de euros para ayudas al alquiler de personas cuya vivienda haya resultado afectada por la DANA, que podrán ser de 800 euros mensuales y que se podrán solicitar hasta el 30 de junio de 2025. La Generalitat también ha aprobado medidas fiscales extraordinarias para ayudar a las familias y empresas afectadas, como deducciones en el IRPF de los gastos para hacer frente a los daños en la vivienda habitual o la exención del canon de saneamiento.
Demanda de empleados
Como consecuencia de la catástrofe, varios sectores se verán obligados a contratar personal para colaborar en las labores de reconstrucción. Uno de los más afectados es el sector de la construcción, que ya enfrentaba una escasez de trabajadores antes del impacto de DANA. Según la Confederación Nacional de la Construcción (CNC), antes de la catástrofe se estimaba un déficit de 700.000 trabajadores necesarios tanto para la edificación de viviendas como para abordar los desafíos en infraestructuras financiados por fondos europeos. Ante esta situación, la patronal solicita un «plan de choque masivo» con carácter de «máxima urgencia» para agilizar la contratación de personal, especialmente enfocado en jóvenes, mujeres e inmigrantes.
Otro sector afectado es el de la limpieza en Valencia, donde se requieren con urgencia 5.000 operarios cualificados para atender las necesidades en las zonas damnificadas. Entre las prioridades figuran especialistas en manejo de maquinaria pesada para la retirada de escombros y vehículos, así como trabajadores para labores de desescombro, saneamiento, limpieza y desinfección. Las asociaciones sectoriales Afelin y Apelva han puesto en marcha una bolsa de empleo para facilitar la conexión entre la oferta y la demanda de trabajadores cualificados. Además, instan al Gobierno a acelerar la incorporación de personal, ya que el sector enfrenta una notable escasez de trabajadores debido al elevado absentismo laboral.
Solidaridad empresarial y ciudadana
Si algo positivo se puede sacar de esta situación, es la solidaridad sin límites que, tres semanas después, siguen demostrando ciudadanos, empresas y organizaciones.
Por la parte empresarial, numerosas compañías siguen poniendo en marcha medidas para ayudar a los afectados por el temporal, incluidos sus propios empleados que en algunos casos también han perdido sus vehículos o sus viviendas. A las donaciones millonarias de grandes compañías como Inditex o Telefónica, se siguen sumando otras iniciativas de apoyo que las empresas están lanzando con el objetivo de contribuir a la reconstrucción de los municipios.
Por ejemplo, Grupo Kutxabank ha propuesto a sus empleados la donación del sueldo de un día de trabajo, que el banco multiplicará aportando hasta un día del beneficio neto que alcance en 2024, con un mínimo de 500.000 euros. Los fondos recaudados irán destinados íntegramente a Cruz Roja para ayudar a las familias y empresas afectadas.
Otra medida es la anunciada por Endesa, que condonará la próxima factura mensual de luz y gas a sus clientes en los municipios afectados por la DANA en la Comunitat Valenciana y Castilla-La Mancha, de acuerdo con el listado de localidades especificado por el Gobierno central.
Las dos grandes cadenas de supermercados Consum y Mercadona han puesto en marcha ayudas para sus empleados. La compañía de Juan Roig ha decidido realizar una donación de 40 millones de euros para ayudar a todos sus empleados afectados por las inundaciones, mientras que Consum ha puesto en marcha un plan de donaciones a fondo perdido y préstamos a 0% interés para ayudar a los cerca de 1.000 trabajadores de su plantilla que han sido afectados.
Similar a las iniciativas implementadas por Mercadona y Consum para apoyar a sus empleados afectados, la empresa valenciana Gastraval lanzará tres líneas de financiación para ayudar a su personal damnificado por la DANA. Estas líneas están destinadas a cubrir la reparación y reconstrucción de viviendas, el acceso a vehículos nuevos para quienes los hayan perdido o sufrido daños, y la reposición de pertenencias personales.