Mujeres al Timón
La actividad hotelera en la provincia de Castellón no logra repuntar y a los malos resultados de la pasada primavera se suman los de la recién concluida campaña estival, que cierra con una caída del 58,5 por ciento de las estancias con relación a 2019. De julio a septiembre los 185 hoteles que abrieron sus puertas totalizaron 773.000 pernoctaciones, frente a las 1,8 millones de estancias contabilizadas el año anterior, según datos de la patronal Hosbec.
El informe de situación realizado por la Asociación Empresarial Hotelera y Turística de la Comunitat Valenciana, Hosbec, recoge que, pese a ese desplome de las pernoctaciones , la afección al sector provincial fue siete puntos menos que en la media de la Comunitat Valenciana, que sufrió un descenso de actividad del 65,5 por ciento. Consecuencia clara del efecto disuasorio de la pandemia de la Covid 19, que restringió la movilidad y que frenó la llegada de turismo internacional.
Un turista mayoritariamente español frente al 8 por ciento internacional. Visitantes que buscaron la costa y que hicieron que Peñíscola fuera uno de los 20 destinos más demandados, con 354.000 pernoctaciones registradas este verano, la mitad del total. Este turista permaneció de media 3 días en los hoteles, uno menos que años anteriores
En resumen la temporada estival deparó datos negativos que también afectaron al empleo. Y es que al ser un sector en el que el empleo es coyuntural, la decisión de no abrir todos los hoteles hizo que se generarán sólo 2.110 contrataciones, un 42 por ciento menos que hace un año.
Y las perspectivas del sector no son optimistas para este último trimestre del año y más tras las medidas de confinamiento perimetral acordadas por la comunidades autónomas. De hecho, son muchos los establecimientos que decidieron cerrar sus puertas ante la inexistente demanda de alojamiento y, como plantearon hace unas semanas desde Altur-Hosbec, los hoteleros se replantean la apertura de sus hoteles en Pascua y piensan ya en el verano de 2021.
