Mujeres al Timón
Los expertos de Cuatrecasas han recomendado este viernes a las empresas familiares alicantinas que revisen sus obligaciones contractuales, desde las establecidas en sus contratos de financiación hasta sus contratos intragrupo a fin de definir mecanismos que les permitan blindarse ante las consecuencias económicas que ha generado la pandemia.
Esta ha sido una de las directrices que se han dado durante el transcurso de una jornada que se ha desarrollado vía online, y que ha sido organizada por la Asociación de la Empresa Familiar de la provincia de Alicante y el despacho.
La directora del área de Corporate de Cuatrecasas, Marta Máñez, ha insistido en que para paliar los efectos de esta crisis y valorar si se puede dejar de cumplir, suspender o modificar las obligaciones contractuales se debe revisar el contenido de nuestros contratos y realizar planteamientos a nuestras contrapartes siempre desde la buena fe, buscando una redistribución equitativa del riesgo.
Por otro lado, la asociada del área de Corporate de Cuatrecasas, Lucía Trigo, ha abordado el impacto de las medidas adoptadas por el Gobierno en relación con las celebraciones de los consejos de administración, formulación, auditoría y aprobación de cuentas anuales;, así como en otros derechos de los socios, como el derecho de separación en caso de no distribución de dividendos regulado en el artículo 348 Bis de la Ley de Sociedades de Capital.
Respecto a esta medida, Trigo ha recordado que extienden los plazos para la formulación de las cuentas y “aunque no impide formular cuentas durante la vigencia del estado de alarma, nuestra recomendación es acogerse a lo dispuesto por esta normativa ya que, al tratarse de un hecho posterior al cierre, la memoria de las cuentas deberá incluir una nota sobre el impacto del Covid-19 y en estos momentos ese impacto puede ser difícil de determinar”.
Distribución de dividendos
La jornada formativa se ha cerrado con la intervención del también asociado de Cuatrecasas, Fernando Martínez. Se ha detallado, en concreto, una serie de acciones contractuales que se pueden adoptar en el seno de la empresa familiar para dotarla de los recursos necesarios y así poder cumplir con los compromisos adquiridos con los agentes implicados.
Entre estas medidas, se han abordado algunas centradas en las modificaciones de políticas de distribución de dividendos o los términos de pago de los contratos intragrupo suscritos, que según Martínez “pueden ser determinantes para mantener por una parte la cohesión de los socios en la empresa familiar y, por otro, para asegurar que la empresa cuente con los recursos necesarios para lograr los diferentes objetivos del proyecto empresarial”.
En el último tramo del encuentro virtual se ha aconsejado revisar los términos de los contratos de financiación a la luz de las circunstancias para determinar la necesidad de iniciar negociaciones con las entidades financieras y analizar la posibilidad de establecer contratos de cash pooling.
De igual forma, se ha puesto el foco de atención en la existencia de financiación alternativa a la bancaria y se ha hablado sobre las líneas de financiación pública recientemente aprobadas, que pueden ayudar a la empresa familiar a establecer medidas que la blinden frente a las consecuencias de esta crisis.
Esta primera sesión, que se enmarca dentro de un ciclo de tres sesiones, tiene como objetivo promover la reflexión entre los empresarios familiares para que adopten decisiones y sean capaces de anticipar soluciones a contingencias para afrontar la crisis socio-económica generada por la COVID-19.
En el resto de sesiones online se abordarán cuestiones fiscales y de reestructuración de pasivo, analizando las distintas situaciones que están experimentado las empresas.
