Adiós a Buffett: las inversiones más exitosas del ‘oráculo de Omaha’
Warren Buffett, el inversor más admirado del siglo XX y XXI, anuncia su retirada a los 94 años tras más de seis décadas al frente de Berkshire Hathaway. Deja un imperio valorado en más de un billón de dólares y lo pone en manos de Greg Abel, su sucesor elegido, en una transición que busca asegurar la continuidad de su legado financiero y filosófico.

La historia de Warren Buffett (Estados Unidos, 1930) se puede contar a través de sus inversiones. Su estrategia siempre se ha basado en unos fuertes pilares que le han llevado a ser considerado el mejor inversor del mundo y, por descontado, el título de ‘oráculo de Omaha’: buscar empresas sólidas, con ventajas competitivas duraderas y comprarlas a precios razonables.
Ahora, con 94 años y tras más de seis décadas al frente del conglomerado Berkshire Hathaway, el multimillonario empresario anuncia su jubilación. El icono mundial de las inversiones ha dejado claro, eso sí, que no venderá ni una sola acción de su compañía, que pasó de ser una empresa textil en problemas en 1965 a un holding de negocios con una capitalización bursátil de 1,15 billones de dólares en 2024.
¿La razón? Buffett destaca que es una decisión económica; también un voto de confianza a su sucesor: el actual presidente y director ejecutivo de Berkshire Hathaway Energy, Greg Abel.
«Creo que las perspectivas de Berkshire serán mejores bajo la gestión de Greg que bajo la mía. Puede que llegue el momento en que tengamos la oportunidad de invertir mucho dinero. Y cuando llegue ese momento, creo que puede ser útil para la junta directiva, el hecho de que sepan que tengo todo mi dinero en la empresa y ver lo que ha hecho Greg», afirmó durante la última reunión anual de inversores del grupo empresarial.
Algunas de las empresas más conocidas que forman parte de Berkshire Hathaway son Geico, Duracell, Dairy Queen y Fruit of the Loom, entre otras. Además, Buffett también tiene participaciones significativas en American Express, Bank of America o Chevron.
Considerado el quinto hombre más rico del mundo, según la revista Forbes, Warren Buffett se ha convertido en un ejemplo de éxito estadounidense y sus opiniones son de las más respetadas en el complejo mundo de las inversiones.
El origen
En los años 60, Buffett empezó a comprar acciones de una empresa textil en declive llamada Berkshire Hathaway. Finalmente, tomó el control y la transformó en el vehículo de inversión que usaría para adquirir y administrar empresas. Poco a poco, Berkshire se convirtió en un conglomerado con participaciones en seguros, ferrocarriles, energía, consumo, tecnología, etc.
Su estilo único le llevó a invertir a lo largo de su vida en marcas con moats (ventajas competitivas que protegen a una empresa de la presión de la competencia), como Coca-Cola, American Express, Geico, The Washington Post y Apple, que se convertiría en su mayor acierto. Su estilo combina paciencia, disciplina y un profundo análisis de los negocios, ignorando modas o pánicos del mercado.
Sucesión
¿Quién es el sucesor del ‘oráculo de Omaha’? Greg Abel (Canadá, 1962) parte con la ventaja de que cuenta con toda la confianza del ‘gurú financiero’. Abel es el actual presidente y director ejecutivo de la filial energética de la empresa, Berkshire Hathaway Energy, y ya sonó como posible sucesor de la compañía en 2021, pero no tomará el relevo hasta finales de año. No está claro todavía si asumirá también el papel de presidente.
Greg Abel comenzó su carrera como contable y se unió a Berkshire en el año 2000, cuando Buffett adquirió una participación mayoritaria en MidAmerican Energy, donde era presidente. Desde entonces, el empresario consiguió escalar posiciones y llegó en 2018 a vicepresidente de Berkshire Hathaway en las operaciones distintas al negocio de los seguros.
Bajo su dirección, la filial energética se ha convertido en un importante productor, contribuyendo a los más de 5.000 millones de dólares en beneficios en el primer trimestre de 2024.