“Si tenemos la Denominación de Origen pero no hay relevo generacional, esto se muere”

“Si tenemos la Denominación de Origen pero no hay relevo generacional, esto se muere”

Las primeras ñoras de la temporada en Guardamar han sido ya cosechadas. Septiembre abre la veda del proceso de secado para un producto único en la Comunidad Valenciana. Una variante del pimiento que se viene cultivando en territorio alicantino desde hace un siglo y medio y que se diferencia del resto precisamente por la manera en la que se seca antes de su venta al público.

La calidad del resultado le infiere a la variedad del pimiento cultivada en Guardamar un aroma y un sabor distintos a los del resto.  De momento, Ñora de Guardamar se ha ganado ya el reconocimiento de marca colectiva.

El siguiente paso debería ser poder alcanzar el de Denominación de Origen, mas lo que preocupa al sector no es precisamente eso. “A largo plazo nos gustaría”, reconoce Rubén Torregrosa, productor de ñora seca en Guardamar. Ahora bien, según indica, “si lo conseguimos pero no hay relevo generacional, esto se muere”. Esa, y no uno u otro reconocimiento en concreto, es la principal preocupación para lograr la supervivencia.

-¿Cuál es el origen de la ñora en Guardamar?

-Es un producto que se lleva cultivando aquí desde hace 150 años. Hay arqueólogos de la zona que han dejado constancia de ello. Hasta finales de los 60 siempre se había cultivado en secano, pero a partir del trasvase se abrió la posibilidad de hacerlo también en regadío. Fue muy importante también el avance de las dunas, que casi acaban por soterrar al pueblo. Es en esas dunas donde se lleva a cabo el secado.

-¿Qué tiene la ñora de Guardamar que no tienen otras?

-La diferencia es que en otros sitios la ñora se seca en hornos. El proceso tarda dos horas y lo que se produce es una deshidratación rápida. Aquí en Guardamar, el secado se produce en la arena y dura entre 15 y 25 días, no solo se deshidrata, sino que se fermenta. El sabor y el aroma resultantes es diferente a todo lo demás.

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Rubén Torregrosa, en su huerto de ñoras.

-Después de conseguir el distintivo de marca colectiva, ¿la meta ahora es el de Denominación de Origen?

-Sí es cierto que lo de la marca colectiva fue un primer paso para poder alcanzarlo. A largo plazo nos gustaría…pero faltan muchos años para que se pueda conseguir. La preocupación no es esa, la preocupación es que ahora mismo quedan siete u ocho personas mayores cultivando ñora y no hay relevo generacional. Es en lo que nos estamos volcando porque si no se consigue que sea interesante para la gente joven, esto se muere.

-Entonces, ¿cuál es el objetivo del sector en estos momentos?

-Lo importante no son las marcas, los nombres y los reconocimientos. Lo importante es llegar al consumidor y explicarle por qué la ñora de Guardarmar es mejor que otras. Queremos que el producto se distribuya bien. A este producto lo que le pasa es que no es conocido en un círculo amplio, lo conocen en algunos restaurantes pero el público en general no lo conoce porque en el momento de comprar no se ve la diferencia.


“En Facebook todos apoyan al comercio local, pero luego van al chino a comprar”

 -¿Cómo es posible que no se conozca un producto, el vuestro, que se utiliza en los platos más típicos de la Comunidad Valenciana?

-Lo primero, hay que diferenciar paella valenciana de arroces alicantinos. No es lo mismo, la paella no suele llevar ñora. En cuanto a los arroces alicantinos, sí es verdad que no es normal. Pero es como todo, los productos pueden ser muy buenos, es muy bonito el asunto ecológico, dar un me gusta en Facebook al incendio del Amazonas, a los gatitos, al comercio local. Pero el mercado es el mercado, algo así dijo Rodrigo Rato. Todos somos muy buenos en Facebook, pero luego vamos al chino a comprar lo que vale un euro.

-¿Cómo se puede competir contra eso?

-Es como todo. En teoría, un tomate ecológico, por poner un ejemplo, está más bueno. Y te lo dicen, los potenciales clientes te dicen que está más bueno pero luego en el día a día la cosa cambia. Es mi lucha diaria, con los productos ecológicos y de calidad, mas después Mercadona lo vende más barato y la gente lo compra allí. También los restaurantes. Se ha intentado buscar soluciones para reducir costes porque nuestro kilo tiene un precio de venta al público que oscila entre los 20 y 24 euros, y el industrial entre los 6 y 8 euros. Pero el tipo de proceso es tan diferente que no se puede.

 -Si no puede competir en precio con el resto y no se produce el relevo generacional, ¿por dónde pasa la supervivencia de la ñora de Guardamar?

-Tiene que aparecer gente que le ponga empeño, que trabaje en dar a conocer el producto, en producir, en crear productos que al mercado le interesen. Si las administraciones ayudan es interesante, pero si no se crean productos no va. Esto es un producto tradicional y ecológico, y es terroríficamente difícil de producir. Lo hemos intentado con alternativas como la salmorreta, una salsa de aquí de Alicante que lleva ñora frita en la receta, pero de momento no hemos encontrado a un fabricante con el que poder llevarlo a cabo.

-En cuanto a promoción sí habéis tenido apoyo de las instituciones.

-Sí, verdaderamente el del Ayuntamiento de Guardamar fue un apoyo muy fuerte, nos han ayudado mucho. Se nombró un consejo exclusivamente para tratar el asunto. Nos ayudaron en los trámites legales nos dieron un espacio en la feria gastronómica de Alicante de 2018 y 2019. En ferias de la plaza del Ayuntamiento nos han dejado también una carpa.

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Un Comentario

  1. Jose Cacin
    Mar 28, 2020 @ 19:13:31

    Hola, desde Inglaterra, estoy buscando productores de ñoras de Guardamar, y acabo de leer este artículo. Ustedes me pueden ayudar a contactar con el Sr. Rubén Torregrosa? Muchas gracias.

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