Ximo Puig  anunció que las obras del túnel de Serra Grossa estarán terminadas para el próximo 9 de octubre, tras una inversión de 9 millones de euros. La terminación del túnel supondrá un alivio importante en la circulación y, sobre todo, una mejora sustancial en el servicio del Tram desde la ciudad hacia las playas de San Juan, Campello e incluso Benidorm.

Puig aprovechó su comparecencia ante los medios tras la reunión con el alcalde de Alicante, Luis Barcala para reiterar el compromiso del gobierno autonómico con la Volvo Ocean Race y aseguró que solicitará del gobierno central apoyos financieros y exenciones fiscales.

Por otro lado, la Generalitat ha solicitado al Ayuntamiento de Alicante la cesión de terrenos para construir el centro de salud PAU 2. Puig señaló la necesidad del centro ante el futuro crecimiento de la zona y aseguró que a finales de año se iniciará la contratación para la redacción del proyecto. El president añadió que propondrá que Ayuntamiento de Alicante y Generalitat asuman inversiones conjuntas, a través de ayudas procedentes de Fondos Feder, en proyectos relacionados con la cultura, el turismo y la movilidad. Entre ellos, la recuperación arquitectónica y la accesibilidad al castillo de San Fernando.

Otro de los temas abordados fueron las obras del Corredor Mediterráneo que permitirán la conexión de las tres capitales con alta velocidad, así como con el aeropuerto Elche-Alicante, uno de los de mayor tráfico aéreo de España.

Barcala, que accedió a la alcaldía de Alicante tras una moción de censura contra el anterior equipo, coincidió con el president en la necesidad de que las instituciones se comporten con lealtad. «El centralismo -dijo Puig– es lo menos inteligente que se puede hacer desde la política (…) se ha intentado coser el territorio, las comarcas y las ciudades porque esa es la fortaleza real que tiene nuestra tierra».