El proyecto de presupuesto del Ayuntamiento de Castellón para 2018, fijado en 176 millones, ha recibido 73 objeciones, en forma de otras tantas enmiendas, registradas por los tres grupos políticos que conforman la oposición municipal. Entre ellas, algunas que exigen que se cumplan acuerdos plenarios ya adoptados. Entre las enmiendas figuran las 22 de Castelló en Moviment (CseM) que apoya al bipartito gobernante (PSPV y Compromís).

Ahora, la alcaldesa Amparo Marco y su equipo deberán negociar con los grupos políticos para encontrar los apoyos necesarios para sacar adelante el documento en el pleno. De momento, su socio fuera del ejecutivo, CseM, pide que se atiendan sus demandas, especificadas en esas 22 enmiendas planteadas. Igual de difícil lo tendrán Marco y el edil responsable de Gestión Municipal, Antonio Lorenzo, para llegar a consensos con PP y Ciudadanos.

Entre las 73 enmiendas figuran algunas que reclaman un millón de euros más para apoyar a las Pyme y a los emprendedores o las que pide el PP para reducir el gasto que tilda de “elevado”.

El pasado 9 de enero, la Junta de Gobierno Local aprobó el proyecto de presupuesto para este año cifrado en  176.029.349 euros, un 3,03% superior al del año anterior y el de mayor cuantía de la última década. La alcaldesa Marco indicó que el documento “consolida las bases del cambio y demuestra que este Gobierno municipal tiene proyecto”.  Y añadió que es «un presupuesto que confirma que este Gobierno municipal tiene un proyecto de ciudad. Porque hay un proyecto de ciudad claramente definido en el Plan General de Ordenación Urbana».