Dentro del entorno en el que nos desenvolvemos existen una serie de términos financieros, económicos y legales con los cuales debemos de familiarizarnos. Ya que conocer sobre ellos nos permite estar preparados ante cualquier situación que pueda presentarse. El término de sociedad patrimonial es uno que a muchos puede causar confusión en cuanto a las implicaciones legales que el mismo conlleva. El día de hoy trataremos de aclarar tus dudas para responder a las preguntas más frecuentes que existen sobre este tema legal.

¿Qué es una sociedad patrimonial?

Según lo estipulado en la ley, una sociedad patrimonial  es  aquella que no realiza ningún tipo de actividad económica, sino que su objetivo principal es la gestión de un patrimonio bien sea mobiliario o inmobiliario. Ante esto, es importante tener en cuenta que el concepto de las sociedades patrimoniales no es algo que exista realmente dentro del Registro Mercantil, como sí lo hacen otro tipo de sociedades, sino que se trata de un tipo de concepto que solamente tiene relevancia dentro del apartado fiscal.

Por lo tanto, al tratarse de un tipo de sociedad dentro de la cual no podrán realizarse actividades económicas, en esta sociedad no podrá involucrarse ningún tercero que procure gestionar los bienes con cualquier contrato en relación de dependencia. En pocas palabras, la sociedad patrimonial no podrá contratar a ningún tipo de empleado para realizar labores con ellos. Claro está, esto no es algo que impida la obtención de ganancias monetarias con este tipo de sociedad.

¿Para qué se constituye una sociedad patrimonial?

El primer motivo por el cual las personas se interesan en constituir una sociedad patrimonial es con el fin de gestionar mejor una serie de valores o propiedades. Todo esto de forma mucho más organizada y con responsabilidades repartidas. Como mencionamos con anterioridad, en este tipo de sociedad no se realiza ninguna actividad económica. Por lo tanto, mucho más del 50% de los activos de este tipo de sociedad no se encuentran afectos a ninguna actividad. Es gracias a esto que a este tipo de sociedades también se les conoce como sociedades sin actividad económica.

Aunque muchas personas suelen confundir el término de sociedad patrimonial con sociedad mercantil. Lo cierto es que no son lo mismo, pero una podría llegar a ser considerada como la otra. Esto se debe a que si una sociedad mercantil, una vez que ya está creada, no llega a hacer afecto de más del 50% de su activo en una actividad comercial, entonces, únicamente desde el punto de vista fiscal, pasará a ser reconocida como una sociedad patrimonial.

Tipos de sociedad patrimonial

Es importante destacar que existen tres grandes tipos de sociedades patrimoniales que pueden crearse y cada una de ellas varía según la intención que se tiene con la creación de la sociedad. Entre estas tenemos:

Sociedad patrimonial de tenencia de inmuebles

Las sociedades patrimoniales de tenencia de inmuebles es el tipo de sociedad es de las más comunes. Se refieren a aquellas que solamente poseen sus inmuebles para el uso o disfrute familiar. Bien sea como tiempo de descanso o por período de vacaciones.

Sociedad patrimonial de alquiler de inmuebles

Por otro lado, nos encontramos con la sociedad patrimonial de alquiler de inmuebles. Este es uno de los tipos de sociedades con las cuales se puede obtener una ganancia económica por tener una sociedad patrimonial. Esto se debe a que los inmuebles de la familia se colocan en alquiler. Pero eso sí, es fundamental que no se contrate a ningún tercero para realizar las actividades respectivas al alquiler. Tiene que ser una actividad de la cual se encarguen todas las personas que forman parte de la sociedad patrimonial en cuestión.

Sociedad patrimonial de tenencia de valores

Por último, pero no menos importante, se encuentran las sociedades patrimoniales de tenencia de valores. En este caso estamos ante un tipo de sociedad que, en cuanto a funcionamiento, es bastante similar a la de tenencia de inmuebles. La diferencia principal es que en este tipo de sociedad patrimonial se poseen valores y se gestionan por medio de inversiones que también pueden otorgarles ganancias a los miembros. Nuevamente sin poder contratar a nadie más para estar a cargo de estos valores.

Ventajas de las sociedades patrimoniales

La creación de sociedades patrimoniales es algo que puede otorgar muchas ventajas a las personas que participan en la misma. Primeramente, cabe destacar que es una idea perfecta para todas aquellas familias en las cuales hay un gran patrimonio. Ya que al formar una sociedad patrimonial tributarán solamente los impuestos de sociedades y no los impuestos de transmisiones patrimoniales. Los mismos pueden llegar a tener costos bastante elevados en algunas zonas del país. Además de esto, podrán ahorrarse el pago del IRPF para todos los inmuebles que no sean considerados como viviendas habituales.

Otra de las ventajas que otorgan las sociedades patrimoniales tiene que ver con el hecho de que se pueden desgravar gastos de mantenimiento. Específicamente de aquellos muebles que generen ganancias económicas. Del mismo modo, cabe resaltar que al formar una sociedad patrimonial todo lo que pertenezca al patrimonio familiar se encontrará mucho más protegido y no se perderá incluso en caso de quiebra. Por si fuera poco, cuando toque entregar una herencia será más fácil hacerlo si se cuenta con una sociedad patrimonial.

Desventajas de las sociedades patrimoniales

Claro está, así como se trata de un tema que tiene un buen número de puntos a su favor también es fundamental conocer cuáles son sus puntos en contra. Ya que, en efecto, hay algunas desventajas de las sociedades patrimoniales. Uno de los principales inconvenientes es que no es considerada una sociedad mercantil. Es por ello que una sociedad patrimonial no se beneficia de ningún modo del tipo reducido del 15% ante la creación de nuevas empresas. Tampoco de las dotaciones por insolvencia ni las ventajas que sí ofrecen las sociedades mercantiles.

Por otro lado, es importante destacar también que a este tipo de sociedades se le suelen aplicar una serie de medidas realmente severas en lo que respecta a la transparencia fiscal a nivel internacional. Y, lamentablemente, no pueden tributar como sociedades de tenencia de valores extranjeros. Por último, pero no menos importante, debes saber que cuando se realiza una transmisión de participaciones a estas no se les aplica la exención por doble plusvalía. Sin duda se trata de desventajas que hay que tomar en cuenta antes de crear la sociedad patrimonial.

¿Cómo se constituye una sociedad patrimonial?

El proceso a seguir para la creación de una sociedad patrimonial es algo simple que realmente no tomará tanto tiempo. En líneas generales, quienes quieran formar una sociedad patrimonial, en primer lugar, deberán de formar una sociedad mercantil. Por tanto, los primeros pasos a seguir son exactamente los mismos que en la creación de una sociedad mercantil. La diferencia clave es que se demuestre que más del 50% de sus valores no se encuentran comprometidos en ningún tipo de actividad económica. De ese modo pasará a ser reconocida como una sociedad patrimonial desde el punto de vista fiscal.