Uno de los términos económicos más importantes de la actualidad es el cártel de empresas. Se trata básicamente del acuerdo formal entre varias compañías de un mismo sector con el fin de regular y dominar el mercado. De esta manera, controlan todo lo relacionado con la producción y la oferta del bien para así tener la mayor cantidad de ventas posibles. Por consiguiente, es uno de los mecanismos más utilizados en la actualidad y que les brinda más ventajas a las empresas.

Por lo general, un cártel de empresas forma una estructura monopolística, así que los participantes más pequeños se ven excluidos del grupo. Con este sistema logran tener un mayor control de los precios y de la demanda, permitiéndoles hacer mejores proyecciones. En este sentido, los beneficios se dividen entre las organizaciones que forman parte del grupo y crean políticas para poder afianzarse en el mercado. Esto suele verse mucho en el comercio internacional, en el que hay diversas entidades que reúnen a algunas de las empresas más grandes del mundo.

¿Qué es un cártel en economía?

Un cártel de empresas es un equipo de diferentes compañías que buscan dominar lo que sucede en un mercado específico. De esta manera, lo que buscan es repartirse el mercado y no competir entre los mismos participantes por el beneficio mutuo. Para esto, suelen llegar a acuerdos para determinar el precio de los productos y la cantidad de oferta que existirá. Esto hace que los miembros del grupo tengan una posición privilegiada frente a las demás empresas del sector.

A pesar de las ventajas que ofrece un cártel, este tipo de organizaciones son ilegales en la mayoría de países del mundo. Reducen la competencia y la oferta de bienes. Además, brindan servicios a su antojo, lo que les da una ventaja competitiva frente a otras compañías. Por ello, son muy pocos los cárteles de empresas que existen en el mundo y un ejemplo de ello es la OPEP. Esta organización controla toda la producción y venta de la mayoría del petróleo a nivel mundial.

Principales características de un cártel

La principal característica de un cártel de empresas es la unión de varios negocios para controlar una porción del mercado. A partir de aquí, cualquier tipo de competencia se elimina en pro de la colaboración entre todos los participantes. A su vez, los precios son acordados periódicamente según la situación del mercado y la demanda actual del sector. Es por ello que al existir un cártel se crea una especie de burbuja que trae muchos beneficios para sus compañías, pero no para los que están fuera del grupo.

Muchos estados se han percatado de las consecuencias de estas estructuras y han prohibido su ejecución dentro de sus territorios. Prácticamente al no existir competencia, los clientes se ven en la obligación de pagar el precio acordado sin tener otra posibilidad. De esta forma, los beneficios suelen ser muy altos para las empresas del grupo, pero perjudican enormemente a todo el mercado. Hoy en día es difícil encontrar cárteles de empresas en algunos de los países occidentales, ya que las repercusiones legales son fuertes.

Objetivos principales del cártel

El objetivo de un cártel de empresas es crear un monopolio económico donde unos pocos ofrecen un determinado bien. Aquí la competencia se elimina por la colaboración, ya que unen esfuerzos para que todos los miembros obtengan beneficios. En consecuencia, los beneficios aumentan a niveles inimaginables, ya que se elimina cualquier competencia que pudiera existir. Los precios los establecen unos pocos con base en la demanda y oferta que existe en un determinado momento. Todo esto lo convierte en unas estructuras peligrosas para la economía.

Tener el poder sobre el mercado es otro de los objetivos que tiene un cártel de empresas. Esto se debe a que al unirse diferentes participantes se logran crear acuerdos de cooperación a cambio de beneficios por igual para todos. Por ello, cada miembro obtiene ingresos que dependen de los estatutos que hayan fijado previamente. Esto se diferencia a una situación normal de cualquier mercado, en el que los precios se fijan mediante oferta y demanda para satisfacer las necesidades de los clientes.

Ventajas de un cártel de empresas

Muchos especialistas señalan que los cárteles de empresas ofrecen ventajas muy interesantes. Una de ellas es que logran estabilizar el mercado al crear una sola oferta del bien en cuestión y eliminan los altos aranceles de importación. Por otro lado, las ganancias se distribuyen de forma justa y transparente entre los miembros del cártel. A su vez, se logra crear mejores estándares de producción de las mercancías, lo que beneficia a los clientes. Estos son algunos de los argumentos que indican los defensores de estas estructuras.

Un cártel es una gran oportunidad, pero para unos pocos privilegiados que puedan entrar en la organización. Las ventajas son muy grandes, ya que modifican todo el mercado según los intereses de las empresas. En consecuencia, se crea lo más parecido a un monopolio, donde unos pocos controlan a su antojo una gran porción del sector. De esta manera, los cárteles empresariales ofrecen numerosos beneficios a las compañías, pero a un coste muy alto para la economía. Por ello, ha sido prohibido por muchas naciones.

Desventajas de un cártel de empresas

Ahora bien, la principal desventaja de un cártel es que perjudica enormemente el ambiente macroeconómico de un rubro. Al monopolizar el mercado, los consumidores se ven obligados a tener una sola opción para comprar, eliminando así cualquier tipo de competencia. De este modo, solo unos pocos tendrán el poder sobre los demás, lo que elimina la participación de nuevos agentes en el mercado. Estas son unas de las desventajas más grandes de este tipo de estructuras que no incentivan el emprendimiento ni la libre empresa.

Además, debido a sus objetivos, suelen ser bastante excluyentes a la hora de admitir una nueva empresa en el grupo. Esto genera efectos perversos a nivel macroeconómico, ya que no da la oportunidad de que se desarrollen nuevos productos y servicios. Por consiguiente, todo se vuelve mucho más complicado para aquel que quiera penetrar en ese mercado. Todo esto perjudica enormemente a la economía general, lo que ha generado que diversos países impongan sanciones para aquellos que quieran desarrollar estos grupos empresariales.

Ejemplo de cártel

La OPEP es una organización que se comporta como un cártel de empresas, con la diferencia de que participan naciones. Aquí se crean diferentes acuerdos que buscan controlar el precio del petróleo y el futuro de este activo para los siguientes años. Por esto, el precio se establece mediante diversas conversaciones y políticas que se llevan a cabo entre todos los miembros. Así es como tienen como objetivo la estabilidad del barril del petróleo para que todos los países puedan obtener ingresos por igual.