El Ayuntamiento de València va a aprobar el próximo viernes en la Junta de Gobierno Local nuevas modificaciones fiscales para rebajar o eliminar algunas tasas municipales para ayudar a los sectores más afectados por la pandemia del coronavirus.

Así lo ha anunciado este martes el alcalde, Joan Ribó, que ha advertido además del «momento muy preocupante» que se vive por la evolución de la pandemia, con el nivel de contagios «disparado», y ha instado a los ciudadanos a «que se confine al máximo de sus posibilidades». Ribó ha detallado que por un periodo de seis meses, aunque «dejándolo abierto por si la situación se prolonga», se va a rebajar la tasa del alcantarillado y se van a eliminar las de sillas y mesas, mercados extraordinarios y quioscos.

«Hay muchos miles de personas autónomas que están sufriendo la situación y queremos ayudarlos por parte del Ayuntamiento y de todas las instituciones. Hemos previsto este viernes en la Junta de gobierno plantear una serie de modificaciones de carácter fiscal para rebajar o eliminar las tasas», ha sostenido.

«Estamos en un momento muy preocupante por la situación de la pandemia. El nivel de contagio se está disparando en la ciudad de Valencia, en la provincia y en el mismo ayuntamiento y por tanto, hemos de tomar todas las medidas a todos los niveles», especialmente de «prevención», ha indicado.

A su juicio, «es muy importante en estos momentos que la gente esté lo más posible en casa, que se confine al máximo de sus posibilidades y que respete escrupulosamente las normas que decretadas por parte de la Generalitat que -ha aseverado- a algunos nos gustaría que fueran un poco más estrictas».

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