Un ecosistema innovador, creativo y emprendedor estructurado y desarrollado abrirá «muchas puertas» a la Comunitat Valenciana para atraer la innovación a la ‘terreta’. Todo ello, hace de esta autonomía «una de las regiones más punteras en innovación» en España y Europa, según el director de Proyectos Europeos de la consultoría Crea 360, Alberto Lorente.

«La Comunitat Valenciana tiene un punto a su favor. El ecosistema innovador, creativo y emprendedor está bastante desarrollado y bien estructurado. En otras regiones es mucho más difícil y les falta estructura», asegura Lorente.

Por esto contexto, destaca que la autonomía valenciana, dentro del contexto español y europeo, tiene la ventaja de contar con un ecosistema innovador estructurado. «Ha sabido estructurar el ecosistema y está trabajando en ello. Eso le va a abrir muchas puertas de cara a atraer esa innovación», asevera Lorente.

En concreto, destaca que, a nivel español, la autonomía valenciana es «una de las regiones más punteras en innovación». Así, desgrana importantes hitos como la designación de València como Capital Mundial del Diseño 2022 o los proyectos de Distrito Digital. Además, añade que iniciativas como los congresos de emprendimiento e innovación son «muy importantes para que los agentes de desarrollo local nos podamos encontrar y hagamos intercambio de ideas».

Lorente: «La Comunitat ha sabido estructurar su ecosistema y es una de las regiones más punteras en innovación»

En la misma línea, apunta que la Comunitat Valenciana también está «por encima de la media» a nivel europeo, aunque matiza que Europa es «muy diversa» y cuenta con regiones más y menos avanzadas. «En muchos temas, la Comunitat Valenciana está a la vanguardia, eso se percibe en los proyectos en los que trabaja», sostiene.

Redes de cooperación

Sin embargo, el director de Proyectos Europeos en Crea 360 matiza que es posible aprender de otros países más avanzados, como Holanda, Dinamarca o Suecia, por lo que pone el acento en la cooperación. «En los puntos donde hemos avanzado mucho es necesario mirar hacia atrás y encontrar cuáles fueron los elementos que nos hicieron provocar ese cambio», indica.

«A veces, perdemos la perspectiva y es buena la cooperación con otras entidades o regiones que quieran abordar retos similares», explica Lorente, que apuesta por crear relaciones con otras regiones para encontrar soluciones.

Por ello, destaca la importancia de las redes de cooperación, el intercambio de buenas prácticas y la transferencia de conocimiento. «Son oportunidades para poner en contacto el territorio valenciano con otros agentes similares o que estén enfrentándose a retos parecidos en otros lugares del mundo», garantiza.

«Gracias a ese intercambio de experiencias se pueden encontrar nuevas soluciones. Es la innovación indirecta, salir para extraer ideas y encontrar soluciones nuevas a problemas que siempre intentamos resolver con la misma fórmula», apunta Lorente.

Alberto Lorente en un congreso | E3

Oportunidades perdidas

En este sentido, detalla que la Unión Europea, a través de diferentes programas, ofrece oportunidades de intercambio, desarrollo de innovación o desarrollo de capacidades para técnicos y ciudadanos. Además, señala que, en la mayoría de ocasiones, las empresas e instituciones públicas no conocen estas oportunidades y no las aprovechan.

«Creo que muchas veces no se conocen bien, no se saben afrontar bien y se pierden. Algunas instituciones sí las aprovechan, pero son muy pocas. Muchas veces, convocatorias bastante sencillas se suelen dejar a un lado; no se participa y se pierde ese dinero», lamenta.

En la misma línea, considera que, aunque siempre se podrían mejorar, hay bastantes líneas de colaboración entre regiones, aunque precisa que habría que «facilitar, agilizar y mecanizar los trámites para que todo el mundo pueda acceder». «Hay que fomentar más esos programas, favorecer la información sobre ellos para que todo el mundo, de verdad, pueda acceder; no solo los que están bien preparados», sostiene Lorente.

Lorente: «Convocatorias bastante sencillas se suelen dejar a un lado, no se participa y se pierde ese dinero»

En concreto, lamenta que los técnicos municipales de un municipio de 10.000 habitantes van «hasta arriba y no pueden afrontar un reto más como es aplicar a una subvención en inglés». «Las ciudades grandes, probablemente, tengan un propio departamento para esto y no les suponga nada de trabajo», explica.

«Deberían crearse esas estructuras para facilitar la participación en este tipo de proyectos europeos, dar mayor información y agilizar los trámites. O, por lo menos, poner facilidades para que estos trámites les sean más fáciles a todo el mundo», detalla.

Crear oportunidades para retener talento

Por otro lado, el también presidente de la delegación valenciana del Colegio de Geógrafos de España se centra en la retención del talento. Lorente admite que es «difícil» mantener el talento en su lugar de origen, aunque apunta a la creación de oportunidades para que «ese talento se desarrolle, encuentre oportunidades y tenga su hueco en la Comunitat».

«Si no le damos recursos, oportunidades de establecerse aquí, de poder desarrollarse profesionalmente; si no se ofrecen estructuras o sinergias, al final ese talento acabará por marcharse a otros lugares. Es un reto que hay que afrontar», subraya.

El problema demográfico es un reto de la Comunitat para tener un equilibrio regional al retener talento

Sin embargo, a este respecto, Lorente advierte que el problema no es únicamente que los mejores talentos emigren fuera de la Comunitat, sino que también apunta al equilibrio regional. Así, resalta que no es bueno que el talento se concentre solo en las grandes ciudades, como València o Alicante. «Hay ciudades medias o pequeñas que están perdiendo el talento», indica.

«Tenemos el problema del reto demográfico y la despoblación de pequeños municipios. Todas las familias quieren que sus hijos vayan a la universidad y tengan oportunidades, pero después hay que hacer que esas personas puedan desarrollarse en su territorio y aportarle cosas. Que no sean expulsados y tengan que irse a grandes ciudades a desarrollar y demostrar lo que valen; porque al final ese talento repercute en donde se marcha, no en el lugar donde ha nacido», lamenta.