El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar ha reconocido durante la presentación de los resultados semestrales de la entidad, que la banca vive “momentos de mucha presión porque los tipos de interés no solo no es que no suben sino que han ido a la baja y se encuentran en entornos negativos, por lo que tenemos la obligación de buscar cómo podemos compensar estos impactos negativos», ha señalado.

En concreto ha detallado, que se está en un retorno de recursos propios tangibles del 9,4% cuando el plan estratégico anterior fijaba un objetivo de estar entre el 9 y el 11% y «nos gustaría ir acercándonos a los objetivos del nuevo plan, que lo sitúan en el 12%».

Su Plan Estratégico 2019-2021 se elaboró en noviembre de 2018 con las estimaciones del mercado de futuros sobre tipos, que preveían una leve subida y una rentabilidad del 12%. No obstante, se contempló que en el caso de que finalmente no subieran «habría un impacto sobre la rentabilidad en 2021”, “de modo que en lugar del 12% sería del 10%, eso, si no hacíamos nada más».

Sin embargo, Gortázar no contempla esa hipótesis: «la idea de si no hacemos nada más, no es cierta, estamos gestionando la operativa del grupo para compensar los efectos negativos».

Al respecto, ha señalado el hecho de adelantar al 31 de julio la salida voluntaria de los 2.000 empleados según el acuerdo, con lo que el crecimiento de costes previsto pasa de un 5% al 3%, repercutiendo en un ahorro de unos 80 millones de euros.

Asimismo, ha detallado cómo CaixaBank ha acelerado las iniciativas de transformación de su red comercial: se avanza a junio de 2020 (y no a diciembre de 2021 como estaba previsto) el disponer de 600 oficinas Store, que cuentan con 2,8 veces más empleados que una oficina convencional y ofrecen una productividad por empleado un 19% superior.

«Es necesario avanzar rápido en un entorno que presiona en tipos con un impacto en cuentas de resultados. La buena marcha comercial mejorará los resultados en el futuro, aunque paradógicamente no se vea a corto plazo”, ha vuelto a recalcar Gortázar.

“Es inevitable que siga habiendo ajustes en la banca”

Con estos movimientos CaixaBank se ha querido «anticipar» porque ve «inevitable» que «siga habiendo ajustes» en el sector, tanto en España como fuera. «Estamos asistiendo a anuncios relativamente continuos porque hay presión en la actividad y por tanto hay que revisar la base de costes», ha insistido.

Su entidad, fijada en el horizonte del plan estratégico, no prevé más despidos hasta 2021 y «honestamente» confía su consejero delegado en que «después, tampoco».

Asimismo, tampoco contempla «operaciones corporativas» en España, porque la entidad tiene «un ritmo de crecimiento de la actividad positivo» y pueden afrontar «el desafío de costes sin necesidad de operaciones corporativas».

«La consolidación es una vía para reducir costes ante la presión estructural sobre los ingresos, pero nosotros hemos elegido otra», ha añadido Gortázar.

No se repercutirán los costes a los clientes particules

Otra forma de responder a la presión de unos tipos de interés que ya están en un entorno en negativo y que los mercados ya asumen que pueden ir a la baja, es repercutir los costes.

La entidad ha decidió que «no es adecuado repercutir los tipos a los clientes minoristas», pero sí lo está haciendo con “las grandes contrapartidas financieras y empresariales».

Aunque cree que la relación con los cliente particulares no será rentable solo con los depósitos por esta situación de los tipos, se buscará la rentabilidad «por el conjunto de la relación”, de ahí que se congratulen del número de clientes vinculados (con 3 o más producto) que han presentado en estos resultados, 8 millones, “esa es la manera construir una relación rentable», ha reconocido el dirigente.

El mercado soberano

En cuanto a la evolución de CaixaBank en bolsa, que en el día de ayer coincidiendo con la presentación de resultados su acción se dejó 0,14 euros (-6,03%), Gortázar ha dicho que el banco está teniendo «un cierto efecto de ajuste» como ocurría con otros valores del sector, pero que espera que se corrija.

No obstante, asegura que no todos los accionistas reaccionan el día de presentación de resultados, si no, que su impacto se ve a largo plazo, «por lo que en otras ocasiones ya se han visto recuperaciones importantes de la acción después de una reacción inicial negativa».

En relación a la reputación corporativa, ha apuntado que la sociedad debe valorar a CaixaBank por «las acciones que figuran en su hoja de servicios», y ha recordado que el 40% de los beneficios de su actividad se destinan a la obra social.

La actualidad política y económica

Asimismo, Gortázar ha asegurado que no aprecia «sobrecalentamiento» del mercado inmobiliario en España «más allá de alguna excepción», «pero es una evolución que hay que vigilar», ha advertido, aunque no ve riesgo que se creen burbujas en estos momentos.

Por otro lado, el consejero delegado de CaixaBank ha considerado que «la falta de gobierno no es una buena noticia» y ha confiado en que «los representante democráticamente elegidos trabajen en las próximas semanas para poner remedio y llegar a un acuerdo, confío en que así sea», ha dicho.

Por nuestra parte, ha añadido, «seguiremos haciendo nuestro trabajo y estamos a disposición para poder colaborar con el nuevo Gobierno y el Gobierno en funciones en lo que corresponde a nuestra actividad».