Chemservice se alía con Waterland para acelerar expansión global y compras clave

Chemservice, grupo de consultoría fundado en 2007 y especializado en asuntos regulatorios y tutela de producto para la industria química, ha alcanzado un acuerdo de asociación estratégica con el fondo europeo Waterland. La compañía, con presencia internacional y una filial en Castellón —Chemservice Iberia—, acompaña a sus clientes en el cumplimiento de la compleja legislación europea sobre seguridad de sustancias y mezclas, así como en la defensa de usos esenciales.

Como parte de esta alianza, el gerente y cofundador de Chemservice Iberia, el Dr. Jaime Sales Saborit, se incorporará al comité de dirección de la nueva entidad legal resultante. El objetivo: impulsar un ambicioso plan de expansión que combine crecimiento orgánico —aprovechando el tirón del mercado y el aumento de exigencias regulatorias a nivel mundial— con adquisiciones selectivas en un entorno altamente fragmentado.

Hablamos con Jaime Sales sobre el porqué de esta operación, su impacto en el equipo de Castellón y la hoja de ruta de Chemservice en un contexto global marcado por normativas cada vez más complejas y por el debate en torno a la eficiencia regulatoria.

Un plan de expansión ambicioso

– ¿Qué factores llevaron a Chemservice a asociarse con un fondo como Waterland y qué beneficios estratégicos esperan obtener a corto y medio plazo?

Tras casi 20 años de actividad y después de analizar en profundidad las oportunidades que presenta el mercado a medio y largo plazo, el grupo Chemservice ha diseñado un plan de expansión ambicioso, tanto orgánico —aprovechando el sólido crecimiento del mercado y las exigencias regulatorias a nivel mundial— como mediante fusiones y adquisiciones en un entorno de servicios muy fragmentado como el nuestro.

Para ejecutarlo, identificamos a Waterland como un socio clave por su experiencia y visión en este tipo de operaciones. Se trata de un grupo europeo independiente de capital privado que apoya a emprendedores para que alcancen sus objetivos de crecimiento.

Actualmente gestiona más de 14.000 millones de euros en compromisos de inversión y cuenta con más de 200 profesionales en 13 oficinas ubicadas en 11 países. Es un inversor con amplia trayectoria en servicios profesionales y en distintos modelos de negocio en toda Europa.

– ¿Qué implicaciones tiene este acuerdo para la filial española, Chemservice Iberia? ¿Cómo afectará al equipo local y a sus operaciones en Castellón?

Para nuestra filial de Castellón, el acuerdo supone un espaldarazo a nuestras expectativas de desarrollo. En los próximos años prevemos un incremento significativo de oportunidades en América Latina, donde muchos países están desarrollando legislación propia sobre seguridad de productos químicos, con planteamientos muy similares a los europeos. En este sentido, Chemservice Iberia es el nexo entre el grupo y el área del Mercosur, donde además se espera avance en el tratado de libre comercio con la UE.

América Latina ofrece perspectivas muy relevantes, así como determinados países de Asia-Pacífico. En cuanto a sectores, vemos interés en la regulación farmacéutica y de productos sanitarios, materiales en contacto con alimentos, el desarrollo de procesos y productos químicos sostenibles, y la identificación y análisis de usos esenciales de sustancias potencialmente peligrosas. También es clave la evaluación rigurosa de alternativas desde el punto de vista de la seguridad y de los posibles impactos socioeconómicos asociados a la sustitución.

Desde Castellón también impulsamos las principales actividades de advocacy del grupo, una unidad dedicada a apoyar a los clientes mediante el desarrollo de argumentos técnicos para defender el uso de productos químicos sujetos a posibles restricciones, siempre que se demuestre que los riesgos están adecuadamente controlados y que se trata de aplicaciones esenciales para el funcionamiento de la sociedad europea.

Esperamos que esta sea otra palanca de crecimiento en los próximos años. Además, estamos en proceso de trasladarnos a nuevas oficinas en Castellón, ampliando superficie y abriendo la puerta a futuras incorporaciones.

Un contexto complejo y exigente

– En un contexto de creciente complejidad regulatoria global, ¿cómo se está adaptando Chemservice para anticipar y responder a estas exigencias?

En el ámbito regulatorio, anticiparse es fundamental. Trabajamos con las principales normas europeas, como el Reglamento REACH (registro, evaluación, autorización y restricción de sustancias químicas) y el Reglamento CLP (clasificación, etiquetado y envasado), además del Reglamento de Productos Biocidas y la Directiva sobre el manejo de sustancias carcinógenas, mutágenas o reprotóxicas en el trabajo. Estos marcos incluyen procesos complejos que pueden tardar años desde su inicio hasta su impacto real en las empresas.

Identificar, analizar y comprender esos impactos en fases tempranas es esencial para garantizar la viabilidad futura del negocio químico y diseñar estrategias eficaces. Por desgracia, en no pocas ocasiones la industria llega tarde a los momentos clave de decisión —por ejemplo, en el marco de REACH—, lo que genera barreras que podrían haberse evitado o minimizado, e incluso conllevar cierres o relocalizaciones fuera de la UE de determinadas actividades.

– El mercado de los servicios regulatorios es altamente técnico y competitivo, ¿cuál es el principal valor añadido que ofrece Chemservice?

Chemservice es una de las pocas consultoras que ofrece un abanico integral de servicios en todas las áreas del cumplimiento regulatorio europeo. Destacan la toxicología y ecotoxicología, los registros internacionales, la evaluación del riesgo químico, la comunicación y el cumplimiento a lo largo de la cadena de suministro, el análisis de impacto socioeconómico, las relaciones con reguladores y la gestión de consorcios (agrupaciones de empresas que colaboran para cumplir conjuntamente con una regulación cada vez más exigente).

Nuestra capacidad para asesorar de forma global permite desarrollar estrategias regulatorias de largo plazo que aportan ventaja competitiva, yendo uno o dos pasos más allá del tradicional «cumplir y basta» en el que se centran muchas consultoras.

Los retos del sector

– ¿Está la legislación europea sobre productos químicos en el foco del debate sobre la necesidad de “desregular”, como ha señalado recientemente Mario Draghi?

Sin duda, el sector químico es de los más regulados en Europa. A nuestro juicio, el reto no es tanto la «sobrerregulación» como la eficiencia regulatoria. Es evidente que las sustancias peligrosas deben estar adecuadamente controladas e, incluso, ser eliminadas o sustituidas cuando sea posible —lo que, por cierto, abre oportunidades a empresas innovadoras que desarrollen soluciones más sostenibles, un ámbito en el que hemos apoyado a varios clientes—.

Pero estas decisiones han de basarse en planteamientos realistas y evaluaciones científicas sólidas centradas en la gestión del riesgo. No distinguir bien entre peligro (propiedades intrínsecas) y riesgo (probabilidad y consecuencias) conduce a medidas desproporcionadas en algunos casos. Nos encontramos con sustancias que, por efectos observados en animales a dosis muy elevadas —no representativas de la exposición normal en usos industriales—, pueden acabar prohibidas en Europa pese a ser críticas para semiconductores, baterías o materiales médicos.

De hecho, la propia UE ha declarado algunas de ellas como Materias Primas Críticas para alcanzar objetivos estratégicos.

La protección de la salud y el medio ambiente debe ser la prioridad, pero existen mecanismos de control para evitar riesgos inaceptables antes de llegar a restricciones o prohibiciones que, a veces, provocan daños colaterales no previstos. Por supuesto, la industria debe contribuir con soluciones que eviten repetir casos negativos del pasado y minimicen la exposición a sustancias potencialmente peligrosas.

El futuro de Chemservice

– ¿Cómo visualizan el futuro de Chemservice en los próximos cinco años? ¿Qué metas estratégicas se han marcado como prioritarias en este nuevo capítulo?

Nuestro objetivo principal es un crecimiento sostenido que nos permita ofrecer un servicio más integral y de mayor calidad a los clientes, además de desarrollar nuevas oportunidades en mercados donde hoy no somos activos. Aspiramos a convertirnos en uno de los grupos de referencia en Europa en consultoría de regulaciones sobre seguridad de productos químicos, maximizando el valor de nuestra experiencia y de la nueva asociación estratégica con Waterland.