Borja Pellicer, CEO de Bet Solar, se define a sí mismo como «un amante de las renovables». Con unos ahorros de 15.000 euros puso en marcha una empresa que hoy es referente en el sector. En apenas ocho años, la compañía ha logrado alcanzar los 200 millones de euros de facturación en su último ejercicio. Entre sus principales hitos la compañía de distribución técnica de soluciones de energía ha sido elegida recientemente como partner para toda España de las baterías de uso residencial Powerwall de Tesla.
Crear una empresa cuando el resto cierra
– ¿Qué es Bet Solar y cómo surgió la idea de ponerlo en marcha?
Yo trabajaba para un fabricante de baterías en la parte técnica y me di cuenta de que cuanto más sabías más fácil era poder vender. Aprendí mucho en la empresa, pero por temas de gerencia no llegó a funcionar como tocaba y entré en una empresa de distribución antes de crear Bet Solar. Esto también me vino bien para poder analizar cómo funciona una empresa. Pero me di cuenta de que el modelo no acababa de encajar con mi pensamiento.
La empresa nace en un momento supercomplicado en el sector. Soy un amante de las renovables desde siempre; de hecho, estudié un máster específico de ello. El movimiento más inteligente que hice fue crear Bet Solar en un momento en el que todo el mundo estaba cerrando empresas.
Es un tema un poco duro, pero aproveché la oportunidad porque financieramente no era una empresa fuerte, nació tan solo de mis ahorros, que eran 15.000 euros, y con un proyecto ilusionante junto a cuatro personas más. Siempre he creído que hay una necesidad energética y que hay que promover la energía fotovoltaica para poder mejorar las emisiones y el consumo de energía.
– ¿Qué servicios ofrece? ¿Cuáles son vuestras líneas de negocio?
Somos un distribuidor de material fotovoltaico, somos enlace entre origen y destino. Muchas veces la gente no entiende nuestra figura de distribuidor. Compramos material y lo vendemos y la habilidad está en hacerlo de una manera diferente para que te compren a ti y no a otro.
Trabajamos distintas líneas. Así, solo enfocados en fotovoltaica ya estamos en dos líneas: la aislada de la red, que son sistemas donde no llega la red eléctrica convencional, y desde que se puso en marcha el autoconsumo residencial, comercial e industrial.
Después, nos dimos cuenta de que había que electrificar la demanda que venía por el vehículo eléctrico, creamos una nueva línea de negocio: Bet e-Move, que es una empresa para dar soluciones de energía a puntos de recarga. Estamos pensando en ampliar otras líneas como la parte de aerotermia, que es el siguiente punto que me gustaría tratar para electrificar la demanda y hacer las viviendas más sostenibles.
Un crecimiento veloz
– Vuestro crecimiento en los últimos años ha sido exponencial y muy alto. ¿A qué se deben estas cifras tan excelentes?
En estos ocho años hemos pasado de dos millones a casi 200. Hemos ido duplicando facturaciones y creo que la clave es que empezamos en un sector que era el aislado, que era muy pequeño, de necesidad de reposición, pero que no tiene cifras muy potentes y, luego, cuando vino el boom del autoconsumo y la eliminación del impuesto al sol tuvimos contratos muy potentes con fabricantes.
Hemos cogido la ola del mercado, estuvimos en el momento adecuado, con una empresa muy sólida, con trabajadores muy comprometidos. También, nos ha acompañado mucho la necesidad de cumplir los objetivos del Acuerdo de París en 2025, 2030 y 2050.
Trabajamos con los mejores, con lo que todo el mundo necesita y pide, puede ser Huawei, Tesla…Y tenemos al cliente, que solo es profesional, muy fidelizado, con más de 3.500 clientes en España. Trabajamos con ingenierías, distribuidores de material, comercializadoras de energía…
– ¿Sigue en pie el objetivo de facturar 1.000 millones en 2027? ¿Cómo tenéis pensado alcanzar este objetivo?
El año pasado se dio la tormenta perfecta: la guerra de Ucrania, la escasez de material, la crisis logística… El distribuidor estaba en un momento dulce.
Sin embargo, el año 2023 está siendo muy duro por la macroeconomía, por la situación del país: suben los impuestos, el alquiler, los vuelos, las hipotecas… Y la fotovoltaica está sufriendo. A mí me parece que no debería sufrir porque se le asocia a un producto de consumo y, en realidad, es un producto de ahorro, que además dura 20 o 30 años.
Está siendo un año de limpieza y no de recesión. Nosotros vamos a mantener las cifras del año pasado. Tengo un convencimiento claro de que en 2027 vamos a conseguir esos 1.000 millones de facturación.
Todo esta dentro de un proyecto que tenemos a nivel internacional. Hace tres años abrimos en Portugal. Todo lo que hacemos en España lo podemos replicar en Portugal. Este año se multiplicará por cuatro la cifra de 2022. Y esto quiere decir que nuestro modelo funciona en otro país.
– ¿Y por qué elegisteis Portugal?
Por cercanía, por amor al país vecino y porque vimos que la competencia lo hacía todo de una manera muy egoísta. Se vendía producto desde España a Portugal, aprovechándose del mercado portugués, pero sin aportar algo diferente.
Tenemos una empresa con CIF portugués y tenemos trabajadores contratados allí. Ofrecemos un modelo distinto, dando servicio comercial, logístico y técnico. En solo tres años hemos crecido con una cuota de mercado impresionante.
– ¿Tenéis intención de expandiros a otros países?
Queremos llegar a Francia, Italia, Polonia, Suiza, Holanda y Alemania.
Partners de Huawei y Tesla
– Gigantes como Huawei o Tesla confían en vosotros para la distribución en España de sus baterías domésticas. ¿Cómo se encara el trabajar con tan grandes empresas?
Hemos sido elegidos como partner para toda España de las baterías de uso residencial Powerwall de Tesla. Y eso se afronta con unos estándares de calidad altísimos y también con una confidencialidad altísima. La exigencia en empresas como Tesla y Huawei es bestial. Si duplicas los objetivos al año siguiente te piden que los dupliques también.
Tenemos una política clara en cuanto a los proveedores. No trabajamos con nadie con quien no compartamos valores. Nos gusta trabajar con personas. Y creo que compartimos muchos valores, por ejemplo, con Tesla.
– En tu opinión, ¿en qué punto se encuentra el sector fotovoltaico en la actualidad? ¿Cuáles son sus principales retos?
El sector se encuentra en un momento de limpieza total, de pasada de frenada de todos, incluidos nosotros. Estamos en un momento de profesionalizar el sector, de darnos cuenta de que la fotovoltaica no está por encima de la economía mundial.
Este año, además, necesitamos la ayuda del Gobierno para poder reactivar las instalaciones y cumplir los objetivos de potencia instalada, que están muy alejados de lo que se exige. Necesitamos estabilizarnos porque es un año complicado para todos: distribuidor, fabricante e instalador.