Fotogalería: La transformación, apuesta del empresariado de la zona cero de la DANA

Seis meses después de la DANA que azotó la provincia de Valencia, dejando más de 220 fallecidos, la gran pregunta sigue siendo cómo reparar, recuperar y reconstruir la zona afectada por la catástrofe. Durante este tiempo, Economía 3 ha acompañado a las empresas y áreas industriales damnificadas a través de su Barómetro de Recuperación tras la DANA. Ahora, medio año después, se ha trasladado al epicentro del desastre —concretamente a Catarroja— para centrar la atención en el proceso de recuperación y en la hoja de ruta a seguir.

En este contexto, Economía 3 ha organizado este lunes una nueva mesa de debate en la Masía de las Estrellas (Catarroja), reuniendo a representantes del sector público y privado para sumar sinergias y trabajar de forma conjunta en la reconstrucción. Durante el encuentro, representantes institucionales y empresariales han reflexionado sobre el impacto económico, emocional y social que ha supuesto esta tragedia para la Comunitat Valenciana.

La mesa ha estado moderada por la socia directora y el responsable de Economía 3 Digital, Elisa Valero y Borja Ramírez, respectivamente, quienes han destacado el compromiso del medio de comunicación desde «el minuto cero» para apoyar a los afectados por la catástrofe.

En el panel de discusión han participado, desde el ámbito institucional, la alcaldesa de Catarroja, Lorena Silvent, y la directora general de Infraestructuras Viarias de la Generalitat Valenciana, María José Martínez. Por parte del sector privado, han estado presentes el director de Telefónica en la Comunitat Valenciana, José Manuel Plaza; el presidente de Conhostur, Manuel Espinar; el director de Banca Empresa de Caixa Popular, Juan Gallur; la presidenta de la Asociación Empresarial de Catarroja (AECA), Patricia Muñoz; el director de TFP Consulting, Baldemar Asensio; el director de NRF, Eduardo Gijón; la directora general de Florida Grup Educatiu, Mercedes Herrero; el director de Adecco en la Comunitat Valenciana, Víctor Tatay; y el socio fundador de Innovate 4.0, Tono Mestre.

A pesar de la magnitud de la tragedia y de ser conscientes del largo camino que aún queda por recorrer, los ponentes han transmitido también un mensaje de optimismo. Han hecho un llamamiento a la necesidad de extraer lecciones de esta catástrofe y, sobre todo, de transformar las zonas más afectadas, fomentando una mayor colaboración entre el sector público y el privado.

Economía 3, al lado de las empresas afectadas

Para dar comienzo a la mesa, la socia directora de Economía 3, Elisa Valero, ha agradecido la presencia de los asistentes y ha dedicado unas palabras de recuerdo a las 228 personas fallecidas a causa de las inundaciones. Valero ha aportado algunos datos para contextualizar la magnitud de la DANA: 57 polígonos industriales y más de 60.000 empresas afectadas —la mayoría empresas familiares—, así como 74.000 trabajadores damnificados.

La socia directora de Economía 3, Elisa Valero. Imagen: Nala Estudio.

Ante esta situación, Economía 3 puso en marcha un barómetro que comenzó siendo semanal y posteriormente pasó a tener una periodicidad quincenal, con el objetivo de recoger los principales indicadores sobre cómo se estaba llevando a cabo la recuperación en la llamada zona cero. En una primera fase, el análisis se centró en los suministros básicos y la seguridad —aspectos que, incluso 90 días después, seguían siendo problemáticos en algunos polígonos—. Más adelante, el foco se dirigió hacia la llegada de ayudas y los planes de recuperación en los distintos municipios afectados.

Por su parte, el responsable de Economía 3 Digital, Borja Ramírez, ha subrayado el «intenso trabajo» realizado para ofrecer «una imagen lo más fiel posible» de la realidad del tejido empresarial afectado por la DANA. «Ha sido una tarea especialmente complicada debido a la dificultad de obtener información verídica, sobre todo en los primeros momentos tras la catástrofe», ha destacado.

Catarroja, un municipio con distintos escenarios

Desde el ámbito institucional, la alcaldesa de Catarroja, Lorena Silvent, ha ofrecido una visión general de la situación en el municipio, uno de los más afectados por la DANA. Según ha explicado, actualmente coexisten distintos escenarios: «Uno pone de manifiesto el reto al que nos enfrentamos y otro refleja los avances que se han logrado».

En cuanto a los sectores económicos más perjudicados, ha señalado la agricultura, el comercio, la hostelería y las pequeñas empresas como los principales afectados. «Aunque el Consorcio de Seguros ha realizado una labor importante, los empresarios aún desconocen el importe final de las indemnizaciones que recibirán, lo que genera una incertidumbre que dificulta avanzar», ha lamentado.

La alcaldesa de Catarroja, Lorena Silvent. Imagen: Nala Estudio.

Asimismo, ha reconocido el esfuerzo de todas las empresas por mantener los puestos de trabajo, destacando que muchas de ellas están especialmente preocupadas por la situación de los ERTEs a partir del mes de junio. A pesar de las dificultades, el nivel de desempleo en el municipio se mantiene estable respecto al año anterior.

Pese al contexto, Silvent ha destacado la apertura de nuevas oportunidades de negocio y la creación de nuevos establecimientos. «Existe un espíritu emprendedor y de mejora. Incluso con los cierres, se han impulsado nuevas inversiones que han sido vistas como una oportunidad», ha afirmado.

Perspectivas «mucho más optimistas»

En línea con la alcaldesa, la presidenta de AECA, Patricia Muñoz, ha asegurado que, en la actualidad, «las perspectivas son mucho más optimistas de lo que nos temíamos». «El esfuerzo de las pymes, las familias, las asociaciones y los organismos ha hecho que mucha gente que, a priori no se planteaba volver, haya cogido fuerzas para poner en marcha su negocio de nuevo», ha indicado.

La presidenta de AECA, Patricia Muñoz. Imagen: Nala Estudio.

En cualquier caso, ha advertido que muchas empresas aún no tienen claro qué harán a partir de julio, especialmente cuando finalicen los ERTE, y que muchas desconocen la existencia de ayudas o subvenciones disponibles. «La parte más desastrosa es la comunicación, que la información nos llegue correctamente filtrada. Ese es ahora mismo nuestro principal foco: seguir asesorando a todos los empresarios», ha añadido.

Necesidad de liquidez y de apoyo emocional

Desde el ámbito financiero, el director de Banca Empresa de Caixa Popular, Juan Gallur, ha detallado las medidas puestas en marcha por la entidad para inyectar liquidez y ayudar a los afectados. Gallur ha destacado que Caixa Popular actuó «desde el momento cero», a pesar de que gran parte del equipo también se encontraba en la zona cero en el momento de la catástrofe. «Montamos un equipo de crisis como pudimos y empezamos a tomar decisiones», ha defendido.

La primera medida adoptada fue el lanzamiento, al día siguiente de la DANA, de una línea de financiación de 50 millones de euros a tipo de interés cero. «Sabíamos que los clientes iban a necesitar dinero para reconstruir sus vidas», ha señalado.

El director de Banca Empresa de Caixa Popular, Juan Gallur. Imagen: Nala estudio.

Además, se han articulado ayudas directas y medidas específicas para los clientes de las zonas afectadas, como la exención de comisiones en TPVs y otros servicios financieros.

Más allá de estas acciones bancarias, Gallur ha subrayado que Caixa Popular quiso estar «cerca de los clientes con un apoyo casi moral». «Nos preocupamos de que nuestras oficinas afectadas permanecieran abiertas, con al menos una persona de contacto, prestando una ayuda prácticamente emocional», ha afirmado.

La recuperación tiene que ser «a coste cero»

En el sector de la hostelería, cientos de empresas no volverán a levantar la persiana, ha advertido el presidente de Conhostur, Manuel Espinar. Quienes sí han reanudado la actividad, lo han hecho replanteando su negocio o adoptando nuevas estrategias. Espinar ha subrayado la importancia de poner en valor València como destino turístico desde las administraciones, haciendo especial hincapié en La Albufera, «uno de los mejores patrimonios que tenemos en España».

«Necesitamos un lavado de imagen importante», ha remarcado, lamentando las dificultades que ha supuesto trasladar una imagen positiva de València tras la catástrofe. En este sentido, ha asegurado que noviembre y diciembre fueron «fatales» para el sector. Sin embargo, ha adelantado que se espera alcanzar cifras similares a las del año anterior a partir del mes de junio.

El presidente de Conhostur, Manuel Espinar. Imagen: Nala Estudio.

Espinar ha denunciado el «grandísimo problema» que ha tenido el Consorcio de Seguros, al que «le han faltado recursos humanos», y ha criticado que el Gobierno no haya solucionado este «embudo».

«Debe haber un importante vuelco de dinero sobre el sector», ha reclamado, recordando la «transversalidad» del turismo y su impacto en otros sectores económicos.

Actualmente, Conhostur se encuentra negociando con el Gobierno de España una línea de ayudas a coste cero. Según ha avanzado Espinar, el documento ya está prácticamente cerrado y se espera su aprobación próximamente en el Consejo de Ministros. «Los afectados por la DANA no podemos ser moneda de cambio de los gobiernos. La salida de esta catástrofe tiene que ser a coste cero», ha zanjado.

Hacia unas telecomunicaciones más resilientes

La DANA también ha supuesto una importante lección en materia de telecomunicaciones. En Telefónica, a las 18:00 horas del 29 de octubre, ya se había constituido un gabinete de crisis y se había establecido contacto con la UME. El director de Telefónica en la Comunitat Valenciana, José Manuel Plaza, ha asegurado que la compañía se activó en cuanto comenzaron las inundaciones: «Mientras subía el agua, la gente levantaba el teléfono para llamar al 112». Según ha indicado, «casi 300.000 personas damnificadas llamaban al 112».

El director de Telefónica en la Comunitat Valenciana, José Manuel Plaza. Imagen: Nala Estudio.

Plaza ha subrayado la importancia de contar con infraestructuras de telecomunicaciones adecuadas para hacer frente a situaciones imprevistas y catástrofes como la DANA. En este sentido, ha detallado que Telefónica ha invertido más de 1.000 millones de euros en los últimos 10 años en la Comunitat Valenciana con el objetivo de hacer las telecomunicaciones más resilientes. Gracias a esa inversión y al esfuerzo del equipo de la compañía, ha señalado que el 72% del servicio estaba ya restablecido 72 horas después de las inundaciones.

Como principales enseñanzas de la DANA, ha insistido en la necesidad de seguir mejorando las telecomunicaciones y los servicios para poder responder con mayor eficacia a situaciones similares. «Cada catástrofe es una oportunidad y con inversión y con ganas, todo sigue adelante», ha concluido.

El logístico y el industrial, sectores más afectados

En cuanto al impacto en el mercado laboral, el director de Adecco en la Comunitat Valenciana, Víctor Tatay, ha explicado que perfiles como los del sector logístico o industrial siguen siendo muy demandados tras la catástrofe. «Cualquier oficio que era muy solicitado antes; ahora es prácticamente imposible encontrar algunos, como fontaneros o electricistas. También en el sector de la hostelería la demanda ha aumentado notablemente», ha señalado.

El director de Adecco en la Comunitat Valenciana, Víctor Tatay. Imagen: Nala Estudio.

Ha reconocido que los días posteriores a la DANA fueron «momentos verdaderamente complejos». «Yo era algo escéptico respecto a la reacción de los trabajadores, porque no siempre responden como esperamos, pero en ese momento volví a creer en el mercado laboral», ha afirmado, destacando especialmente la implicación de la población más joven.

Desde Adecco también afrontaron dificultades, ya que tuvieron que localizar a trabajadores en las primeras horas tras la tragedia. A pesar de todo, la empresa no aplicó «ni un solo ERTE». «La confianza en los equipos de Adecco fue total, y les reconocimos económicamente ese esfuerzo», ha asegurado Tatay.

Repensar el modelo educativo

Florida Grup Universitari fue otra de las entidades que, pese a verse afectada por la DANA, se puso a disposición de la ciudad de Catarroja, ofreciendo sus instalaciones como centro de atención sanitaria, alojamiento para voluntarios e incluso como punto de dispensación de medicación.

La prioridad inicial fue esa, junto con la pronta recuperación de la actividad lectiva y la confirmación de que el equipo humano de la universidad se encontraba en buen estado. «Los estudiantes necesitaban verse cuanto antes, contar lo que les había pasado. Invertimos los primeros momentos en escucharles y ofrecerles apoyo emocional para retomar la normalidad académica», ha señalado la directora general de Florida Grup Universitari, Mercedes Herrero.

La directora general de Florida Grup Universitari, Mercedes Herrero. Imagen: Nala Estudio.

Más allá de la evidente necesidad de mejorar infraestructuras y los planes de prevención ante catástrofes, Herrero ha subrayado la importancia de «repensar la educación». «No tenemos garantías de que la respuesta que dieron los jóvenes se vaya a mantener siempre», ha reflexionado.

Frente a situaciones como la DANA, habilidades como la iniciativa, la capacidad para gestionar circunstancias adversas, el trabajo en equipo o la toma de decisiones resultan fundamentales. Por eso, ha insistido en que es muy importante fomentar estas competencias desde el ámbito educativo. «A ninguno nos han preparado para gestionar una pandemia o una DANA», ha afirmado.

Fomentar un entorno laboral «atractivo»

Por su parte, el director de NRF, Eduardo Gijón, ha reconocido que, en los primeros momentos tras el paso de la DANA, existía un temor real a que algunas empresas consolidadas y con larga trayectoria en la Comunitat Valenciana decidieran abandonar el territorio debido a los daños y la incertidumbre. Sin embargo, ha destacado que los acontecimientos también han puesto de relieve la «excelente» oportunidad que tiene la región para atraer inversión tanto nacional como internacional.

«La reconstrucción debe ser vista como una oportunidad de transformación, no solo como un retorno al punto de partida», ha resaltado.

El director de NRF, Eduardo Gijón. Imagen: Nala Estudio.

Para ello, ha insistido en la importancia de fomentar un entorno laboral «atractivo» que incentive la inversión, y ha reclamado una mayor implicación por parte de las administraciones públicas. «Las empresas necesitan agilidad para responder a las crisis, pero también para crecer y generar empleo. Sin una estructura administrativa que acompañe ese dinamismo, cualquier reconstrucción será incompleta», ha agregado.

Dar a conocer las ayudas para la recuperación

Desde la consultora Innóvate 4.0, su socio fundador, Tono Mestre, ha recordado que sigue vigente la convocatoria del Plan Ara Empreses, una iniciativa de ayuda directa promovida por la Generalitat Valenciana dirigida a pymes y autónomos afectados por los daños materiales ocasionados por la DANA.

Durante su intervención, Mestre ha subrayado que aún son muchas las empresas con derecho a estas ayudas que no han iniciado los trámites, debido principalmente a la falta de información, inseguridad o falta de asesoramiento técnico. «Esta ayuda puede cubrir hasta el 70% de la inversión en sectores como comercio, hostelería o servicios, y hasta el 50% en industria, con importes máximos de 50.000 € y 100.000 € respectivamente», ha señalado.

El socio fundador de Innóvate 4.0, Tono Mestre. Imagen: Nala Estudio.

El socio fundador de Innóvate 4.0 ha remarcado que esta ayuda es compatible con la cobertura del Consorcio de Compensación de Seguros, aunque ha remarcado que requiere una justificación técnica, incluyendo una auditoría externa, por lo que es importante presentar la solicitud correctamente desde el principio.

Para facilitar el acceso, la consultora ofrece a las empresas interesadas un análisis gratuito, ya que hay «mucha desinformación». «Nuestra labor es técnica y especializada. Nos encargamos del proceso completo para que las empresas no pierdan la oportunidad de recuperar lo que perdieron, e incluso, modernizarse», ha incidido Mestre.

Atracción de inversión a nivel mundial

El director de TFP Consulting, Baldemar Asensio, ha explicado que, desde su empresa, el primer objetivo fue evitar que las empresas ubicadas en la zona cero se trasladaran. «En los primeros días, todo el mundo buscaba naves industriales fuera de la zona cero», ha señalado. Con el paso del tiempo, esa tendencia fue disminuyendo, según ha indicado.

El director de TFP Consulting, Baldemar Asensio. Imagen: Nala Estudio.

«Hoy en día tenemos una oportunidad muy grande y extraordinaria en la Comunitat Valenciana. Actualmente, el movimiento de las cadenas de suministro a nivel mundial se rige por el mar, y dentro del Mediterráneo, València alberga el principal puerto de Europa. Se ha convertido en un hub logístico europeo. València está atrayendo un importante polo de inversión a nivel mundial, no solo en el ámbito logístico, sino también como una gran zona de producción destinada a abastecer otros mercados», ha afirmado.

Asensio considera que la DANA representa una oportunidad para replantear el modelo y apostar firmemente por la región. No obstante, ha hecho un llamamiento a la Administración para «dejar de lado la política e ir todos a una». Y ha añadido: «Estáis haciendo un trabajo impresionante desde las administraciones públicas. Hay que hacerlo visible y poner aún más en valor todo lo que se ha logrado», ha concluido.

La labor de la Generalitat Valenciana

La última en intervenir ha sido la directora general de Infraestructuras Viarias de la Generalitat Valenciana, María José Martínez, quien ha expuesto el trabajo realizado por la Administración valenciana desde el día posterior a la DANA. En un primer momento, el objetivo fue restablecer la movilidad lo antes posible en las carreteras, para facilitar el acceso de los servicios de emergencia y de las empresas de suministros. «No hace falta contar cómo teníamos las carreteras», ha recordado, haciendo referencia a la gran cantidad de barro y vehículos que bloqueaban las vías.

La directora general de Infraestructuras Viarias de la Generalitat Valenciana, María José Martínez. Imagen: Nala Estudio.

Según ha explicado, a finales de noviembre de 2024 prácticamente todas las carreteras estaban ya abiertas, aunque fuera de manera provisional y en un estado «algo precario», ya que la prioridad era garantizar su uso inmediato. «En este momento estamos en la restitución definitiva de las infraestructuras», ha afirmado, a la vez que ha concretado que el objetivo es tener completamente rehabilitadas la A-33, la A-36 y la CV-50 de cara al verano.

Para acometer esta reconstrucción, la Generalitat ha destinado 75 millones de euros mediante contratos de emergencia. «Hemos aprendido lecciones importantes, y aprenderemos muchas más. Una de ellas es que la cimentación de los puentes debe ser más profunda», ha subrayado.

Martínez ha hecho un llamamiento a «trabajar todos a una», y ha querido destacar especialmente el esfuerzo del personal técnico: «Hay que reconocer la labor de los funcionarios». Asimismo, ha señalado que la DANA debe llevarnos a reflexionar sobre educación normativa y planes de prevención. «España y la Comunitat Valenciana están muy reguladas; tenemos una normativa abundante, pero la queja general es que todo cuesta mucho. Hay mucho papel, pero luego no lo aplicamos», ha advertido, recordando que ya existían documentos que señalaban a la Horta Sud como una zona inundable.

Esta mesa de debate celebrada en la Masía de las Estrellas, en Catarroja, ha contado con la colaboración de MediaMarkt, Fujitsu, Wolters Kluwer (A3SIDES), Valoriza, Cyes, Access Consultoría, Mercedes-Benz-Valdisa, Grupo Soledad y Sadival.