La inversión en obras hidráulicas está muy lejos de las necesidades que tiene la Comunitat y ese retraso se materializa «cada vez que hay tormentas», como el último temporal que la ha azotado, según alerta el presidente de la Federación Valenciana de Contratistas de Obra Pública (Fecoval), José Luis Santa Isabel.

En los últimos quince años ha habido una falta de inversión en políticas hidráulicas pese a que son obras «muy necesarias» para tener preparada la Comunitat Valenciana ante posibles inclemencias del tiempo y lluvias torrenciales. Como la de esta semana o la DANA de septiembre de 2019, ha asegurado Santa Isabel.

La Generalitat ha incrementado sus inversiones para 2021 pero el grueso va destinado a educación y movilidad, y se echa en falta «obras del agua» ya que las confederaciones hidrográficas del Júcar y del Segura y la Entitat de Sanejament d’Aigües reciben poca inversión cuando hay unos problemas «evidentes» en encauzamiento y en depuración, ha señalado.

En cuanto a depuración existe un estudio que cifra en al menos 1.700 o 2.000 millones de euros la necesidad de inversión en ambas cuencas hidrográficas, por lo que insiste en que el retraso en este campo es «tremendo».

Sobre el plan Renhace para la transformación y relanzamiento de la comarca de la Vega Baja, ha señalado que está recogido en las inversiones de la Generalitat para 2021 pero, al mismo tiempo, ha asegurado que hace falta mucha inversión, no solo en reconstrucción.

Se ha referido a «la gran asignatura pendiente» de las obras del agua como una de las infraestructuras que debería tener España y para ello «todo esfuerzo es poco», y ha asegurado: «No podemos digitalizar el país si nuestras infraestructuras no van acorde a ello», en relación a los retos que marca el futuro de los próximos años.

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