Además de ser la semana electoral, ha sido la semana en la que la Comisión Europea y el Informe BBVA Research recortaron las previsiones de crecimiento de la economía española. Todos, incluido gobierno en funciones, coinciden en señalar que la desaceleración toca a la puerta. Mientras, y en paralelo, las empresas se preparan para cerrar el ejercicio y ajustar sus planes a corto plazo.

Con el optimismo fuera de escenario, el Colegio de Ingenieros Industriales de la Comunidad Valenciana  e Improven organizaron un debate alrededor de una mesa con una decena de directivos de medianas empresas valencianas. Todas ellas prevén aumentar sus inversiones para 2020 y todas aumentarán su facturación este años. Y es que quienes han hecho verdaderos ejercicios de internacionalización y quienes han atacado sus estructuras apuntando a la línea de productividad parece que mirarán la desaceleración por el retrovisor (2019).

«Otra cosa son los beneficios«, apuntó Silvia Peña, adjunta a dirección general de Matrival. «Hay tensión en los pagos«, añadió Eduardo Chova, consejero delegado de Asfaltos Chova. Junto a ellos, estuvieron Salvador Puigdengolas, decano del COIICV y Sergio Gordillo -que hizo las veces de moderador-, socio director de Improven; Arturo Miquel, director financiero de Antares Iluminación; Miguel Ángel Juan, socio director de S2 Group; Guillermo Prats, socio de Improven; Javier Mora, director general de Importaco Food Service; Anabel Sanchis, directora de I+D+i y desarrollo de producto de RNB; Ignacio Sánchez-Lafuente, director general de Tradebé Valencia; Eric Bacourt, consejero delegado de Hinojosa Packaging y Félix Lafuente, director general de Grupo Royo.

Puigdengolas y Gordillo. | E3

Pero hay numerosos indicadores que muestran que no estamos ante una situación generalizada. Por ejemplo: la cantidad de residuos industriales en las empresas auxiliares de la automoción han bajado un 9% este años, indicó Ignacio Sánchez-Lafuente. Este termómetro confirma que la contención ya se ha notado en el sector respecto a 2018. Sin embargo, los presupuestos que estas compañías están demandando para 2020 son los de 2018. ¿Exceso de optimismo o ajuste?

El simple hecho de que la palabra desaceleración entre en juego en el mercado ya significa un retraimiento de la demanda, al menos en el sector servicios, como subrayó Anabel Sanchis de RNB. La responsable de I+D+i hizo esta reflexión porque, aunque no hay un efecto inmediato palpable, consideró que hay un riesgo de que esa idea se instale y los consumidores empiecen a retraerse a la hora de comprar, por temor a lo que pueda venir.

Chova puso el ejemplo en el caso de la construcción de vivienda. «Hay una falta de confianza en el mercado. Había proyectos que se habían empezado y que se han parado. «Vemos que en España va a ver un momento delicado, pero creo que transitorio», aclaró el veterano consejero delegado de Asfaltos Chova.

No a la crisis

Peña hilaba más fino en su análisis de la coyuntura económica: «Veo una especie de movimiento de ajedrez entre las grandes firmas (automoción)» y aceptó el uso de la palabra crisis en el debate, «porque la entiendo como cambio». Toda la industria de la automoción y todas las empresas alrededor de la movilidad se encuentra en un momento de grandes oportunidades y para la directiva de Matrival. En su opinión, este reto precisa de una «política europea» de «estabilidad» y «un proyecto de subvenciones» que faciliten los cambios necesarios.

En el debate del COIICV participaron una decena de empresas. | E3

«Vivimos un momento de incertidumbre» en referencia al brexit o a la guerra comercial chino-estadounidense, dijo Arturo Miquel, de Antares Iluminación. «Menos del 2 % de nuestra producción se vende en España, nuestro mercado es internacional y dependemos de una amplia cobertura de países. Pero no vemos ralentización». 

En líneas similares, se manifestaron los directivos de Improven y Grupo Royo. «Por ahora no estamos notando la desaceleración. Nuestro clientes están contemporizando. Los inversores están a la espera de que se despejen las incertidumbres», matizó Guillermo Prats.

Además del factor de la internacionalización, está el sector tecnológico. S2 Grupo es un caso que ejemplifica el tirón de una demanda que navega en el mar de la digitalización. «Tenemos que crecer», aseguró Miguel Ángel Juan y «vamos a abrir nuevas oficinas«.

Así el mejor indicador de que las palabras de estas empresas van en serio se pudieron comprobar cuando uno tras otro confirmaron que van a implementar nuevas líneas de productos. Es el caso de Asfaltos Chova y la pretensión de Tradebé y RNB, que siguen apostando por la diversificación en sus respectivos sectores. O sencillamente, se apuesta por nueva maquinaria como en los grupos Royo e Hinojosa.

En definitiva, los empresarios creen que no se puede hablar de crisis; pero también que el contexto no favorece una mejora. «La comunicación que ha hecho una clase de personas ha paralizado un país», concluyó Chova.

Por último, Puigdengolas hizo un apunte sobre la actualidad. Estamos en “un momento de cambio, delicado pero de carácter transitorio en el que se van a crear nuevas oportunidades, nuevas líneas y nuevos productos en el que los ingenieros industriales tienen mucho que aportar por su formación multi e interdisciplinar”. En el debate, la gestión del talento y el tamaño de las empresas fueron dos elementos de continua referencia como es habitual.