Las Jornadas Empresariales de Economía 3 ayudan a definir las fortalezas de la Comunidad Valenciana

En esta ocasión ha sido la ciudad de Valencia la que acogió ayer  las Jornadas Empresariales  que organiza Economía 3 bajo el título «Comunidad Valenciana 2015. Debilidades a superar  y fortalezas que aprovechar«. La jornada, que se celebró, en el Hotel SH Valencia Palace, contó con el patrocinio y colaboración de Bankia, Vodafone y Deloitte.

A lo largo de la tarde, los diferentes ponentes fueron desgranando la realidad económica empresarial de la Comunidad Valenciana 2014 y 2015 desde sus propias empresas y como han hecho frente a la crisis económica actual.

De izda. a dcha., Alejandro Requena (Deloitte) y Rafael Juan (Dulcesol)

En la primera sesión participaron Alejandro Requena, socio de Deloitte que  actuó como moderador  de la misma; Rafael Juan, consejero delegado del Grupo Dulcesol; y José Antonio Fernández, consejero delegado del Grupo Etra.

Alejandro Requena comenzó su alocución haciendo un repaso sobre las tendencias generales de la economía y explicó que «la globalización ha provocado el incremento de la dimensión de los mercados. Sin embargo, los mercados locales cada vez son los menos«.

Otra de las reflexiones que puso sobre la mesa Requena fue que «la dimensión  otorga capacidad de maniobra a las empresas ya que pueden utilizar economías de escala y atraer talento«. Al respecto,  matizó que «el más grande es el que tiene más capacidad de sobrevivir«.

Además de hacer un repaso por las fortalezas y debilidades de la Comunidad Valencina, incluyó también una serie de reflexiones finales como que «el futuro no está escrito, lo podemos construir» o que  «el crecimiento rentable es una obligación a largo plazo si queremos sobrevivir«. También enumeró una serie de activos intangibles a tener en cuenta como la cultura científica, el capital humano, el pensamiento estratégico y la I+D.

Rafael Juan, consejero delegado del Grupo Dulcesol fue el siguiente en tomar la palabra. Después de hacer un repaso sobre cómo fueron los orígenes de la compañía, aportó una serie de cifras que explican la gran envergadura de dicho proyecto empresarial. El grupo está integrado por 30 empresas, la última incorporación ha sido una fábrica en Argelia; en 2014 ha facturado 300 millones de euros; da empleo a 1.850 personas; y cuenta con 1.600 referencias.

Este grupo integra también con una granja productora de huevos, su principal materia prima y otra de embalajes de plásticos.

Su sistema de gestión está conformado por cuatro pilares básicos según explicó Rafael Juan: seguridad alimentaria, medioambiente, capital humano e innovación y definió al Grupo Dulcesol «como una empresa con vocación de ser líder, internacional, eficiente, orientada a nuestros clientes y con una buena relación calidad/precio«.

Rafael Juan puso también el acento en que la compañía que dirigie  «es una compañía familiar, autofinanciada y eficiente«.

José Antonio Fernández, consejero delegado del Grupo Etra también hizo un repaso por las cifras más relevantes de la compañía. Actualmente, el Grupo gestiona el 53% del tráfico urbano en España; el 90% de los metros y trenes ligeros de España incorporan soluciones tecnológicas Etra; exportan sus soluciones tecnológicas desde Valencia  al resto del mundo; controlan más de 450.000 puntos de luz en ciudades, carreteras, puertos y túneles; gestionan más de 30.000 plazas de aparcamientos, control de accesos a recintos e infraestructuras, peajes, etc.; más de 120.000 personas tienen agua potable gracias a sus servicios; y dan servicio de comunicación a seis millones de hogares.

El Grupo Etra está integrado por 16 compañías, la matriz está en Valencia y su equipo humano está formado por 1.800 trabajadores.

A pesar de todos estos datos, el Grupo tiene dos debilidades que superar tal y como definió José Antonio Fernández. En cuanto a su relación con la Administración Pública, «los procesos licitatorios están muy orientados al coste» y en cuanto a las empresas del Grupo, abogó por la importancia del departamento de riesgos, sobre todo «para los proyectos internacionales«.

Tambien puso sobre la mesa que desde Etra «tratan de transformar el conocimiento en cartera de pedidos«.

José Antonio Fernández también enumeró una serie de fortalezas. Haciendo referencia a la Administración Pública argumentó que «esta está muy comprometida con la excelencia en infraestructuras de transporte y energía» y que los proyectos que se han llevado a cabo en España les han permitido posicionarse en los principales proyectos de Smart City en el mundo.

En cuanto a las fortalezas de las empresas que integran Etra argurmentó que estas se diferencian por la calidad de producto.

En el atril, Carlos Aguilera. Sentados Eric Bacourt (Grupo Hinojosa) y Jesús Suso (Vodafone)

En la segunda sesión participaron Carlos Aguilera, director de Negocios Especializados de Bankia que fue el primero en tomar la palabra;  Eric Bacourt, consejero delegado del Grupo Hinojosa; y Jesús Suso, dirctor territorial en la Comunidad Valenciana, Murcia y Baleares de Vodafone.

«Con la crisis todos hemos aprendido algo como que hay cosas que hay que trabajar con constancia como la rentabilidad y la internacionalización«, de esta forma comenzó su discurso Carlos Aguilera que añadió también que «los bancos tenemos ahora más apetito inversor, solo falta que las empresas quieran invertir«.

Aguilera también hizo hincapié en la importancia de mejorar «nuestros equipos productivos, sin olvidarnos de la rentabilidad y la internacionalización«.

En cuanto a financiación de operaciones de comercio exterior, Aguilera incidió en que «Bankia ha sido en 2014 líder en financiación de la línea ICO Exportadores corto plazo«. En concreto, ha concedido 1.160 millones de euros.

Aguilera hizo un repaso por diferentes productos de Bankia para financiación tanto a corto plazo como a largo plazo como su Línea de Comercio Exterior o Bankia International Confirming; o qué son las operaciones sindicadas y cuáles son sus ventajas.

Eric Bacourt fue el siguiente en tomar el testigo. Al igual que Rafael Juan, el consejero delegado del Grupo Hinojosa comenzó explicando los orígenes de la compañía  y cuáles han sido los pasos que se han dado para convertirse en lo que es actualmente.

En estos momentos el grupo está integrado por once plantas, factura 270 millones de euros, fabrica 500 millones de metros cuadrados de cartón y la plantilla está compuesta por 877 personas.

Igualmente, el Grupo Hinojosa se rije por un plan estratégico que comenzó en 2011 y que concluye este año. Este contempla cuatro ejes importantes: crecimiento orgánico en la zona de Levante «donde tenemos una posición de liderazgo  pero debemos reforzar nuestra posición en Cataluña, Madrid y Andalucía«, aclara Bacourt; crecimiento inorgánico para «cubrir con nuestra presencia la península ibérica«; desarrollar nuestra propia actividad papelera para depender menos de los proveedores de este producto; y potenciación de los procesos de I+D.

Eric Bacourt quiso dejar claro también que «sus envases deben ayudar a nuestros clientes a vender más y mejor«.

«El cliente se siente más identificado con su móvil que con su operador. Hemos perdido la conexión emocional con el cliente» reconoció Jesús Suso, de Vodafone. Pero, ya se han puesto manos a la obra para solucionar este problema: «hemos transformado la compañía y hemos puesto al cliente en el centro de todos nuestros proyectos«. Para ilustrarlo, Jesús Suso puso como ejemplo de «experiencia de cliente» la tienda de la calle Colón de Valencia donde cuenta con varios espacios entre los que destacan la posibilidad de resolver incidencias e incluso de reparar el móvil.

Suso también enumeró también algunos de los logros de Vodafone: «Somos el único operador que no venimos del monopolio. Hemos tenido que ir convenciendo a los clientes para que se vengan con nosotros«. Añadió igualmente que han sido los primeros en «lanzar 3G y 4G y los primeros que permiten hacer pagos a través del móvil. Además, hemos crecido en innovación«.

José Monzonís

Por último, José Monzonís, secretario autonómico de Industria y Energía de la Generalitat Valenciana esbozó las fortalezas y debilidades de la Comunidad Valenciana. Así, explicó que la sociedad valenciana tiende al envejecimiento. En cuanto al empleo incidió en que «han sido las personas con formación las que han encontrado empleo en 2014«. En esta misma línea añadió que entre los 17 y 25 años, un 30% de la población no se forma con lo cual subrayó la necesidad de reforzar «durante la primaria y la secundaria conceptos como el esfuerzo, la innovación y el emprendedurismo«. Por contra, entre los 18 y 25 años hay una parte significativa de la población de la Comunidad Valenciana que cursa estudios universitarios.

Monzonís también subrayó que «la Comunidad Valenciana es fuerte en industria y turismo pero no en servicios avanzados«. Destacó también que «la exportación en 2014 ha supuesto el 25% del PIB de la región y el turismo un 4,5%«.

En su opinión,  «nuestra Comunidad va a ser dinámica en su crecimiento en los próximos años debido al tirón industrial y al nuevo modelo productivo«.

Terminó su alocución definiendo las tres palancas de cambio que hay que aplicar desde las Administraciones públicas como son: la anticipación, la adaptación para sobrevivir (proceso que se realizó entre 2012- y 2014) y la necesidad de llevar a cabo acciones para poscionarse.

Juan Carlos Moragues

Juan Carlos Moragues, conseller de Hacienda y Administración Pública de la Generalitat Valenciana, fue el encargado de clausaurar la jornada.

El conseller recordó  las cifras que se barajaron tanto en España como en la Comunidad Valenciana al comienzo de la crisis. Actualmente, recalcó el conseller «desde 2014, nos estamos financiando al 0%. Es decir, hemos pasado del 8% (2012) al 0% actual«.

En cuanto a los presupuestos, Moragues esgrimió que  «la estabilidad presupuestaria es necesaria para mantener el estado del bienestar«. De hecho, Educación, Sanidad y Bienestar Social se llevan «9 de cada 10 euros» del presupuesto de la Generalitat. En esta línea, y refiriéndose a estas tres partidas, el conseller puso un ejemplo muy gráfico, «abrir la puerta cada día de la Sanidad, la Educación y el Bienestar Social cuesta 28 millones de euros«.

También puso sobre la mesa las medidas que se están tomando «una vez que se ha recuperado al enfermo y se ha conseguido sacarlo de la UVI»  como la puesta en marcha de políticas activas de empleo, pagar en tiempo y forma y bajar los impuestos. De hecho, a juicio de Moragues, «hay que pedir el menor esfuerzo impositivo a los ciudadanos».

Por último, Moragues quiso dejar claro que «el sector público debe ser lo más reducido posible y las empresas son las que generan empleo«. Añadió también, refiriéndose a la situación actual  que «el punto de inflexión en la Comunidad Valenciana ya se ha producido. Vamos a mejor, aunque todavía queda mucho por hacer y hay que tener los pies en el suelo«.