Actualmente estamos muy influenciados por la tecnología móvil y de las comunicaciones. Marcas como Apple o Samsung son las que mandan, pero gracias a la firma de la que os vamos a hablar nació la telefonía móvil, una industria que a día de hoy parece no tener límites.

La historia

Paul y Joseph Galvin, eran dos hermanos que en 1928 pusieron un pequeño negocio en el sector de la electricidad en Chicago. No tardaron mucho en tener éxito, una vez uno de sus empleados tuvo una idea que cambiaría el rumbo del negocio.

Al principio el negocio se llamaba Galvin Manufacturing Corporation, tenía 5 empleados y quería fabricar un eliminador de baterías, que es un dispositivo que permitían a las radios que usan batería funcionar con energía eléctrica.

El vuelo del negocio lo da Elmer Wavening, un empleado de los hermanos Galvin que vio como las personas solían salir a ver atardecer en sus coches, por lo que pensó que sería una magnífica idea que se pudiera poner música en los coches. Esta idea no hubiera podido llevarse acabo de no tener el apoyo que Wavering tuvo de sus jefes, que lo animaron a poner en marcha la idea e instalar la primera radio en un automóvil.

Motorola y su nombre, nació aprovechando la moda de aquel tiempo de ponerle el sujo «ola”, caso de Radiola o Rock-ola. Así haciendo referencia a su radio dentro del coche, nacía el sello Motorola. El rotundo éxito del dispositivo movió a la firma a desarrollar radios móviles de dos vías que fue algo revolucionario que usaron las primeras unidades policiales en USA. Después su uso se extendería a otros trabajos.

Las Guerras mundiales hicieron que Motorola siguiese investigando y trabajando para el gobierno estadounidense, poniendo en marcha la base de los sistemas de comunicación de las empresas después de la guerra. Más adelante la empresa fabricó el Walkie-Talkie, un equipo de mayor alcance y claridad en la banda de FM.

Entraron también en la fabricación de televisores, comenzando a fabricar semiconductores, algo en lo que pasó a ser productor líder a nivel mundial en los años 70. La división de los televisores, pese a su éxito la vendieron a una marca que formaba parte de Panasonic.

A partir de los años 60, Motorola consiguió consolidar su imagen en las telecomunicaciones. Como curiosidad, Neil Amstrong dijo sus famosas palabras al mundo mientras ponía pie en la luna con los equipos realizados por Motorola. De forma paralela al proyecto con la NASA, la tecnología de los semiconductores y microprocesadores fueron el núcleo de la empresa.

DynaTAC, el primer teléfono móvil de la historia

Después de invertir 15 años y 100 millones de dólares para desarrollar su programa de móviles, Motorola consiguió sacar al mercado el DynaTAC 8000x, el primer teléfono móvil de la historia. Era un bloque del tamaño de un ladrillo que pesaba un kilo y costaba unos 4.000 dólares. En aquel tiempo era como tener un iPhone de última generación o algo incluso mejor. Todo el mundo quería tenerlo.

Durante los años siguientes siguió manteniendo la posición dominante en el mercado, especialmente con su modelo MicroTAC, que era más pequeño o con el StarTAC. Aunque la empresa sacó al mercado varios modelos con éxito de ventas, en 1998 fue desbancado por Nokia.

Hasta mediados de la primera década del 2000 lideró junto a la compañía finlandesa el mercado. Después de esto, compañías como Blackberry y después Apple marcaron tendencia en el mercado de los smartphones. La compañía tuvo que amoldarse a una realidad, en la que quizás cayó, debido a su creencia de que el liderazgo en las telecomunicaciones duraría para siempre. Esta comodidad y no descubrir nuevas posibilidades de innovación antes que la competencia fueron quizás el principal motivo para su caída de las primeras posiciones.

Motorola sigue viva, pero es un ejemplo de que hay que estar innovando y trabajando en mejorar constantemente, ya que, aunque inventes un producto de éxito, la competencia puede ganarte la partida si te quedas inmóvil y no continúas desarrollando e innovando.