El FMI mejora las previsiones de crecimiento para España
Los datos aparecen en el informe «Perspectivas Económicas Globales», presentado en el arranque de la reunión anual del organismo, y contrastan con la reducción generalizada de las estimaciones en la zona euro, con Italia en recesión (-0,2%), Francia en exiguo crecimiento (0,4%) y una débil expansión de la locomotora de Alemania (1,4%).
Se trata de la segunda revisión al alza de las previsiones de la economía española en los últimos meses y apuntan a una consolidación de la recuperación tras la aguda recesión de los años anteriores. La cifra coincide con la anunciada a finales de septiembre por el Gobierno español para 2014, también del 1,3%, y es ligeramente inferior a la proyección gubernamental que prevé un crecimiento del 2% para 2015.
«El crecimiento en España ha regresado, apoyado por la demanda externa, a la vez que una demanda interna más alta, que refleja la mejoría en las condiciones financieras y una confianza en alza», indicó el organismo dirigido por Christine Lagarde.
Asimismo, y de acuerdo al informe del Fondo, la inflación será del 0% en 2014, y repuntará hasta el 0,6 % en 2015. El empleo se mantiene como la asignatura pendiente de España, al calcular el FMI que el índice de desempleo cerrará 2014 en un 24,6 %, y solo registrará una progresiva bajada hasta el 23,5 % en 2015.
En el ámbito de la unión monetaria, el Fondo advierte de «la incertidumbre sobre una persistente ralentización económica» y reduce sus previsiones al 0,8% este año y un 1,3% para 2015, unas tres décimas y dos décimas, respectivamente, menos de lo esperado en julio.
Los principales frenazos corresponden a Italia, que volverá a cerrar en contracción -0,2% en 2014 (cinco décimas menos de lo previsto hace tres meses) y crecerá un 0,8% en 2015 (tres décimas menos); y Francia, que registrará apenas una expansión del 0,4% este año (cuatro décimas menos) y un 1% en 2015 (cinco décimas de rebaja respecto a julio)
Especialmente sorprendente es el caso de Alemania, la mayor economía del euro, que comienza a dar signos de debilitamiento y para la que el FMI rebaja el crecimiento estimado al 1,4% en 2014 (cinco décimas menos) y 1,5% (tres décimas menos) en 2015.