¿Qué tipo de cuello de camisa es el más aconsejable en función de la altura y el diámetro de nuestro cuello? ¿Nos favorecen más los bolsillos de tapeta o los de plastrón? ¿Falda más o menos corta? Para responder a estas preguntas, los expertos en asesoría de imagen Stilus Vitae realizan estudios morfológicos para determinar las características que nos identifican a cada uno de nosotros. En esta ocasión, nos centraremos en las diferentes morfologías del hombre y en un próximo artículo analizaremos el cuerpo femenino.
Un conjunto de líneas y su disposición crea formas distintas y cuando esas líneas son las dominantes en nuestro cuerpo, definen nuestra morfología, porque el cuerpo humano tiene varios tipos de morfologías, cada cual con sus propias características.
En función de la morfología a la que pertenecemos y que se identifica mediante el estudio morfológico correspondiente, deberemos optar por un tipo de prendas u otras, con el fin de contribuir a la armonía de nuestro cuerpo, potenciando nuestros rasgos físicos más bellos y minimizando lo que en asesoría de imagen se conoce como inestetismo; aquellas características que se alejan de los cánones estéticos considerados ideales.
Conocer cuál es nuestra morfología es necesario para adaptar nuestra vestimenta y sacar de ella el mayor partido posible.
El trapecio invertido es la morfología de referencia para los hombres, que está basada en la escultura David, de Miguel Ángel. ¿A qué hombre no le gustaría tener un cuerpo así? Pero lo cierto es que no todos tienen dicha constitución.
Ahora bien, aunque nuestra morfología sea cuadrada, ovalada, rectangular, de trapecio o de triángulo invertido, podemos utilizar la forma de la ropa para acercar nuestra morfología al David de Miguel Ángel; esto forma parte del estudio morfológico.
Veamos un ejemplo sobre esto último. Barack Obama, el presidente de los EE. UU., tiene un torso estrecho, pero él no puede mostrar tal inestetismo, pues proyectaría una imagen débil, algo impensable en el presidente de la primera potencia mundial. Por eso utiliza trajes muy estructurados, con los hombros muy marcados, lo que transmite seguridad y estabilidad.
Modelos morfológicos
Estos que a continuación se señalan son los seis modelos morfológicos básicos y, en mayor o menor medida, todos podemos encuadrarnos en alguno de ellos.
De trapecio invertido. Los hombros, la caja torácica y las extremidades superiores están proporcionadas. Las caderas son ligeramente más estrechas, las piernas también guardan proporción. Es la tipología ideal y cualquier prenda le sienta bien.
Cuadrada. Al llegar a cierta edad, muchos hombres pertenecen a esta tipología. La caja torácica se parece a un cuadrado, los hombros están caídos y las extremidades superiores e inferiores son delgadas.
Ovalada. Es una tipología de cuerpo rechoncho y con tendencia a la obesidad. Se caracteriza por sus dimensiones horizontales que prevalecen sobre las verticales. El consejo que les doy como asesor de imagen es que estructuren los hombros y den más esbeltez en el talle.
Rectangular. En esta tipología destaca la rectitud del tronco; el tórax y la cintura tienen prácticamente la misma anchura. Se trata de ampliar ópticamente los hombros para marcar la cintura. El objetivo es potenciar los hombros y suavizar la cadera para acercarnos a la silueta ideal.
De trapecio. Se caracteriza por tener la zona superior del cuerpo más estrecha que la zona inferior. Por ello, les aconsejo que en la zona superior utilicen prendas que aporten volumen en horizontal. Para disimular la anchura de la zona inferior, los hombres que tengan esta morfología utilizarán pantalones rectos. Debemos potenciar los hombros y suavizar las caderas.
De triángulo invertido. Esta tipología se aproxima a la figura atlética de gran desarrollo óseo y muscular, con hombros amplios y tórax robusto. Las caderas y las piernas son mucho más esbeltas en comparación con la parte superior. El consejo que doy a quienes tienen esta morfología es suavizar los hombros y potenciar y dar un poco de volumen a las caderas.
Más allá de lo anterior, hay personas cuya constitución no encaja al 100 % en las tipologías analizadas. Además, toda una serie de inestetismos provocados por circunstancias muy diversas (malformaciones, accidentes…), están presentes en todas las morfologías. Los profesionales de Stilus Vitae realizamos estudios morfológicos para que el cliente conozca la morfología a la que corresponde su cuerpo y sepa qué tipo de prendas son más aconsejables para su constitución con vistas a maximizar el resultado deseado.