Desde finales del mes de enero, la economía española se ha ido recuperando progresivamente. Los cambios son lentos, aún casi imperceptibles. Pero, estadísticas oficiales como los datos de empleo del Ministerio de Trabajo y Economía Social apuntan a esta tendencia positiva.
Por su parte, la economía valenciana tiene un reto por delante. No solo volver a los niveles precovid de 2019, sino analizar cuáles son sus puntos fuertes y sus carencias más destacadas.
El economista José Carlos Díez ha expresado, durante la IV Jornada Anual Paco Pons, que la Comunitat Valenciana está «muy lejos» de los niveles de sus socios europeos. No obstante, Díez sostiene que cuenta con muchos valores por explotar y que podrían convertirla en «una de las mejores economías del país«.
«La economía valenciana ha dejado de avanzar desde el año 98»
Según ha afirmado el economista, la autonomía valenciana «es una de las que peor lo ha hecho» en los últimos tiempos. «Si observas la renta por habitante desde los años 90, y ves la convergencia con el promedio de España, la Comunitat Valenciana ha tenido un deterioro significativo«, ha expresado.
«Ahora está por debajo de la media. Y se aprecian pérdidas en la cuota de mercado«, ha añadido. Según ha comentado, una de las causas principales es que no se ha incorporado la tecnología en el modelo de producción de la mayoría de las empresas. «Esto afecta especialmente a los productos que se producen para el exterior», ha dicho. Por tanto, no caen significativamente en ventas a nivel nacional, pero sí que pierden una cuota importante en el peso internacional.
Díez ha continuado destacando cómo España fue «muy exitosa» en los años 80. «Entrar en la Unión Europea fue un milagro. Recibimos una seguridad jurídica como nunca antes«, ha expresado. Y agrega: «También la Comunitat Valenciana en el ámbito del puerto«.
Para la Comunitat Valenciana, los años 80 y 90 supusieron también un «éxito«. «Hubo mayor inversión extranjera por los bajos salarios. Además, se mejoraron las conexiones de transporte con Francia y Europa. En aquella época surgieron buenas universidades y parques tecnológicos«, ha comentado.
Talento empresarial y proyectos de calidad
«La economía española y la valenciana sigue creciendo, pero no se acerca a la de otros países de la UE«, ha afirmado.
Díez tiene claro que «es posible crecer en España«. En esta línea sugiere que las tres provincias (Valencia, Alicante y Castellón) tienen «mucho talento empresarial» y «empresarios de buena calidad que pueden dar el gran salto«. Y continúa: «Esto es algo muy importante porque en otras comunidades no lo ves. Y clonarlo es muy complicado. Esa es la parte optimista«.
«El segmento donde España y la valencia se tienen que especializar es en apostar por las empresas medianas«, ha sentenciado. Díez explica que este tipo de empresa está cargado de potencial para «saltar y hacerse más grande«. Y ha puesto el ejemplo de Inditex, «que empezaron como dos autónomos y ahora generan 140.000 empleos«.
El valor de las startup y la innovación
Otro de los valores de la empresa valenciana es el amplio número de startups que genera. Especialmente, por iniciativas como la Lanzadera de Juan Roig. «La sostenibilidad y la digitalización tienen que ir muy unidas en este camino«, ha afirmado.
Díez ha explicado que, dentro del proyecto 1070KM, la Comunitat aporta el polo de desarrollo de tecnologías individuales en empresas emergentes. El proyecto tiene la intención de que los empresarios españoles «estén conectados y cooperen más entre ellos«.
No obstante, ha comentado que, a pesar de tratarse de planes «muy ilusionantes«, «la mayoría mueren al poco tiempo. Y si no crecen no tienen tampoco impacto en el empleo«.
Como ejemplo de adaptación a la nueva realidad digital, ha nombrado los sensores de agua de la Cueva de Sant Josep en la Vall de Uxó. «Estos desarrollan modelos de estimación de DANA. Para eso sirve la digitalización. Son inversiones que evitan desastres e impactos inesperados en la economía«, ha explicado.
Falta de financiación
Para Díez, la falta de financiación es una de las principales lacras. «El mayor inversor de capital de riesgo en España es el estado. Ha invertido 2.500 millones en capital riesgo«, algo que considera «insostenible«.
El economista sostiene que con «200.00 euros de capital, por norma general, es complicado competir con gigantes como Google o Facebook«.
«Con la crisis esto ha mejorado. Las nuevas cohortes de empresarios innovadores son mejores. Hay empresas que antes de 2007 no verías. Lo que falta ahora es capital«, ha reiterado.