«Comprar Twitter será un acelerador para crear X, la aplicación para todo». Con este enigmático tweet daba marcha atrás el hombre más rico del mundo, Elon Musk, a su decisión de no comprar la red social del pájaro azul. Y lo hacía a tan sólo dos semanas de comenzar el juicio al que la compañía lo habría llevado tras negarse a cumplir con el acuerdo de compra original al que había llegado con el millonario.
Buying Twitter is an accelerant to creating X, the everything app
— Elon Musk (@elonmusk) October 4, 2022
En aquel entonces se especuló con una supuesta jugada de Elon Musk para poder vender y liquidar 8,5 billones de dólares en acciones de Tesla. Según aquella teoría, el beneficio obtenido por la venta del «stock» superaría con creces el pago de una multa a Twitter por incumplir el acuerdo.
Sin embargo, el multimillonario parece haberle visto las orejas al lobo y ha preferido evitar el juicio retomando su oferta original de 54,20 dólares la acción, un total de 44.000 millones de dólares por Twitter. Tras conocerse la noticia las acciones de la red social subieron un 12%, aunque todavía están un 10% por debajo del precio fijado para la venta.
¿Y qué es X?
En su enigmático mensaje, Elon Musk afirmaba que pretendía utilizar Twitter para acelerar la creación de X. ¿Pero qué es X? Poco se sabe todavía, pero todo apunta a que detrás de esta letra estaría el nuevo proyecto que el multimillonario sudafricano planea lanzar en 2023. Si bien Musk no ha desvelado todavía en qué consistirá este producto, el concepto de «la app para todo» parecer recordar a la aplicación china WeChat.
Así lo afirman al menos desde Bloomberg, quienes desvelan que Musk buscaría emular los servicios de la aplicación asiática. La plataforma ofrece diversos servicios, desde mensajería y llamadas gratis, sistemas de pago online o redes sociales, entre otras cosas. Las previsiones indican que esta nueva app podría alcanzar los 9 millones de suscriptores durante 2023.
Otras voces, basándose en mensajes de texto personales filtrados de Elon Musk, señalan que el multimillonario no tendría realmente un plan de negocio para Twitter. La desorbitada oferta habría sido lanzada de forma impulsiva por Musk, quien trató sin suerte de retirarla y que, finalmente, parece haberse visto forzado a huir hacia delante.
La dura semana de Elon Musk en Twitter
El anuncio de la final compra de Twitter no ha sido el momento más complicado del magnate esta semana, en una red social en la que ya se ha ganado la fama de «macarra». El pasado lunes, Musk se arrancaba a analizar en la aplicación el futuro desarrollo de la guerra de Ucrania; así como un posible desenlace nuclear de la misma.
Ukraine-Russia Peace:
– Redo elections of annexed regions under UN supervision. Russia leaves if that is will of the people.
– Crimea formally part of Russia, as it has been since 1783 (until Khrushchev’s mistake).
– Water supply to Crimea assured.
– Ukraine remains neutral.
— Elon Musk (@elonmusk) October 3, 2022
En su tweet Musk desgranaba los pasos a dar par alcanzar una paz al conflicto entre Rusia y Ucrania. Para ello, opina el hombre más rico del planeta, habría que rehacer las elecciones en los territorios ocupados; eso sí, bajo supervisión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Además, Crimea continuaría siendo parte de Rusia y se aseguraría el suministro de agua a este territorio. Por último, Ucrania tendría que mantenerse neutral; esto es, dar carpetazo a sus pretensiones de formar parte de la OTAN.
Los comentarios de Elon Musk no tardaron en provocar la indignación en la red social, que estalló en ataques contra el empresario. Hasta el mismísimo presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, bajó al barro y acusó a Musk de apoyar a Rusia.
Which @elonmusk do you like more?
— Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) October 3, 2022
Zelenski no fue el único oficial del gobierno ucraniano que saltó a la palestra, también el embajador ucraniano en Alemania, Andrij Melnyk, respondió a Musk con un «Que te den es mi respuesta muy diplomática para ti».
El goteo de personajes públicos cargando contra los tweets de Elon Musk fue una constante en la plataforma. Al hilo comenzaron a surgir dudas acerca de la posición de Musk, llegando a cuestionar incluso el servicio de internet satelital Starlink, propiedad del multimillonario, que ha permitido a Kiev permanecer en constante conexión desde el principio de la invasión.