Empresas de la Comunitat Valenciana han diseñado veinte proyectos tractores de alto valor añadido que optan a captar fondos europeos en los ámbitos de la energía, la descarbonización, la ciberseguridad, las baterías, la movilidad o el 5G y que cuentan con el apoyo de la Generalitat para la reindustrialización de la economía.

Este miércoles se presentarán al Ministerio de Industria estas veinte iniciativas para que sean incluidas en el Plan de Recuperación del Gobierno, después de haber sido desarrolladas durante un mes en colaboración público-privada, según ha avanzado el president de la Generalitat, Ximo Puig, durante la firma del protocolo con las entidades que lideran estos proyectos y que se enmarca en el Plan de Recuperación.

Entre todos suman al menos 5.500 millones de inversión y podrían generar hasta 60.000 empleos de calidad si consiguieran alcanzar sus objetivos, y responden a objetivos de sosteniblidad a largo plazo.

Estos proyectos que aspiran a obtener fondos europeos han sido preparados por multinacionales, entidades y empresas como ANFEC (fabricantes de fritas), ASCER (patronal cerámica), Balearia, BP Oil, Cemex, Clave, la Autoridad Portuaria de Valencia, Grupo Dominguis, ITV Ice Makers, Jeanologia, LM Wind Power, Power Electronics, PLD Space, S2 Grupo, Simplicity Works, Stadler, VLC Fotónica, Vodafone, Zeleros y Ford, entre otras.

Entre los proyectos se encuentra relocalizar en España la fabricación de calzado; la implantación de una gigafactoría de baterías; un laboratorio industrial basado en tecnología Hyperloop; ciberseguridad aplicada; la fabricación de pequeños satélites; fabricación de elementos para energía eólica en zonas de riesgo de despoblación; la producción de combustibles líquidos sostenibles; y la aplicación industrial del H2 verde.

La Generalitat ha comprometido su apoyo a estos proyectos, concebidos para adaptar la economía a la digitalización y la sostenibilidad, transformar los sectores y crear un efecto arrastre en proveedores y pymes, y aumentar la prosperidad de los valencianos, ha manifestado Puig ante representantes de estas empresas en un acto al que han asistido los consellers de Economía, Rafael Climent, Innovación, Carolina Pascual, y Política Territorial, Arcadi España.

El president ha defendido que transformar «no es derribar, no es eclipsar el pasado» sino que significa producir bienes diferentes, desarrollando sectores con más valor añadido, más tecnología, productividad y conocimiento. «Nuestro modelo y nuestros sectores tradicionales tienen futuro», ha apostillado para decir que tienen que adaptarse a los desafíos e incorporar nuevos para dar el salto a la competitividad.

Ha citado la estrategia de las 3 erres: resistir -donde estamos ahora-, recuperarnos y reinventarnos, y para ello hay que apostar por la reindustrialización y lograr un mayor peso de la industria que el actual (19 % del PIB frente al 25 % que llegó a tener la Comunitat). El president ha defendido que la crisis económica derivada de la pandemia debe ser una oportunidad con la palanca que es Europa para ganar competitividad tecnológica, productividad con nuevas tecnologías, y recuperar la producción deslocalizada.

A estos objetivos se añade la vertebración de la economía y el territorio, otro de los requisitos que pide Europa, y así se recoge en proyectos de acciones industriales en el interior contra la despoblación, de parques industriales 5G o descarbonización. Ha insistido en la importancia de la colaboración público-privada («nos necesitamos unos a otros», ha dicho), el trabajo para estar «listos» en la movilización de fondos europeos «sin tiempos muertos», y en llevar a cabo una transición sin desempleo tecnológico.

El conseller de Economía ha manifestado que no podemos caer en el pesimismo porque la sociedad demanda unión para superar juntos la crisis sanitaria y económica y ayudar a recuperar el empleo.

Los próximos meses serán «cruciales» y por eso ha animado al tejido industrial a desarrollar y presentar «el mayor número posible de proyectos tractores susceptibles de recibir financiación y que sean vertebradores, impliquen a las pymes, mejoren la competitividad y contribuyan a una economía verde».

Según ha recordado, el Pan Estratégico Industrial Valenciano prevé ayudas para este año de 42 millones de euros enfocadas a mejorar la competitividad y la sosteniblidad de las pymes industriales.

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