La recuperación de la rutina en las actividades diarias una vez superadas las restricciones a la movilidad impuestas por el Gobierno durante la pandemia ha permitido que poco a poco los agentes sociales recuperan la normalidad. Uno de los sectores que está en proceso de reactivación es el del transporte de mercancías por carretera. En el caso de la provincia de Castellón, desde la patronal del sector, se ofrecen datos que avalan esa recuperación, dado que está a un 75 por ciento de actividad, aunque por debajo de los porcentajes alcanzados antes del 13 de marzo.

La vuelta a la normalidad del sector del transporte de mercancías por vía terrestre es un buen síntoma de que el país vuelve a la senda de la actividad industrial. Y es que este sector tiene una repercusión sobre dos mil personas de la provincia de Castellón que viven directa o indirectamente del mismo. La Asociación Empresarial Castellonense de Transportes de Mercancías por Carretera (ACTM), valora positivamente la recuperación detectada y confían en que la recuperación de sectores industriales como el cerámico permitan que poco a poco se incorpore toda la flota de camiones hasta alcanzar el 100 por cien.

El sector industrial, en especial el azulejero, es el que da trabajo a la flota de camiones radicada en la provincia de Castellón. Según datos de la ACTM el frenazo a la producción en el sector cerámico en la primera quincena de abril dejó su huella en el transporte, reduciendo la actividad a la mínima expresión. Un parón acompañado de otro similar en la demanda que hacía que los viajes de vuelta se hicieran con las cajas de los camiones vacías algo que repercute negativamente en los costes.

Ahora, superado ese parón y con el retorno de la actividad, los transportistas de mercancías empiezan a ver un poco más claro el futuro, tal como apuntó recientemente la secretaria general de la ACTM, Lara San Miguel. Pese a estos datos alentadores, prefiere ser cauta, porque aún hay más de un tercio de empresas con trabajadores afectados por expedientes temporales de empleo.

Además, desde la patronal del sector del transporte de mercancías por carretera castellonense se hace hincapié en un dato que consideran significativo, que en las plataformas logísticas hay menos personal, dado que están en “ERTE, lo que implica reducción de horarios, largas horas de espera para la carga y descarga y preparación de pedidos. Esto significa pérdida de horas y un incremento de los costes”.