Salvador Navarro, presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), ha participado en un nuevo webinar organizado por Propeller Valencia para analizar la situación de las empresas y la recuperación económica tras la crisis. Durante su intervención, Navarro quiso apelar tanto al compromiso del empresariado con la economía como con la sociedad. “No solo somos empresa y economía; como empresarios tenemos una obligación con la sociedad”, aseguró.

El también vicepresidente de CEOE y socio de Propeller recordó que durante estas semanas han prevalecido los criterios fijados desde el Ministerio de Sanidad, “que incluso en ocasiones ha actuado de manera unilateral”, y ahora ha llegado el momento de que ganen protagonismo las medidas económicas, “sin olvidar, por supuesto, las que sean necesarias en materia sanitaria”.

Durante la sesión, moderada Alfredo Soler, vicepresidente de Propeller, Salvador Navarro se mostró confiando en una próxima recuperación del empleo y reiteró la necesidad de la “responsabilidad individual” de cada persona ya que “un nuevo confinamiento en otoño sería insostenible a nivel económico”. Asimismo, recordó la importancia de mantener los niveles de renta de autónomos y desempleados para que la recuperación sea posible.

El presidente de CEV se mostró especialmente crítico con la “escasa o ninguna voluntad de diálogo social del ejecutivo central, que contrasta con la administración autonómica, que sí ha mantenido una posición clara de diálogo y voluntad de entendimiento”.

«Empresas que paguen a sus proveedores»

En esta misma línea, Salvador Navarro recordó que la Comunitat tiene una ubicación geoestratégica privilegiada, “con grandes infraestructuras que nos hacen líderes, como es el caso del Puerto de Valencia, al que los empresarios hacemos más grande”. Sin embargo, lamentó la “falta de unidad de acción estratégica tanto a nivel nacional como en Europa”. El presidente de la CEV aseguró que la Comunitat tiene que hacer los deberes y hacer valer su peso específico para no quedarse atrás en cuestiones tan esenciales como el reparto de fondos.

Durante su intervención también se refirió al informe que la CEV ha elaborado con el trabajo de más de 700 personas integradas en las 18 comisiones de trabajo de la Confederación y que recoge un extenso paquete de propuestas para ganar una competitividad que favorezca la recuperación.

Navarro quiso hacer hincapié en una serie de medidas fundamentales que habría que acometer. Por un lado, las catalogadas como coyunturales, serían aquellas que permitan mantener niveles de renta o el aplazamiento de cargas tributarias. Asimismo, se refirió a medidas encaminadas a mantener un compromiso de pago de las administraciones públicas a las empresas, como también “recomendamos a las empresas privadas que asuman los compromisos con sus proveedores”. “Necesitamos empresas competitivas, que crezcan, generen empleo y paguen sus impuestos”, aseguró.

El presidente de CEV también explicó que en estos momentos se está negociando con el Gobierno la continuidad de los ERTE e insistió en la necesidad de que sean “flexibles” de tal forma que no sean una rémora para la recuperación.

Medidas específicas para determinados sectores

Salvador Navarro destacó que la exportación sigue siendo fundamental y explicó que hay sectores productivos muy relevantes como es el caso de la automoción o el sector servicios (turismo) que deberían ser objeto de medidas específicas. “Queremos incrementar la industria, aunque para eso hacen falta otras muchas medidas de apoyo”, aseveró.

El presidente de CEV se mostró especialmente vehemente en la defensa de todas las medidas encaminadas a luchar en contra de la economía sumergida y argumentó la necesidad de que las empresas ganen en dimensión y productividad. Asimismo, explicó que los empresarios y empresarias tienen que ganar en formación y la necesidad de profesionalizar las empresas. “Queda camino por recorrer en este sentido”, matizó

Salvador Navarro defendió la importancia de las empresas “tractoras”, como es el caso de Ford, en su papel de arrastre hacia la innovación del entramado empresarial.

Para acabar su intervención, Navarro volvió a apelar a la “responsabilidad individual” de las personas en esta crisis y defendió la labor de los empresarios para aportar valor, generar bienestar social y vertebrar, “por lo que deben escucharnos, tanto los políticos como la administración».