La comisión de investigación sobre el fraude de 4 millones de euros en la Empresa Municipal de Transportes (EMT) cierra este miércoles sus sesiones con una nueva comparecencia del gerente, Josep Enric García Alemany, y la jefa del área de gestión, María Rayón.

Según han indicado los grupos municipales de la oposición representados en la comisión, PP, Ciudadanos (Cs) y Vox, los dos dirigentes de EMT vuelven a comparecer ante las «contradicciones» que se han advertido en sus declaraciones en la comisión y ante el juzgado que investiga la estafa.

El PSPV, cuya concejala Elisa Valía preside la comisión, ha recordado que mañana es la última sesión, con las comparecencias de Rayón a las 13 horas, y la de García Alemany a las 16 horas y que los expertos de Ernst & Young y Telefónica, citados para mañana, han confirmado que no acudirán.

Según Compromís, el objetivo de las comparecencias sigue siendo continuar aclarando todas las cuestiones relacionadas con el fraude que se hizo contra la EMT y con los protocolos y procedimientos de pago a proveedores implantados por la actual dirección, así como la no aplicación de dichos protocolos por parte de la extrabajadora o del procedimiento seguido por la entidad bancaria implicada. Han insistido en que el objetivo prioritario ha de ser el continuar trabajando para recuperar el dinero robado por los estafadores.

Los consejeros del PP en la EMT Carlos Mundina y Marta Torrado han explicado que tanto García Alemany como María Rayón aseguraron en la comisión que la empresa tenía un protocolo para ejecutar pagos y que se hacía una conciliación de los saldos bancarias diariamente, pero en el juzgado negaron dichos protocolos y dijeron que la conciliación no era diaria.

Además, han añadido que los trabajadores que han declarado en la comisión «también han señalado las contradicciones del gerente y las mentiras» del concejal y presidente de la EMT, Giuseppe Grezzi, a quien van a volver a pedir que «asuma la responsabilidad política por el robo y su nefasta gestión». A su juicio, en la comisión se ha puesto en «evidencia que la gestión de la EMT ha sido nefasta y que la estafa se podía haber evitado si la empresa hubiera tenido los controles que debe tener una mercantil pública que maneja un presupuesto cercano a los 120 millones de euros».

Ciudadanos ha incidido en que ellos solicitaron que volvieran a declarar porque tras otras comparecencias, especialmente de las administrativas, consideran que ambos «faltaron a la verdad» y ha apuntado que mañana tienen la oportunidad de «decir la verdad«.

El consejero Narciso Estellés también ha argumentado que ambos dirigentes «admitieron en sede judicial que no habían procedimientos y que la EMT tenía vulnerabilidades y debilidades que hicieron más fácil el camino del fraude a los malhechores», algo que «nunca admitieron» ante la comisión. Ha señalado que mañana volverán a solicitar la documentación que aún no les han entregado, como el contrato del exsecretario de 2015, el nuevo contrato, el libro mayor de cuentas o los correos del personal de alta dirección.
El portavoz de Cs, Fernando Giner, ha asegurado que García Alemany y Rayón podrán «rectificar sus declaraciones», que «contradijeron» las comparecencias de otros empleados de la EMT y ha reiterado que el gerente debe dimitir porque su responsabilidad en la estafa «es ineludible».

El consejero de Vox en la EMT Vicente Montáñez ha indicado que mañana pretende «desmontar el mundo color de rosa idílico que en su día nos describieron. Pero como se ha desprendido del resto de comparecencias de empleados, no hay nada más alejado de la realidad de la EMT, que dista mucho de lo que debería ser una empresa pública bien gestionada». Ha incidido en que repasará las respuestas más comprometidas y las cruzará con las de los empleados, «diametralmente opuestas, y las hechas en sede judicial, y tratará de confirmar que su gestión dista mucho de las buena praxis«.