Sistemas de calidad predictiva, detección de fallos de mantenimiento, anticipación a paradas en planta no controladas o circuitos de eficiencia energética. El abanico de aplicaciones reales es bastante rico. La industria 4.0 es un hecho y las empresas se ven en la necesidad de involucrarse en está transformación.

Clasificadores inteligentes, realidad aumentada o incluso sistemas capaces de leer emociones de las personas son algunas de las tecnologías que ya están al alcance del proceso productivo, pero ¿estamos realmente preparados para esta implantación de tecnologías de inteligencia artificial?

Esta es una de las grandes cuestiones que se abordaron en la tercera edición de la jornada ‘El futuro de las áreas industriales’ que, en esta ocasión, se centró en la inteligencia artificial y su aplicación en la industria.

El evento, organizado por la Associació de Parcs i Polígons Industrials Ribera Baixa (Appi), tuvo lugar en Edem Escuela de Empresarios, en la Marina de València, en la que intervinieron expertos de empresas tecnológicas punteras, exponiendo sus casos de éxito y dando las claves para «perder el miedo a sumergirse de lleno en un verdadero proceso de digitalización que incluya la inteligencia artificial como factor clave», según explicaron desde la organización del acto que se caracterizó por su carácter formativo y divulgativo, dirigido a todo tipo de público y por su vocación de acercar cuestiones técnicas o especializadas al día a día de cualquier empresa.

Mesa de debate: Manuel Suárez, CEO en Tyris.ai; Diego Ospina, R&D Manager en CT Ingenieros; y Joaquín Carretero, director de Estrategia en Industria 4.0 en Nunsys | E3

En este sentido, uno de los ponentes principales, el director de Estrategia en la Industria 4.0 de Nunsys, Joaquín Carretero, insistió en la necesidad de establecer estrategias en la transformación de las empresas a largo plazo y dirigidas al cliente: «No se puede cumplir una estrategia basada en parches, al final estamos construyendo un Frankenstein con soluciones puntuales en cada una de las áreas, pero sin una estrategia conjunta». Según explicó el experto, uno de los errores que ha detectado es la falta de conocimiento de las soluciones que les pueden ofrecer las distintas tecnologías.

«En las reuniones donde se debaten cosas relevantes de tecnología, algo que es estratégico para la compañía, hay una indecisión total, una falta de conocimiento, no hay tecnólogos en la empresas, la solución tecnológica se hace teniendo en cuenta lo que hace el vecino y eso es algo que se acaba pagando a medio plazo. Si no haces bien las cosas, se dan pasos hacia atrás», añadió Carretero a Economía 3.

Durante su intervención dio a conocer a los asistentes la manera de detectar la necesidad para que el uso de una determinada tecnología pueda solucionar un problema, el alcance que pueda llegar a tener «que se obtenga un resultado más rápido en el retorno de inversión, cómo ser más eficiente en la resolución de problemas y a la hora de tomar decisiones».

Carretero también expuso una serie de casos de éxito que Nunsys ha desarrollado en diversas industrias y que ya están implantados como sistemas de clasificación para calidad en productos, sistemas de mantenimiento predictivo o por ejemplo sistemas de predicción de averías, y algunos otros relacionados con reconocimientos de imágenes, asistentes de voz o análisis de imagen.

Carretero: «No se puede cumplir una estrategia basada en parches, al final estamos construyendo un Frankenstein con soluciones puntuales en cada una de las áreas, pero sin una estrategia conjunta»

En referencia al tejido empresarial valenciano el experto explicó que «hay mucho interés por la industria 4.0 y la transformación digita, y que muchas empresa están realizando actuaciones, pero que suelen ser puntuales». No obstante, lamentó que de forma generalizada se piensa en el corto-medio plazo  que «van a hacer una inversión que dentro de dos años va producir un retorno, y ya veremos que pasa después».

Carretero comentó que en algunos casos esto ocurre por falta de conocimiento, en otros por falta de recursos y, en muchas ocasiones, por no tener claro las necesidades que se tienen. «No se está entendiendo que hemos cambiado de ciclo y que la tecnología ha venido para quedarse».

Showroom tecnológico durante la jornada| E3

«Necesitamos tecnólogos que entiendan de procesos digitales porque cada vez van a haber más máquinas, robots y más inteligencia artificial dentro de las organizaciones y estas máquinas deben relacionarse con los humanos de una forma óptima para la mejora continua y hacer actuaciones eficientes para ser muy competitivos». subrayó.

Para finalizar, explicó que «no estamos consiguiendo evangelizar o transmitir que el cambio organizacional y cultural de las empresas debe ir acompañado de todo esto, tenemos que entender que nuestros trabajos no van a ser los mismos y que vamos a colaborar con máquinas, robots y sistemas digitales. Debemos empezar a caminar hacia nuevos conocimientos que van a ser necesarios en esta nueva industria y que tenemos que espabilar. Todos tenemos que reinventarnos ante este cambio».

Por su parte, el R&D Manager en CT ingenieros, Diego Ospina, incidió en que han detectado que las empresas en general tienen la percepción,-sobre todo en sectores donde no hay una fuerte inversión en I+D+i-, que tienen que involucrarse en la tendencia que está marcando la cuarta revolución industrial, pero no saben cómo hacerlo ni tampoco qué les aporta.

«Esto lleva a veces a la implementación de tecnologías donde, no es que no se obtengan beneficios, es que se pierde hasta dinero». El experto insistió en la necesidad de crear un marco de referencia para que cada empresa pueda evaluarse a sí misma. «Al final hay como un miedo a lo desconocido y hay una presión del directivo por involucrarse en ello, pero no hay marco de referencia a nivel estratégico y tecnológico para que se puedan evaluar a si mismas las empresas».

Por eso, recomendó empezar a contextualizar a nivel tecnológico de qué se dispone y cuál es el proceso tecnológico que se está empezando a desarrollar para que un empresario pueda saber de qué forma puede servir,-o no-, a su empresa.

Además, insistió en hay que ir mas allá de la parte técnica, y aprender a cómo detectar oportunidades de implementación y no solamente de inteligencia artificial, si no de cualquier tecnología habilitadora para la industria 4.0 dentro de los procesos de la empresa y «cómo elegir cuáles son las prioritarias, que pueden aportar a la cadena de valor de las empresas».

Ospina: «No hay marco de referencia a nivel estratégico y tecnológico para que se puedan evaluar a si mismas las empresas»

«Tienes un montón de tecnologías y lo primero que tienes que hacer es analizar estratégicamente como las puedes implementar dentro de tu empresa, para reducir costes o aumentar el valor añadido de tu producto».

La empresa, que ofrece servicios de ingeniería 3D desde la parte conceptual hasta la implementación, a nivel nacional e internacional en sectores como el transporte, la aeronáutica, la automoción, el ferroviario o la ingeniería de construcción, ha tenido que convertirse, también en consultora porque según aclaró Ospina «nos hemos dado cuenta que a nuestros potenciales clientes debemos asesorarles inicialmente sobre el proceso de transformación, dónde invertir recursos y en qué proyectos pilotos podemos implantar directamente».

En esta mesa de diálogo, moderada por David Muñoz, EU Industry 4.0 Engineer en Ford Motor Company,  también participó el CEO en Tyris.ai, Manuel Suárez.

La secretaria autonómica de Economía Sostenible, Rebeca Torró, fue la encargada de inaugurar el acto, acompañada por el director del Área de Formación directiva de Edem, Juan Antonio Carrasco, y del presidente de Appi Ribera Baixa, Vico Valero.

El evento arrancó con la conferencia del gurú tecnológico Javier Sirvent titulada Nunca hemos ido tan rápido con la tecnología y jamás volveremos a ir tan despacio.

Tras la pausa para el café, la jornada se retomó con la exposición de tres casos de éxito: Nutai-CFZ Robots; Tyris.AI y Nouss.

El uso de la inteligencia artificial, la robótica y otras innovadoras tecnologías puede considerarse ya habitual en las pymes valencianas aunque aún son muchas las que siguen explorando las posibilidades que esta tecnología puede aportarles, sobre todo, en cuanto a reducción de costes, incremento de la productividad y de la eficiencia. El objetivo es ahora, por tanto, acelerar la aplicación de esas tecnologías en las áreas industriales y en su gestión. La directora general de Industria y Energía, Empar Martínez, fue la encargada de clausurar la jornada.