El primer parking para motocicletas de la Comunitad Valenciana ya ha llegado. Y está en Alicante. Nadie antes había vislumbrado como real la posibilidad de instaurar una alternativa a los aparcamientos convencionales que fuera exclusiva para motos. Sí lo han hecho Alejandro Martín, Begoña Entrena y Juan de Dios Marcos, socios fundadores de Mimoto Parking. A los tres, amigos y también moteros, su propia experiencia les embarcó en un proyecto que empezó como tal y que es ahora una realidad.

La  compañía dispone ya de dos establecimientos en la ciudad que operan a pleno rendimiento desde mayo. Uno, el parking piloto que echó a andar en 2018 -y en el que se han llevado a cabo todas las pruebas logísticas y tecnológicas para dar con la tecla-, está situado en la calle Cardenal Belluga. El otro, fue inaugurado el pasado abril y está situado en la calle Berenguer de Marquina. El primero cuenta con siete plazas y el segundo, cuyas magnitudes son la confirmación de que el proyecto va a ir más, con 36.

“La idea surgió de los tres fundadores. Somos amigos desde hace mucho tiempo y los tres somos moteros. Nos dimos cuenta de que se estaba restringiendo cada vez más aparcar en la acera, de que la seguridad era un problema cada vez mayor, y de que los aparcamientos de siempre destinaban un espacio residual a las motos». Ese fue el diagnóstico. Y después, la receta: “¿Por qué no montamos un local pequeño donde poder aparcarlas?”. De esa manera cuenta Alejandro Martín cómo Mimoto vio la luz y cómo los tres socios identificaron la necesidad de solventar un problema real.  “Hemos empezado de cero y nos ha costado mucho, pero no hay otro modelo igual al nuestro ”, afirma orgulloso Martín.

Se trata de una iniciativa que responde a una creciente demanda, ya que, según Alejandro Martín, «cada mes se venden más motos y menos coches”. Una situación que genera una problemática muy determinada: poder estacionar esas motocicletas. Martín hace referencia a un estudio de la Asociación Nacional de Vehículos de Dos Ruedas donde se refleja que, en Madrid, las plazas de aparcamiento para motos solo cubren el 3% de la cuota que acapara este tipo de movilidad. En cuanto a Alicante, estos vehículos de dos ruedas representan el 10% del parque móvil y hay registrados más de 28.000.

Una plataforma online y un registro de dos minutos

Por ahora, los usuarios de MiMoto Parking ascienden a 60. Seis decenas de personas que han hecho uso de la plataforma online en la que el cliente interesado se registra para obtener un código de seis dígitos que posteriormente se utiliza para abrir las puertas del parking y poder estacionar la motocicleta. Quien lo ha probado ha valorado de forma positiva la experiencia y ha quedado satisfecho con el servicio al que han accedido. “La gente está encantada de poder dejar su moto en un sitio donde no corre ningún peligro”, indica Martín al respecto.

De izquierda a derecha, Juan de Dios Marcos,  Begoña Entrena y Alejandro Martín, socios fundadores de Mimoto |E3

El parking, además de la sencilla e intuitiva plataforma donde el registro se completa en dos minutos, cuenta con taquillas para poder guardar el equipaje -casco, guantes o chaqueta-; asistencia 24 horas en caso de que hubiese que solucionar cualquier incidencia; o un software “capaz de gestionar una cantidad infinita de aparcamientos”. Así se refiere Alejandro Martín, ingeniero industrial, a una suerte de sistema de Inteligencia Artificial que él mismo ha desarrollado.

“Le hemos metido las lógicas y luego el sistema hace todo lo demás. Es como si tuviésemos a una persona física que va autorizando y tomando nota de quién entra y quién sale y que también gestiona las alarmas. Es un custodio informatizado”, explica Alejandro. “Aunque no lo parezca”, continúa, “detrás hay una tecnología puntera para que todo funcione de manera sencilla. Hemos desarrollado un proyecto muy novedoso”.

Expansión: primero, autonómica y luego, nacional

MiMoto Parking asegura que ha llegado para quedarse y prepara un plan de expansión autonómico primero, nacional después, en el que se instalarán 40 aparcamientos exclusivos para vehículos de dos ruedas en los próximos tres años. “Hemos empezado en Alicante y la idea es afianzar aquí la marca y luego expandirla en la Comunidad Valenciana. Después en ciudades como Madrid o Barcelona”. El plan, ambicioso, no se queda ahí. “Aplicando el sentido común, Italia tiene muchísimas motos. Podría ser interesante”, señala Martín.

El mayor reto y, a la vez, la mayor oportunidad, explica el socio fundador, es que “no hay competencia”. Por eso, prosigue, es un “servicio que no conoce nadie y que por tanto nadie busca”. Ahora bien, Martín afirma que tanto él como sus otros dos compañeros y socios fundadores están “al 200% para darlo a conocer” y que, aunque esté costando, no han tenido todavía “ni un comentario negativo” lo que, a priori, ya es un buen indicador.