Del jueves 15 al sábado 17 de noviembre se celebrará en València el I Congreso Internacional de Museos de la Seda, que reunirá a representantes de 17 museos pertenecientes a la Ruta de la Seda. Con el apoyo de la Unesco y el patrocinio de Turisme Comunitat Valenciana, el evento se ha organizado con el objetivo de «convertir el Museo de la Seda de València en referencia internacional», según declaró ayer el catedrático de Universitat de València (UV) y codirector del congreso Ricard Huerta.

El presidente del Museo, Vicente Genovés, indicó que «desde que en 2016 València fue declarada Ciudad de la Seda, queremos seguir divulgando este patrimonio a nivel nacional e internacional». Como explicó el también codirector del congreso y catedrático de la Universidad de Zaragoza, Germán Navarro, uno de los resultados que se persiguen es «la publicación de un libro que sirva para crear una red internacional de museos de la seda para estrechar la colaboración entre ellos, a partir de una inciativa que ha nacido aquí». 

Los conferenciantes que intervendrán en el congreso serán expertos internacionales procedentes de los países de la Ruta de la Seda. Desde Italia, los directores de los museos de Padova y Como, más el director de La Fondazione Filatoio Rosso di Caraglio, la fábrica de seda más antigua de Europa; el director del Museo de la Seda de Estocolmo, por parte de Suecia; y Francia con una única ponencia  en representación de los museos de todo el país.

Como ha indicado Huerta, el caso francés es muy particular, ya que Lyon, que fue la ciudad que sustituyó a València como capital europea de la seda en el Siglo XIX, y además el lugar donde nació el concepto contemporáneo de moda, no cuenta con un museo propio. España estará representada por los directores de la Estación Sericícola de Murcia y del Museo de la Isla de La Palma, en Canarias.

Mención aparte merece la representación oriental que asistirá al congreso, especialmente el director de uno de los museos más importantes de la Ruta, el de Bursa (Turquía) y Dmitriy Voyakin, director del Instituto Internacional de Samarkanda y de la Ruta de la Seda de la Unesco.

El Congreso nace en València pero será itinerante, y se celebrará cada cierto tiempo en un país diferente. “No se ha concretado todavía si se realizará de forma anual o bianual, pero lo que si que está claro es que siempre quedará València marcada por ser la primera ciudad que acoge este importante evento”, ha indicado Genovés.

Asimismo, Huerta ha deseado subrayar que no está dirigido a expertos, sino a público interesado por la tradición histórica de la seda, que puede consultar la programación e inscribirse en la web que  creada a tal efecto. La sesiones se celebrarán en el salón de actos del Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad (Muvim).

Exposición Museos de la Seda

Como complemento, el edificio del Colegio del Arte Mayor de la Seda acoge desde ayer una exposición dedicada a los museos más importantes del mundo. Se han diseñado 21 paneles con información sobre todos ellos, con la intención de «darlos a conocer e incluso animar a nuestros visitantes a viajar a ellos y conocerlos mejor».

Entre los paneles destacan casos como el del Museo de la Seda de Beirut, tres veces destruido por las guerras y vuelto a construir y, sin duda, el Museo Nacional de la Seda de China, origen de la fabricación y de la comercialización de la tela. Construido en 1992 y situado en la orilla meridional del Lago del Oeste de la ciudad de Hangzhou, es el mayor del mundo, con 20.000 m2 de superficie a la que se suman 40.000 más dedicados a jardines.  Huerta ha resaltado que «con todos estos museos se han establecido relaciones que hasta ahora no existían». 

Y finalmente, un dato que conecta la València de hoy con la que fue la principal productora de este material entre los siglos XV y XVIII: ninguno de los museos representados, por grandes e importantes que sean, sobrepasan en antigüedad el Siglo XIX. Sólo la sede de València, el magnífico edificio del Colegio del Arte Mayor, hunde sus raíces en la época de esplendor de la Ruta. Sólo con esa credencial ya se ha ganado el derecho de convertirse en su principal divulgadora.