BBVA ha ganado en los primeros nueve meses del año 4.323 millones de euros, un 25% más que en el mismo periodo de 2017. De los mercados en los que opera la entidad ha sido el mexicano, bajo la marca Bancomer, el que ha aportado el beneficio mayor: 1.851 millones de euros, lo que supone casi un 43% del beneficio global. El resultado incluye las plusvalías por la venta de BBVA Chile.

En el caso de Turquía, bajo pabellón Garanti, ganó 488 millones, un 18% más que en el mismo periodo del año pasado, a pesar de las turbulencias en este mercado: deterioro macroeconómico, elevada inflación, pero con una buena evolución de los ingresos de carácter más recurrente y el control de los gastos de explotación.

El banco explica los buenos resultados globales por el buen comportamiento de los ingresos de carácter recurrente y la contención de los gastos de explotación, así como una menor aportación a saneamiento y provisiones.

BBVA España ganó 1.167 millones de euros hasta septiembre por su actividad comercial bancaria, un 10,5 % más, «muy influido por el favorable comportamiento de las comisiones, los gastos de explotación y el saneamiento crediticio». La actividad en el área inmobiliaria ocasionó unas pérdidas de 60 millones. Como se recordará, la entidad bancaria vendió esta rama de actividad a principios de mes al fondo Cerberus, lo que implica que en el último trimestre del año ya no tendrá impacto en las cuentas.

De momento, la exposición neta inmobiliaria descendió un 29,8 % hasta septiembre en comparación interanual, y quedó situada en 5.460 millones de euros.

En cuanto a la actividad bancaria desplegada en España, los resultados reflejan un retroceso del crédito hipotecario, al sector público y las grandes empresas. Por el contrario, crece la financiación al consumo y las tarjetas de crédito.

Además la entidad vió como crecían los recursos de clientes en un 1%, subieron las comisiones netas un 8% hasta alcanzar 1.268 millones. También han contribuido el freno a los gastos de explotación, que se redujeron un 4%, hasta alcanzar los 2.455 millones.

El margen neto se sitúa en 2.061 millones de euros, un 5,3% menos que en el mismo periodo del año anterior.

Resto de mercados

La evolución positiva de la filial mexicana contrasta con la contracción económica del país, del orden del 0,6%, y las turbulencias ocasionadas a lo largo del año por la incertidumbre sobre el acuerdo económico con Estados Unidos y Canadá que, finalmente, se despejaron.

Los resultados en Latinoamérica no fueron tan positivos, con un beneficio de 467 millones, un 24,2% menos que hace un año. Esta reducción se debe tanto a la venta de BBVA Chile como a la situación de hiperinflación en Argentina que redujo las ganancias e  un 65,7%. También se redujo el beneficio de la filial de Perú un 2,1%, si bien arrojó un beneficio de 536 millones, mientras Colombia ganaba casi un 1%, 481 millones.

En el resto de los países del área en los que opera el banco -Venezuela, Paraguay, Uruguay y Bolivia- el beneficio conjunto sumó 126 millones de euros y se elevó un 19,3 %.

En cuanto a los resultados en Estados Unidos la entidad ganó 541 millones de euros, un 34,5 % más, debido, fundamentalmente «al aumento del margen de intereses, a las menores provisiones y a un importe más reducido del gasto por impuestos como consecuencia de una disminución de la tasa impositiva efectiva, tras la reforma fiscal aprobada en el último trimestre del 2017″, ha explicado el banco.

Turbulencias e hipotecas

El consejero delegado de BBVA, Carlos Torres Vila, a destacado el resultado «a pesar de las dificultades en Turquía y en Argentina». Para el próximo presidente de la entidad bancaria, este resultado positivo de debe a la transformación del banco y el modelo diversificado que ha permitido «que los ingresos recurrentes en estos nueve meses crezcan más de un 10%, mientras que los gastos lo hacen en menos de un 3%, sin considerar la variación de las divisas».

Torres Vila ha destacado la transformación digital del banco. «A septiembre, las unidades vendidas por canales digitales son el 40% del total.  Y nuestros clientes móviles se han incrementado un 37% interanual, hasta llegar a 21,7 millones de clientes. Si nos fijamos en el conjunto de clientes digitales suponen ya un 49% del total. Es decir, prácticamente ya hemos alcanzado el objetivo de acabar el año con la mitad de nuestros clientes interactuando por canales digitales», ha subrayado.

En cuanto al tema de las hipotecas, el consejero delegado señaló que «lo que no se puede hacer es aplicar un cambio a hechos pasados. Porque en eso consiste la seguridad jurídica y en eso se fundamenta nuestro estado de derecho, que es una garantía para todos, para los ciudadanos y también para las empresas”.