El precio de la electricidad sube un 69% en el último medio año
El precio mayorista de la electricidad encadena una subida del 69% en los últimos seis meses, una tendencia que no va a cambiar, dada la escalada del gas y el petróleo, junto con el aumento de la demanda invernal, informa la consultora Grupo Ase. El precio de la electricidad en septiembre ha cerrado en septiembre a 71,27 euros MWh, un 10,8% más que en agosto y un 45% más que hace un año.
La energía de origen hidráulico se está ofertando un 12% más cara que el carbón y está cerrando precios en el 60% de las horas. La subida de la demanda previsible con la llegada del frío, el precio del CO2 a 20 euros la tonelada y la subida del gas y el petróleo hace recomendable la aplicación de medidas regulatorias, más allá de reducir fiscalidad.
Esta situación la están aprovechando todas las tecnologías para elevar sus ofertas y sacar provecho, también las renovables. En concreto, la hidráulica ha ofertado en torno a los 74 €/MWh, superando los precios de salida de las energías fósiles, que se han quedado en los 66 €/MWh, si bien sólo ha alcanzado el 10% del mix en septiembre.
En septiembre el carbón ha recuperado protagonismo en el mix de generación. Ha producido el 21% de la electricidad, un 17% más que en agosto y un 45% más que en septiembre del año pasado, lo que resulta paradójico, dado el precio del CO2. La energía procedente del carbón ofertó un 12% por debajo de la hidráulica, a 66 euros.
Por su parte, la energía nuclear, con su parque de generación al 100%, recupera su papel de fuente estable y produce una cuarta parte de la electricidad generada en España durante septiembre: 25,2% del mix.
Aumento de la demanda
La demanda eléctrica en septiembre aumentó un notable 3,4% respecto a hace un año. Una vez tenidos en cuenta los efectos del calendario y las temperaturas, la cifra de incremento de la demanda peninsular de energía eléctrica se mantiene en el 3,4%.
El mercado eléctrico se enfrenta a un periodo de precios altos, que podría alargarse si no se toman medidas regulatorias, que lo hagan más eficiente y competitivo, señala Grupo Ase. La energía renovable distribuida quizás sea una fórmula que nuestros políticos deberían tomarse en serio si quieren una industria competitiva y una oportunidad para que España tenga un mercado eléctrico más económico que el resto de su entorno.