El president Ximo Puig ha recibido esta mañana en el Palau de la Generalitat a la ministra de Sanidad, Carmen Montón. Puig ha manifestado que, a pesar de los pocos días transcurridos desde su nombramiento, «el nuevo Gobierno ha cambiado el ambiente político. El diálogo es el eje transversal entre las fuerzas políticas y territoriales y la ministra se ha mostrado comprometida con la solidaridad ante los desfavorecidos». En sus palabras, «el espíritu del Botànic ha llegado a Madrid».

Puig también ha aprovechado para agradecer públicamente la colaboración del presidente Sánchez en el recibimiento del buque Aquarius, tema que ha sido uno de los que han acaparado la reunión con Montón. «La acogida del Aquarius sintetiza que se ha producido un cambio de paradigma en la sociedad valenciana», a la vez que «se ha enviado un mensaje humanista a Europa, que vive un fuerte rebrote de la xenofobia».

La ministra ha felicitado «al Consell y a la ciudadanía por el éxito de la operación y la solidaridad que se ha demostrado. Ha sido un ejemplo de que se abre un tiempo nuevo de colaboración entre administraciones».

«Volver a los orígenes»

Montón ha expuesto la hoja de ruta que concibe para su labor al frente de la cartera de Sanidad. «Queremos volver a los orígenes, a la Ley General de Sanidad de Ernest Lluch y a la Ley de Dependencia de 2006 del gobierno de Zapatero». En definitiva, ha indicado,«a la recuperación de los derechos arrebatados en los últimos años».

El espíritu de diálogo también ha sido subrayado en diferentes momentos de la comparecencia. «El diálogo saca a relucir lo mejor de la democracia. Es la vía para buscar soluciones conjuntas, normalizar relaciones con las Comunidades Autonómas y mejorar los servicios sociales».

Puig ha recordado los principales ámbitos de la gestión de Montón cuando formaba parte del Consell: «Se trabajó para restablecer la sanidad universal, se eliminó el copago farmacéutico a más de 1 millón de pacientes y se logró el regreso de la gestión pública a los hospitales privatizados». Estas razones, entre otras, llevan al president a afirmar que «vemos con esperanza este nuevo tiempo, más allá del terreno sanitario». «El cambio de atmósfera experimentado será positivo para la Comunitat».

«Me cae bien Margallo»

Tras la marcha de la ministra a Madrid para participar en la sesión de control del Senado, Puig ha sido preguntado por sus preferencias ante las distintas candidaturas a la presidencia del PP. El president ha expresado su respeto por los candidatos y los militantes del partido, y ha expresado su deseo de que la nueva presidencia «deje atrás para siempre los hechos lamentables ocurridos en el pasado». Pero finalmente, sí que ha deslizado una ligera preferencia personal: «Me cae bien Margallo», ha concluido.