Fermax Electrónica “es el primer fabricante de España de porteros electrónicos y videoporteros, líder en el sector, tanto por facturación como por una cuota de mercado cercana al 50 %”, argumenta su brand manager, Elena Ravello. Además, es el primer exportador de su sector, ocupando un lugar de preferencia entre las marcas más importantes y reconocidas del mundo.

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La compañía, con sede central en Valencia, se dedica al diseño, fabricación y comercialización de equipos de portero electrónico, videoportero, sistemas de control de accesos, videovigilancia y domótica para edificios unifamiliares y complejos residenciales e industriales.

Fermax cuenta con seis filiales (Bélgica, China, Francia, Polonia, Reino Unido y Singapur) y cuatro oficinas comerciales en Colombia, Emiratos Árabes Unidos, Portugal y Turquía. Esta estructura orgánica se complementa con distribuidores y partners en 70 países adicionales.

La compañía cerró 2016 con una facturación de 57 millones de euros, un 12 % más respecto a 2015. Además, destina un 6 % de dicha facturación a la investigación. “Esta inversión, –aclara Ravello– refleja nuestra voluntad innovadora y compromiso con el desarrollo tecnológico”.

En cuanto a la fabricación, Fermax cuenta con su propio centro productivo en Valencia compuesto por tres fábricas distintas: el Centro Especial de Empleo y Montajes Electrónicos (Ceeme); una empresa especializada en la fabricación de circuitos electrónicos; y una tercera, experta en la inyección de plástico, corte y plegado de metal y marcado láser y tampografía. Todas ellas son empresas 100 % propiedad del grupo.

Por otra parte, y a pesar de que su canal de venta es B2B, al final “el producto que ofrecemos interactúa diariamente con el usuario final”, aclara Ravello. Y, teniendo en cuenta que “en muchas ocasiones es él quien toma la decisión de compra, debemos generar una imagen potente de marca para que el usuario final nos perciba como su primera opción para cubrir sus necesidades de comunicación doméstica”.

Elena Ravello, brand manager de Fermax

Su estrategia de marca

La estrategia de marca de Fermax está basada en tres atributos: el buen diseño, la constante innovación tecnológica y una excelente atención al cliente.

De hecho, –ratifica Elena Ravello– “en Fermax invertimos mucho en marca ya que apostamos por ser una empresa reconocida por su marca ya que es el paraguas bajo el cual integramos nuevas estrategias y líneas de negocio, amparando cualquier nueva propuesta de desarrollo dentro de la empresa. Con una marca potente, que transmita los valores de empresa, es fácil evolucionar y hacer crecer la compañía”.

En consecuencia, –afirma Ravello–, “en Fermax la marca es el valor intangible más importante de la empresa, un valor que ha ido evolucionando desde la fundación de la empresa junto con su visión estratégica, fortaleciendo su posicionamiento y ampliando los valores de la misma”.

De igual manera, para una buena implantación de la marca en el ámbito internacional, –señala Ravello– “es fundamental saber transmitir los valores de la empresa tanto al equipo propio establecido in situ, como a la red de clientes. Y para una empresa española como la nuestra no siempre es sencillo hacer entender nuestros valores a los equipos internacionales”.

Además, el hecho de que Fermax sea una empresa tecnológica y España no esté ligada al concepto de tecnología-punta, “no nos ha facilitado posicionarnos en este sentido. El camino lo empezamos ensalzando el diseño de nuestros equipos ya que, para nosotros, el diseño es la herramienta perfecta para hacer la tecnología asequible a más capas de la población y conseguir productos que atiendan aspectos esenciales de la vida cotidiana de cualquier lugar del mundo”.

A pesar de todo, gracias a la marca, Fermax ha podido entrar en nuevos mercados y desde hace muchos años, ha seguido el lema “Think Global, Act Local”, adaptándose a la cultura y necesidades de cada mercado en el que se actúa.     

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