La Sociedad de Responsabilidad Limitada (SRL o SL) es un tipo de sociedad que proporciona protección de la responsabilidad a sus fundadores. Además, ofrece un sistema de tributación similar al de una Sociedad Anónima, pero con ciertas ventajas.

¿Qué es una Sociedad Limitada?

La sociedad de responsabilidad limitada (SRL) también llamada Sociedad Limitada (SL), es una estructura empresarial, sociedad de capitales o sociedad mercantil contemplada en la normativa española. En ella, la responsabilidad, tanto de los socios como de la propia empresa, está limitada al capital suscrito. Y su funcionamiento, está regulado por la Ley de Sociedades de Capital.

Este tipo de sociedad, es el más utilizado en España y se basa en la premisa de la responsabilidad limitada. Esto quiere decir qué, su responsabilidad se limita hasta el monto de capital aportado por cada asociado en particular y/o registrado por la empresa. Por ende, sin importar el monto de las deudas contraídas, la organización y cada uno de sus socios, solamente serán responsables, por el monto de capital suscrito y aportado como su participación. Por lo que de ninguna manera estará en juego su capital personal.

Características de la Sociedad Limitada

La sociedad de responsabilidad limitada SRL, tiene características claramente definidas en la ley. Veamos algunas de ellas, las que a nuestro juicio consideramos las principales o más importantes que la definen.

• En primer lugar, la responsabilidad de sus socios se limita al monto del capital aportado.
• No tiene un límite mínimo ni máximo del número de socios que la integran.
• En el caso de ser conformada por solo un socio, se denominará como una sociedad unipersonal.
• Se puede registrar con un capital mínimo de 3.000 euros. Este capital debe aportarse en su totalidad al momento de su constitución.
• El capital aportado por los socios, debe ser cuantificable en dinero o bienes de valoración económica, no en servicios o trabajo.
• Debe tener un nombre y debe especificar las siglas SRL o SL, dada su naturaleza.
• Este tipo de sociedad, tiene la obligatoriedad de tributar por el IVA y el Impuesto de Sociedades.
• Su máxima autoridad es la junta general de socios.
• Las sociedades de responsabilidad limitada son también más flexibles que las sociedades anónimas en cuanto al reparto de sus beneficios entre los socios

Ventajas e inconvenientes de la SRL

Como en toda sociedad mercantil, su personalidad jurídica viene acompañada por ventajas y desventajas. Veamos algunas de ellas.

Ventajas

• Como su nombre lo indica, su responsabilidad está limitada a su capital social
• No establece límites en el número mínimo o máximo de socios, puede incluso llegar a ser unipersonal.
• No requiere de un monto elevado de capital para su constitución, 3.000 €.
• Su funcionamiento es bastante sencillo.
• No conlleva engorrosos trámites para su constitución.
• Pueden tener más fácil acceso a créditos bancarios.

Inconvenientes

• Los plazos de espera para su constitución y registro pueden superar los 40 días. Aunque es un proceso sencillo, no se puede decir que sea realmente rápido.
• Entre los principales inconvenientes tenemos que, no se pueden vender las participaciones a voluntad sin la regulación de la organización.
• La asociación, en sus estatutos, es quien establece la forma de transmisión de las participaciones. Dando prioridad a los socios restantes antes que a terceros.
• No se considera una inversión realmente capitalizable.

¿Qué obligaciones y ventajas fiscales tiene una Sociedad Limitada?

A diferencia de las sociedades anónimas, en las que los accionistas deben pagar impuestos sobre el dinero recibido por la venta de acciones a la sociedad (dividendos), los propietarios individuales de una SRL solo pagan impuestos después de retirar el dinero como compensación por su trabajo.

La SL paga menos impuestos que otras entidades porque sus ingresos tributan a tipos individuales en lugar de a tipos corporativos. Por otro lado, las obligaciones fiscales de la SL se pueden resumir en:

El Impuesto de sociedades (IS), que es la tributación que deben hacer todas las empresas con sede en España.

Impuesto Sobre la Renta de Las Personas Físicas (IRPF), ya que todas las empresas o sociedades que contraten personal o servicios deben hacer las retenciones correspondientes del IRPF.

El Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), obligatorio en España para todas aquellas empresas que se dediquen a la venta o prestación de algún servicio.

Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE), que se aplica a aquellas empresas o sociedades cuya facturación es igual o superior al millón de euros.