Entre los diversos aspectos que toda empresa, por muy grande o pequeña que sea, debe cuidar, se encuentra la contabilidad. Sin duda, se trata de uno de los aspectos más importantes de todo, ya que por medio de la misma se lleva el control de todos los movimientos monetarios realizados. Además, dentro del departamento de contabilidad se deben cumplir algunas acciones y utilizar ciertos métodos, como lo es el Plan General Contable (PGC). Si no tienes idea de qué es, aquí te explicaremos todo, incluyendo las PGC, cuentas.
¿Qué es el Plan general contable?
Para quienes no lo sepan, el PGC (Plan General Contable), es un texto centrado en la contabilidad que regula a todas las sociedades españolas. Es decir, es un manual en el cual sé específica todo lo que tiene que ver con las acciones contables a realizar. Por ese motivo, en todo departamento de contabilidad de cualquier empresa se debe tener una copia de este libro. Pues, contar con el mismo te permite realizar consultas sobre cualquier duda que tengas al momento de llevar la contabilidad de la empresa. En el mismo encontrarás todo acerca de las normas internacionales sobre la información financiera.
Tipos de cuentas contables en el PGC
Ahora que ya conoces el concepto de este plan, es fundamental pasar a hablar al respecto del PGC, cuentas. Entre los diversos apartados que se incluyen en este texto, se encuentra un cuadro de cuentas compuesto por un total de 9 grupos. Esta clasificación es de ayuda para registrar todas las operaciones financieras de las empresas. Si bien su uso tal cual como aparece allí no es obligatorio, sirve de guía para armar cuadros de cuentas propios. Por lo tanto, es menester conocer de qué va cada una de estas cuentas.
Grupo 1 – Financiación básica
En este primer grupo de cuentas se colocan todas aquellas que estén relacionadas con la financiación a largo plazo de la compañía. Se consideran a largo plazo todas aquellas que sean superiores a un año. Esto puede incluir todas las aportaciones de los socios, los beneficios no distribuidos, las reservas o el capital social. Además, también se pueden incluir, en caso de que existan, la financiación de terceros que tenga una fecha de vencimiento superior al ejercicio económico de la empresa en sí misma.
Grupo 2 – Inmovilizado o Activo no corriente
En el segundo lugar se encuentra el grupo destinado a las cuentas relacionadas con el inmovilizado, también conocido por el término de activo no corriente. Al respecto de esto, estamos ante un tipo de cuenta que se centra en todos aquellos activos que, debido a sus características, no son consumidos en el ejercicio económico. Se reconoce como inmovilizado a todos los gastos necesarios para el desarrollo del trabajo, pero que sufre una depreciación con el paso del tiempo. Por ejemplo, la compra de muebles para el local entraría en esto.
Grupo 3 – Existencias
Por otro lado, nos encontramos con las cuentas relacionadas con las existencias. Es decir, en la misma, se lleva toda la contabilidad de las materias primas o todos aquellos componentes que son consumidos a lo largo del proceso de producción de la compañía. Por lo tanto, aquí deben de entrar, no solo la materia prima y los componentes, sino también los productos acabados o semiacabados. Es gracias a este subgrupo que se puede llevar un mejor inventario de todo lo de la empresa.
Grupo 4 – Acreedores y deudores por operaciones comerciales
Siguiendo con la lista de PGC, cuentas, nos encontramos en el cuarto grupo con los acreedores y deudores. Dentro de este tipo de cuenta se toma en consideración todo lo que tiene que ver con los derechos y las obligaciones sociales y fiscales de la empresa. Es por ello que en este cuadro se lleva la cuenta de los deudores, acreedores, proveedores, impuestos, clientes, entre otros. Todos estos derechos y obligaciones, son generados precisamente por la actividad comercial de la compañía en cuestión.
Grupo 5 – Cuentas financieras
Por supuesto, no se puede pasar por alto todo lo respectivo a las cuentas financieras y esto es una información que se incluye en el grupo cinco de las cuentas. En la misma se coloca todo lo que tenga que ver con las cuentas relacionadas con la tesorería de la compañía. Es decir, todos los derechos y obligaciones de tipo financieras que tenga el titular de la empresa. Por ejemplo, allí se colocarían los dividendos, las deudas, las acciones, las financiaciones, las obligaciones y los bonos.
Grupo 6 – Compras y gastos
En el sexto grupo del cuadro de cuentas se encuentra el dedicado a las compras y gastos. Esto quiere decir que en el mismo se deberán de ver reflejadas todas las operaciones realizadas por la empresa al respecto de las compras y las ventas. Así que, es un tipo de cuenta que se emplea para encerrar todo lo relacionado con la actividad económica que se efectúa de forma diaria dentro de la empresa. Sin duda, es una de las cuentas más importantes a llevar dentro del departamento de contabilidad.
Grupo 7 – Ventas e ingresos
De igual importancia que todas las anteriores, se encuentra la cuenta de las ventas e ingresos. Como su nombre lo indica, se trata de una sección dedicada por completo a todas las ventas y los ingresos que se generan en la compañía. Por lo tanto, allí deberán estar incluidas todas las ventas de los productos fabricados por la compañía y los ingresos varios. Un buen caso podría ser, por ejemplo, los ingresos por servicios al personal o los ingresos que se generan por arrendamiento.
Grupo 8 – Gastos imputados al patrimonio neto
Por otro lado, en el siguiente tipo de cuenta, se encuentra aquella destinada para incluir todos los gastos imputados al patrimonio neto. Se trata de una cuenta en la que se incluyen todos los hechos económicos con origen en mercados financieros que disminuyen el patrimonio neto de la compañía. Dentro de las mismas se podrán encontrar los impuestos, operaciones de cobertura, gastos por los activos no corrientes, entre muchos otros tipos de movimientos financieros. Al estar ligada directamente con el patrimonio de la compañía, se convierte en una de las más importantes de todas.
Grupo 9 – Ingresos imputados al patrimonio neto
Para finalizar, y similar al tipo de cuenta anterior, nos encontramos con los ingresos imputados al patrimonio neto. A diferencia del grupo 8, en el grupo 9 de las PGC, cuentas, se incluyen todos aquellos movimientos que generan un incremento del patrimonio de la compañía. Por lo tanto, allí se colocarán los ingresos por ganancias actuariales, diferencias positivas, subvenciones, legados, donaciones, activos no corrientes en venta, entre muchos otros más. Todos estos movimientos que generan un crecimiento del patrimonio neto tienen un origen en el mercado financiero en el que participa la compañía.