Posicionamiento directo
Los eventos de empresa se han convertido en un arma muy importante para las empresas, posicionándola de forma “excelente frente a su público objetivo”, al establecerse un contacto personal en el que participan, con el que crean un clima de confianza y cercanía que “engancha a los clientes”.
Con esto contactos, se sienten atendidos y tenidos en cuenta, con lo cual el evento se convierte en un elemento de comunicación que genera un flujo emocional entre el empresario y el cliente.
Este tipo de acciones constituye un camino alternativo a la publicidad en tiempos de crisis. Internet da a las empresas la oportunidad de comunicar sus eventos con pocos gastos, al ser una herramienta que llega a todos los rincones y hará que los clientes acudan al evento y se consigan más ventas.
Tras su realización, las redes sociales son el utensilio “perfecto” para divulgarlo y, frente a las acciones de publicidad, tiene unas “posibilidades interminables, comenta.
Elementos claves de un evento
Un evento de empresa debe tener organizarse de manera que sea diferente a los demás que se convocan, con el objetivo de que deje huella en los asistentes, por lo que irá precedido de una planificación detallada, será original, entretenido, humanitario, creativo y divertido.
En su programación es necesario, comenta José Vicente Ferrer, tener en cuenta los siguientes puntos:
1-Tener un objetivo claro de lo que se pretende conseguir.
2- Conocer cuál es el público objetivo más adecuado y adaptar el evento a aquellos que puedan estar interesados en los productos de una empresa.
3- Tamaño del evento. “Hay empresas que realizan grandes eventos, pero hay otras que como algunas pymes que realizan reuniones más pequeñas con clientes habituales, con personas que habitan en el mismo barrio donde se encuentra el negocio o celebran un aniversario, utilizando el propio local como lugar del evento”.
3- El consumidor se tiene que encontrar invitado a participar en el evento, no debe percatarse de que “quieres venderle algo” y sentir agradecimiento por el trato que recibe del empresario.
Casos de éxito
Women’ Secret, presenta con un desfile su colección de lencería fina cada año, con las modelos más bellas y atractivas del momento, en la que con una elevada dosis de creatividad, glamour y delicadeza, consigue que se hable del evento antes, durante y después de su celebración. El presupuesto del acto es alto, pero la “rentabilidad y el recuerdo de la marca lo es más”.
La organización del Campeonato de Fórmula 1 o la celebración de la America´s Cup en Valencia o San Francisco, han sido “eventos de libro”, al colocar a las ciudades sede en los primeros lugares en todos los buscadores de Internet, así como en “boca de todo el mundo”.
Mont Blanc, líder en artículos exclusivos de escritura, relojes, piel y joyería, contrató a la actriz Mónica Molina para potenciar la imagen de la marca con la realización de acciones humanitarias con UNICEF. BASF, una de las primeras empresas químicas del mundo, colaboró con Cruz Roja Española para rehabilitar el Centro de Parálisis Cerebral en Valencia, en la que participaban los propios residentes y el público invitado.