Las empresas de la Comunitat Valenciana ya están trabajando para cumplir con el Anteproyecto de Ley de Residuos de la Comunitat Valenciana y que obliga a la incorporación de plástico reciclado en las botellas de bebida de un 25% en 2025 y del 30% en 2030. De hecho y según confirma Carmen Sánchez, directora Técnica de Itene «alcanzarán estos objetivos antes de los plazos marcados para posicionarse como referentes en sostenibilidad». Desde el instituto tecnológico, especialista en embalaje, están trabajando con toda la cadena de valor de los envases y están realizando un mayor esfuerzo desarrollando nuevas tecnologías que «permitirán el reciclado de aquellos materiales que hoy en día presentan dificultades de tratamiento».
– El anteproyecto de ley obliga a incorporar plástico reciclado en las botellas de bebida de un 25% en 2025 y del 30% en 2030. ¿Están las empresas valencianas preparando sus envases para cumplir con dicha normativa?
Sí, las empresas valencianas se están preparando. De hecho, estamos observando que se están planteando alcanzar estos objetivos antes de los plazos marcados con el fin de posicionarse como referentes en sostenibilidad.
– En este sentido, ¿qué proyectos estáis desarrollando desde Itene para que las empresas puedan conseguir este objetivo?
Entre otras áreas, estamos trabajando en la mejora de los procesos de reciclado para hacer posible esta incorporación creciente de material reciclado en los envases. En concreto, estamos trabajando con el PET, pero también con otros plásticos como el polipropileno (PP) y polietileno (PE) puesto que la legislación nos llevará también a incorporar estos polímeros reciclados en los próximos años. Asimismo, trabajamos en el análisis de la trazabilidad de estos materiales reciclados con el fin de garantizar estos porcentajes de material reciclado en los envases de nuestros clientes.
– ¿Hacia qué tipo de envases deberían migrar las empresas?
La tendencia principal es migrar hacia envases sostenibles, ya sea mediante la introducción de materiales reciclados o también mediante el desarrollo o uso de envases reutilizables, reciclables y compostables. Además, nuestros clientes tienen en cuenta la minimización del envase, el ecodiseño y la reducción de su impacto ambiental y huella de carbono. Todo ello se realiza asegurando en paralelo la satisfacción de todas y cada una de las funciones del envase, como son las de contener, proteger, manipular, distribuir y presentar el producto.
– ¿Con quiénes estáis colaborando?
Desde Itene estamos colaborando con toda la cadena de valor de los envases, desde fabricantes de materias primas y de envases, y empresas envasadoras y de la gran distribución, hasta gestores de residuos y recicladores. Con los primeros trabajamos en el desarrollo de envases cada vez más sostenibles y con los segundos estamos desarrollando nuevas tecnologías de gestión y reciclado de envases que está permitiendo tratar envases que tradicionalmente no eran reciclables.
«La economía circular como principio ha ayudado a todo el sector a comprender la necesidad de trabajar unidos para convertir los residuos de envases en recursos a partir de los que fabricar nuevos productos e incluso nuevos envases»
Además, trabajamos también en multitud de proyectos de investigación y desarrollo junto a diversas empresas, universidades y centros de investigación punteros a nivel europeo, nacional y regional. Estos proyectos abordan desde el desarrollo de nuevos materiales sostenibles, incluyendo objetivos como la mejora de sus propiedades y la reducción en la cantidad de material empleado o en el número de capas necesarias, hasta avances en tecnologías de reciclado y de valorización de residuos.
– ¿Qué problemas os están transmitiendo las empresas en este sentido y qué soluciones les estáis aportando?
La principal demanda de fabricantes de envases, envasadores y empresas de la gran distribución es que todos sus envases sean sostenibles y que por tanto sean reutilizables, compostables o reciclables. En este sentido no siempre es sencillo, porque la complejidad de algunos envases es necesaria para ofrecer la protección que determinados productos requieren.
Por su parte, la principal tendencia de gestores y recicladores es la búsqueda de nuevos procesos que permitan la separación y reciclado de todos los materiales de envases, incluyendo a aquellos más complejos. Es en esta segunda línea donde Itene está dando apoyo en el desarrollo de nuevas tecnologías que permitirán el reciclado de aquellos materiales que hoy en día presentan dificultades de tratamiento.
– La tasa a los envases de un solo uso incluida en el anteproyecto de Ley de Residuos y Suelos Contaminados, ¿crees que puede contribuir a cambiar el comportamiento de los consumidores y la industria? ¿O habría que poner en marcha otras medidas? ¿Por cuáles se decantan?
La nueva tasa de envases planteada en el anteproyecto de ley pretende la reducción del consumo de plásticos. En paralelo, tanto la legislación como los documentos técnicos publicados están instando a la industria a trabajar en nuevas soluciones de envases que utilicen menos material (reducción) así como que sean reutilizables o reciclables, todo ello con el fin de ser más eficientes en el uso de recursos.
– ¿Qué papel juega en todo ello la economía circular?
La economía circular ha supuesto todo un cambio de paradigma en el sector del envase y embalaje. En los últimos años y bajo este paraguas han surgido toda una serie de documentos técnicos y legales que tienen como objetivo incrementar la sostenibilidad del sector del envase y embalaje. Además, como principio ha ayudado a todo el sector a comprender la necesidad de trabajar de forma conjunta para conseguir convertir los residuos de envases en recursos a partir de los que fabricar nuevos productos e incluso nuevos envases.
Mantente informado cada día con nuestra newsletter. Suscríbete gratis.