El Banco de Desarrollo del Consejo de Europa (CEB en sus siglas inglesas) ha concedido a España dos prestamos por valor de 500 millones de euros para luchar contra el coronavirus, 300 millones para el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y 200 millones para la Comunidad de Madrid.
El préstamo al ICO, formalizado este jueves mediante firmas electrónicas en razón del confinamiento, tiene como objeto «apoyar los esfuerzos del Gobierno español para mitigar el impacto económico por el cierre de emergencia de pequeñas y medianas empresas por el COVID-19«, informaron fuentes de este organismo.
Esa partida se complementará con otros 34 millones de euros que aportará el ICO con lo que la financiación a pymes y autónomos para mitigar el impacto de la crisis del coronavirus ascenderá a 334 millones.
Con estos fondos y a través de las «Líneas ICO Mediación«, pequeñas y medianas empresas (pymes) y autónomos podrán financiar actividades empresariales, necesidades de liquidez y proyectos de inversión a largo plazo con el objetivo de mantener la actividad y el empleo durante la crisis, indica un comunicado del ICO.
Según el gobernador del Banco del Consejo de Europa, Rolf Wenzel, se «está haciendo todo lo posible por apoyar a España y a los demás miembros» afectados por la pandemia y el acuerdo con el ICO «es la prueba de nuestro compromiso«.
El crédito a la Comunidad de Madrid que se firma mañana viernes servirá para que la región proporcione servicios médicos a los afectados por la Covid-19″. Esos 200 millones de euros irán destinados «principalmente a suministros médicos y farmacéuticos».
El CEB ha aprobado créditos por 1.700 millones de euros para luchar contra la COVID-19 en los países miembros del Consejo de Europa, de los que casi un tercio irán a España. El resto tendrá como destino Italia, República Checa y Eslovaquia (con 300 millones de euros cada uno de los tres), Hungría (175 millones) y Lituania (100 millones).
El pasado 16 de marzo, este banco multilateral con vocación exclusivamente social creado en 1956, había avanzado que preparaba «financiaciones flexibles y rápidas» para sus países miembros en respuesta a la pandemia. España es accionista del CEB desde enero de 1978. En los últimos diez años la institución ha concedido 4.000 millones de euros en créditos a España, destinados sobre todo a la salud, las infraestructuras municipales y a pymes.