El fenómeno viral Las Tartas de Julita aterriza en València con su tienda número 10

Las Tartas de Julita, el proyecto gastronómico nacido en Alicante en torno a la tarta de queso, suma ahora València a su mapa de tiendas. Esta semana, Julia Sala, la emprendedora al frente de la marca, ha inaugurado su décimo establecimiento en el barrio de Ruzafa. Desde primera hora de la tarde del pasado miércoles, cientos de personas se congregaron en los alrededores del nuevo local, atraídas por unas tartas que se han convertido en todo un fenómeno viral.

La marca cuenta actualmente con más de 40 sabores distintos de tartas de queso, una variedad que ha sido clave en su expansión por la geografía española. Junto a la versión clásica conviven propuestas como pistacho, Lotus, gofre o Kínder. Desde Alicante, donde comenzó el proyecto, Las Tartas de Julita ha ido sumando ciudades como Elche, Murcia, Albacete o Alcalá de Henares, entre otras.

La llegada a València representa un nuevo hito dentro de la estrategia de crecimiento de la compañía y refuerza su vínculo con la Comunitat Valenciana, el territorio en el que se gestó la idea original. Un paso más en la trayectoria de un proyecto que, a partir de un producto sencillo, ha logrado construir una marca reconocible y con presencia creciente en distintas ciudades del país.

Plan de expansión por España

Como ya ha ocurrido en otras inauguraciones, la apertura de la tienda de València fue planteada como algo más que la puesta en marcha de un nuevo punto de venta. La marca concibió el estreno como una experiencia que trasciende el producto, más allá de las tartas de queso. En este caso, el nuevo establecimiento incorpora de forma permanente una obra artística creada específicamente para el espacio, firmada por Laura Sala.

El cuadro, perteneciente a la serie Miss Laura, es el de mayor formato realizado hasta ahora para una tienda de Las Tartas de Julita. Con unas dimensiones de dos metros por dos, la pieza se integra en el local como un elemento más del universo de la marca.

La apertura en València se inscribe dentro del plan de expansión nacional de Las Tartas de Julita, que continúa creciendo a través de un modelo de franquiciados. Tras el buen recibimiento de las últimas inauguraciones, la marca ya trabaja en su próxima apertura en Granada, prevista para enero, y avanza nuevos proyectos en distintas ciudades de España a lo largo de 2026.

Un fenómeno en redes sociales

Pese al crecimiento y a la expansión del proyecto, Julia Sala insiste en mantener intacta la esencia con la que comenzó Las Tartas de Julita: un producto artesanal y una relación cercana con el público. Una filosofía que pretende preservar a medida que el negocio continúa ampliando su presencia en distintas ciudades.

La trayectoria emprendedora de Sala tiene un origen curioso. Todo comenzó a raíz de una crítica negativa a la tarta de queso que se servía en el restaurante de sus padres en Alicante. Lejos de tomárselo como un revés, aquella crítica la llevó a desarrollar su propia receta, partiendo de una base sencilla que fue perfeccionando con el tiempo. El resultado empezó a ganar popularidad entre los clientes habituales, hasta que algunos comenzaron a encargar la tarta entera para llevar. La demanda creció tanto que decidió dar el paso y abrir su propio negocio.

Hoy, además de implicarse en el día a día de la empresa, Julia Sala mantiene una presencia muy activa en redes sociales. Comparte el funcionamiento del obrador, muestra el proceso de elaboración de las tartas y presenta novedades de producto. Esa comunicación ha contribuido a crear un vínculo especial con los clientes y a convertirse no solo como empresaria, sino también como una figura con proyección en redes sociales, con una audiencia que roza ya los 100.000 seguidores.