El cierre del estrecho de Ormuz dispararía el precio del crudo y reactivaría la inflación global
Mientras el conflicto entre Israel e Irán no se extienda a otros países de la región, los analistas descartan un impacto grave en el precio del petróleo. La oferta global es suficiente y la OPEP mantiene previsiones estables. Bruselas asegura que, por ahora, no hay riesgo para la seguridad energética de la UE
«Mientras que el conflicto bélico se limite a Israel e Irán y no implique a nuevos jugadores en la región como pueden ser los países árabes, enemigos de Irán, y que son potenciales afectados de que Irán tenga una bomba atómica, el precio del petróleo no tiene por qué subir», Juan José Figares, director de Gestión IICs en Link Securities.
«Podría subir algo, -matiza el experto- tal y como ya ha ocurrido, pero también había bajado mucho. No es un precio alarmante estar entre los 70 y 75 dólares el barril».
Figares corrobora también que «no tenemos problemas de producción de petróleo en el mundo».
Existe capacidad adicional tanto en los países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y de la OPEP+ como en otros que no están en estas organizaciones, como es el caso de Estados Unidos, el mayor productor de petróleo del mundo, con 13,6 millones de barriles al día (mbd).
En concreto, explica Juan José Figares, «se estimaba que este año iba a caer la producción porque los americanos necesitan precios más altos para ser rentables». Por ello, -indica- «estaban produciendo solo en los sitios con mayor rentabilidad».
De todas formas, corrobora Figares, «si sube el precio del petróleo la producción americana se podría incrementar y supliría la falta de producción iraní y serviría para complementar la producción mundial».
El cierre del estrecho de Ormuz
En América Latina, Guyana y Argentina, junto con Brasil, están emergiendo como nuevos productores de petróleo, impulsados por importantes descubrimientos y desarrollos en yacimientos clave.
Con lo cual, confirma el analista de Link Securities, «si no se produjera ninguna situación anómala, la línea sería que hubiera más oferta que demanda de petróleo, lo que conlleva la caída de los precios que estamos viendo».
La situación sería mucho más grave si Irán decidiera cerrar el estrecho de Ormuz pero, de momento, «no se contempla esta posibilidad», matiza Figares.
Por este estrecho pasa el 30% del petróleo mundial tanto de Irán como de los Países Árabes, «lo que sí podría provocar un incremento del precio del petróleo, incluso podría sobrepasar los 100 dólares el barril», recalca.
La debilidad de Irán
«Irán está débil» ratifica Figueras. «Los israelitas han atacado porque saben que los iraníes no tienen capacidad de respuesta», advierte.
A su juicio, los israelitas darán por concluida la operación cuando consideren que han destruido el programa nuclear iraní.
En este sentido, Irán está mucho más débil porque no cuenta con el apoyo de Hezbolá en el Líbano, de Hamás en Gaza y de Siria. Este último país está controlado por sunitas, mientras que Irán es chiita. Estados Unidos, por su parte, también se está manteniendo al margen.
Mientras, desde la Organización Mundial de la Energía Atómica (OIEA), una agencia de supervisión nuclear ligada a Naciones Unidas, acusó a Irán, el pasado 12 de junio, de incumplir sus obligaciones de no proliferación nuclear. El Gobierno iraní replicó que abrirá otra planta de enriquecimiento de uranio.
«Los israelitas -refrenda Figares- no pueden permitir que Irán tenga una bomba nuclear porque podría hacerlos desaparecer del mapa».
El papel de Occidente
Otro gran derivada en este conflicto, señala el analista de Link Securities, es que «Occidente ha sido muy laxo con Irán. Mientras que este país ha pasado de tener un posición muy solida en la región, ahora está aislada y no cuenta con los apoyos de Hezbolá, Siria y Hamás».
De todas formas, -advierte Figares- «lo que se vio en Siria e Irán eran chiitas contra sunitas y lo mismo ocurrió en la guerra de Irán contra Irak».
Ahora mismo, Irán solo cuenta con el apoyo de parte Irak, un país de mayoría chiita pero que está controlado por una dictadura sunita. Mientras que en Siria ocurría al revés, su población minoritaria era chiita pero controlada por una mayoría sunita.
¿Repuntará la inflación?
Juan José Figares asegura que si se incrementa el precio del petróleo «habrá un repunte de la inflación global». El Banco Central Europeo ya no puede bajar los tipos, «se podría plantear incluso volver a subirlos y tendría un impacto global en el crecimiento económico» asevera Figares.
Por su parte, la OPEP mantiene su previsión de crecimiento estable para la demanda global de crudo, mientras Bruselas asegura que la volatilidad del petróleo y la tensión en Oriente Medio no comprometen, por ahora, la seguridad energética de la UE.
Pese al encarecimiento del barril por los temores a nuevos cortes de suministro, la organización calcula que el consumo alcanzará los 105 millones de barriles diarios (mbd) este año.
La Comisión Europea, por su parte, recuerda que los Estados miembros cuentan con reservas estratégicas para 90 días y prepara un marco legal para romper definitivamente la dependencia del gas ruso antes de 2028.
Gemma JimenoLicenciada en CC de la Información por la Universidad del País Vasco, Gemma Jimeno se incorporó a ECO3 Multimedia, S.A., en 1998 como Redactora y ha participado activamente en el desarrollo de diferentes líneas de negocio. Desde hace años desempeña las funciones de Editora de los contenidos informativos, de los diferentes productos editoriales de E3 Media.
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Redacción E3







