La tecnología al servicio de la logística sostenible: digitalización e innovación
La industria de la logística está viviendo una transformación sin precedentes, impulsada por desafíos y cambios que están redefiniendo su operatividad a nivel global. Las nuevas regulaciones en materia de sostenibilidad, que promueven modelos circulares que mejoren la eficiencia de los recursos y minimicen el impacto ambiental, es uno de esos grandes cambios.
La sostenibilidad ya no es una cuestión simplemente reputacional, sino una estrategia competitiva esencial para el éxito a largo plazo de empresas productoras y distribuidoras, además de un imperativo legal. Por otro lado, la creciente conciencia ambiental de los consumidores también exige a las empresas logísticas repensar sus modelos operativos y minimizar su huella ecológica.

Para afrontar este reto, la innovación, la digitalización y, sobre todo, la colaboración entre los actores de la cadena de suministro, son fundamentales. Compartir información y coordinar esfuerzos haciendo uso de las herramientas digitales optimiza procesos, impulsa la transparencia y construye un ecosistema logístico más sostenible y eficiente.
Uno de los principales retos de la cadena de suministro es la optimización de los recursos y la reducción de residuos. La logística tradicional, basada en un flujo lineal de materiales, genera un volumen considerable de desperdicio. En cambio, los modelos circulares, donde los recursos se reparan, se reutilizan y se reciclan, son la única respuesta posible a una realidad que parece que en ocasiones se olvida: los recursos naturales son finitos.
En este sentido, los consumidores y reguladores exigen cada vez más transparencia en cuanto al originen y destino final de los productos, lo que requiere un seguimiento exhaustivo de estos a lo largo de la cadena de suministro. Soluciones como la Inteligencia Artificial (IA), el Internet de las Cosas (IoT), o las tecnologías de análisis avanzado de datos mejoran la eficiencia, la visibilidad, la transparencia y el control de las mercancías a lo largo de la cadena de suministro, minimizando pérdidas y optimizando la gestión de activos, además de incentivar la colaboración y el intercambio de datos entre los actores de la cadena de suministro.
Pongamos como ejemplo los palés, esas plataformas a menudo ‘olvidadas’ pero que son las encargadas del movimiento de millones de productos esenciales desde los centros de producción a nuestras casas. Si los palés hablaran, nos podrían dar información valiosísima sobre los productos que transportan, como su temperatura, su localización y muchos otros datos que nos ayudarían a tomar decisiones basadas en números y ejecutar acciones más eficientes e inteligentes. Pues bien, esto ya no es una visión futurista; es el camino que estamos tomando los expertos de la industria: equipar a los palés con dispositivos digitales para generar esa visibilidad de la cadena de suministro en áreas centrales de operaciones.
En CHEP, empresa líder en pooling de palés, contamos ya con más de tres millones de palés inteligentes equipados con tecnologías de seguimiento y rastreo que nos ayudan, no solo a localizar las plataformas geográficamente, sino también a identificar y entender mejor los obstáculos conocidos de la cadena de suministro, y a ayudarnos a descubrir ineficiencias desconocidas. Pero esto solo es posible si dichos palés se mueven en un circuito cerrado, como es el caso de CHEP, en el que los palés son compartidos y reutilizados por varios productores y distribuidores a lo largo de toda la cadena de valor.
En definitiva, la digitalización y la innovación no solo están revolucionando la logística, sino que se han convertido en aliados imprescindibles para lograr un modelo más eficiente y sostenible. Las nuevas tecnologías permiten optimizar recursos, reducir desperdicios y mejorar la trazabilidad, pero su verdadero potencial solo se materializa cuando existe una colaboración efectiva entre los distintos actores de la cadena de suministro. Apostar por modelos circulares y por soluciones inteligentes, como los palés conectados, es el camino hacia una logística más transparente, resiliente y preparada para los desafíos del futuro.