A la hora de obtener financiación por parte de la Unión Europea (UE), la competencia es feroz. Para salir de este desafiante viaje con éxito y conseguir la codiciada financiación europea, los solicitantes deben ser capaces de crear propuestas ganadoras.

Actualmente, hay diferentes convocatorias que afectan a sectores muy diversos (salud, ciencias sociales y humanidades, digital, alimentación, etc., entre otros) dentro del marco del programa Horizonte Europa. Por eso, es el momento perfecto para evaluar la posibilidad de acceder a una de esas convocatorias que se encuentran abiertas en este momento, como por ejemplo: para el clúster 2, destinado a la Cultura, Creatividad y Sociedad Inclusiva; el clúster 5, de Clima, Energía u Movilidad, o también para las becas postdoc Marie Sklodowska-Curie.

Por ello, facilitamos a continuación algunas de las claves que las empresas, o proyectos, deben tener en cuenta para que su propuesta se alinee con las prioridades de la UE y sea favorable para los evaluadores.

Claridad y relevancia: la base para cualquier propuesta

Un pilar fundamental de una candidatura ganadora para la UE es contar con objetivos claros y relevantes. La UE se compromete a financiar proyectos que se alineen con sus políticas y prioridades.

Por lo tanto, es esencial asegurarse de que los objetivos del proyecto, no solo deben estar bien definidos, sino que también tienen que estar sólidamente arraigados a los objetivos de la política de la UE, en el contexto más amplio.

Asociaciones y colaboración: la unión hace la fuerza

Formar un consorcio sólido es otro elemento relevante. Establecer asociaciones con organizaciones que posean habilidades y experiencia complementaria, ya no solo mejora la credibilidad de la propuesta, sino que también amplía su potencial.

De este modo, es muy interesante considerar la posibilidad de colaborar con entidades de diversas ubicaciones geográficas, disciplinas y sectores (tanto académico como industrial) para maximizar la sinergia de su proyecto.

Innovación e impacto: el factor clave

Una propuesta ganadora debe ofrecer ideas innovadoras y de alto impacto. En medio de un mar de solicitudes, la UE busca proyectos que prometan un cambio significativo. Destacar cómo el proyecto aporta innovación a las soluciones convencionales y demostrar su potencial para crear un impacto positivo, cuantificable y duradero es fundamental.

Metodología y planificación: atención a los detalles

Un plan de trabajo bien estructurado y factible es fundamental. Es muy importante definir claramente qué métodos y técnicas van a impulsar el proyecto para proporcionar a los evaluadores confianza en su enfoque. ¡Cuidado! La sección de metodología no es una extensión de la descripción de los paquetes de trabajo, si no que tiene que reflejar las hipótesis justificadas de partida del proyecto, así como las distintas metodologías / tecnologías y su clara interrelación, aportando datos y esquemas explicativos que no aparezcan en los paquetes de trabajo.

Además, una visualización de la interrelación de los paquetes de trabajo a través de un ‘PERT chart’ y un cronograma realista reflejado apropiadamente en una ‘Gantt chart’ son fundamentales.

Así mismo, es extremadamente necesario realizar un cálculo apropiado del esfuerzo de cada entidad por cada paquete de trabajo (los bien conocidos como Person Months), que justifiquen un presupuesto acorde con las tareas que se van a realizar durante el proyecto.

Revisión y orientación profesional: acompáñate de expertos

Antes de enviar una propuesta, es muy interesante recurrir a expertos o colegas con experiencia en propuestas para la UE para que evalúen la versión final de la propuesta. Las consultorías especializadas, como es el caso de Euro-Funding, conocemos y estamos familiarizadas con los requisitos y exigencias que se deben cumplir por parte de la UE.

Esta experiencia, además de nuestro equipo altamente cualificado técnicamente, hace que también podamos brindar asesoramiento sobre cómo estructurar los proyectos para aumentar las posibilidades obtener fondos y abordar posibles debilidades.

Viabilidad y sostenibilidad: más allá del periodo de financiación

La viabilidad y sostenibilidad de un proyecto son consideraciones fundamentales. Las propuestas ganadoras articulan un camino claro para la continuidad o escalabilidad del proyecto, más allá del periodo de financiación. Demostrar un compromiso con el éxito del proyecto a largo plazo y la diseminación de sus resultados, refuerza su atractivo.

Comunicación y diseminación: cuenta tu historia

Es necesario crear un plan de comunicación y diseminación integral en la propuesta, aportando justificación numérica del impacto del proyecto a corto/medio/largo plazo dependiendo de los tipos de canales utilizados y de las posibles personas / entidades interesadas en el proyecto, también conocidas como stakeholders, que deben estar debidamente identificados.

La comunicación y diseminación efectiva pueden aumentar significativamente la visibilidad e influencia del proyecto.

Cumplimiento regulatorio: navegando por el Libro de Reglas de la UE

Es importante asegurase de cumplir estrictamente las regulaciones actuales de la UE que rigen la ética, la protección de datos y los estándares ambientales, entre otras, y nombrarlas debidamente en la propuesta. No cumplir con estos requisitos puede llevar al rechazo de la propuesta, incluso si es muy prometedora.

Un enfoque a medida: la personalización es la clave

Cada programa de la Unión Europea tiene criterios y objetivos específicos. De este modo, se debe ajustar la propuesta minuciosamente a los requisitos y pautas específicos del programa de financiación al que se está postulando. Con ello, además se demuestra el compromiso y dedicación que se le ha dedicado al proyecto.

Aprender del pasado: éxitos y fracasos

Por último, pero no por ello más importante, recomendamos repasar los éxitos y fracasos pasados. Analizar las propuestas previamente exitosas, y también las no exitosas, dará información muy valiosa para implementarlas en la solicitud actual.

En conclusión, obtener financiación por parte de la UE exige un enfoque estratégico y completo. La elaboración de una propuesta ganadora no es una simple cuestión de suerte, si no que es un proceso meticuloso que debe combinar experiencia, innovación y adhesión a las prioridades y pautas de la UE. Considerando siempre estos principios, se aumentarán las posibilidades de obtener la financiación necesaria para poder llevar a cabo los proyectos presentados.