El «oro líquido» es el mejor embajador de la cultura gastronómica española. Sus innumerables cualidades y atributos saludables son, sin duda, un potente reclamo para el resto de países del planeta.
Un hecho que Sovena, empresa líder del sector del aceite envasado en España y la mayor exportadora de aceite de oliva del mundo, conoce bien. Con una plantilla superior a las 1.100 personas y una facturación de 1.300 millones de euros en 2021, la compañía tiene operaciones directas en diez países y exporta a más de 70. De origen portugués, en España Sovena cuenta con dos fábricas para el envasado de aceite de oliva y el molturado, refinado y envasado de aceite de girasol ubicadas en Brenes (Sevilla) y Andújar (Jaén). Además, tiene una fábrica de aderezo de aceituna en Plasencia y dos almazaras en la ciudad de Jaén.
Jorge de Melo, CEO de Sovena, explica a Economía 3 que actualmente España es el mercado más importante en volumen para el Grupo, representando el 46,64 % del total.
«Si nos ceñimos a Sovena España, somos uno de los principales operadores del sector, con un volumen de 228 millones de litros de aceite envasado en 2021, de los que 115 corresponden a aceite de oliva y los 113 restantes a semillas. Además, llevamos más de década y media liderando el capítulo de la exportación de aceite de oliva de España. Nada menos que 81 millones de litros envasados y 49 toneladas de aceite de oliva a granel», amplía.
Apuesta por la «marca blanca»
Cuando desembarcó en España, la compañía decidió crecer a través de la marca de distribuidor o «marca blanca» (MDD). «Optamos por la marca de distribuidor al entender que entrábamos en un mercado en el que ya existían muchas marcas propias que, además, estaban perfectamente posicionadas, lo que hacía aún más complejo el hecho de lanzar una marca propia. Esto nos permitió impulsar el negocio y consolidar nuestro liderazgo», señala De Melo.
Aunque recientemente han introducido marcas propias como Flor de Olivo y Fontasol, que «poco a poco están encontrando su hueco», la marca de distribuidor «sigue y seguirá siendo a corto y medio plazo en España nuestro foco principal».
Un producto «singular»
El directivo tiene muy claro que el suyo es un producto cargado de beneficios. «El aceite de oliva virgen extra es un producto singular, con sabor, natural, beneficioso para la salud y base de una dieta mediterránea sana y equilibrada», expresa.
Aunque no se limita solo a la parte nutricional: «Desde un ángulo social, ayuda a mantener a la población en el medio rural, evitando que muchas zonas agrícolas queden despobladas. Medioambientalmente es innegable la extraordinaria aportación del olivar a la huella de carbono. Y tampoco podemos olvidar los subproductos, que sirven para generar energía o compost con los sobrantes orgánicos».
Entre sus carencias echa en falta un mercado de futuros «fuerte y solvente» que sirva «de bisagra» entre oferta y demanda y «favorezca la adaptación operativa con los clientes».
Otro punto fundamental, en su opinión, es trabajar en la consolidación de una cadena alimentaria «más sostenible e inclusiva para todos los eslabones, con precios que cubran los costes de producción, que nos permita mejorar la profesionalización del sector y en la calidad, trazabilidad y seguridad alimentaria de los productos comercializados». También destaca como crucial invertir en políticas hidrográficas que den estabilidad a los regadíos y que permitan mantener producciones y rentabilidades «dentro de un contexto medioambiental alterado por el cambio climático y cada vez más complejo e incierto».
Seguridad y calidad
¿Están preocupados por el efecto que pueda tener el cambio climático? «El cambio climático no es un tema nuevo, pero claramente ha ido creciendo en preocupación», responde De Melo. Lo cierto es que la empresa ya ha puesto en marcha algunas acciones como modelos predictivos que anticipan y garantizan la optimización de los recursos, principalmente el agua. Asimismo, en este campo, Sovena ha explorado nuevos cultivos y variedades que se adaptan mejor al clima.
Además, han apostado por la entrada en el capital de EcoXperience, una start-up que transforma aceites de cocina usados en detergentes ecológicos.
Todo es poco para un producto en el que la calidad es «irrenunciable».
«Nuestros esfuerzos se enfocan en seguir impulsando la calidad de un producto que ya el consumidor asocia intrínsecamente a calidad», declara. Y añade: «La seguridad es prioritaria para la industria agroalimentaria, de la que formamos parte. Es lo primero que como sector hemos de garantizar».
Guerra de Ucrania
A pesar de la buena salud de la que goza el aceite de oliva, el sector ha tenido que hacer frente a varios contratiempos en los últimos meses. «Desde el inicio de la pandemia hemos asistido a circunstancias muy complejas. Además de los altibajos de la campaña 2021-2022 de aceite de oliva y de la escasez de girasol derivada de la guerra de Ucrania, también hemos de tener en cuenta el impacto que tuvo la covid-19: incrementó nuestros costes logísticos y provocó un importante encarecimiento de los insumos», comenta.
Y aunque «parece que el mercado no está tan tensionado», se avecina una campaña de aceite «muy difícil, inmersos, además, en un entorno de costes altos e inflación del que no va a ser fácil salir. Un escenario muy complicado de gestionar, en el que todos los insumos tienen un coste elevado. Ante esto, continuaremos reforzando la eficiencia de manera transversal para amortiguar el impacto de estos costes en el precio final», asegura.
En su caso, la solución pasa por ponerse manos a la obra y no dejar nada al azar: «Incorporamos continuamente mejoras en todos nuestros procesos, tanto de envasado como logísticos; apostamos por la I+D+i como palanca de crecimiento; y mantenemos nuestro compromiso con la sostenibilidad introduciendo mejoras energéticas, como por ejemplo proyectos de autoconsumo por medio de placas solares en algunas de nuestras instalaciones».
Además de seguir suministrando aceites de oliva y aceitunas de mesa a clientes de todo el mundo, también tienen tiempo para «explorar» nuevos proyectos agrícolas como es el caso de la almendra o el aguacate.