Buenos días,

Permitidme que hoy mi opinión sea para hacer balance de estos últimos treinta años en los que nuestro medio de comunicación ha estado presente en todas las empresas y entidades de la Comunitat Valenciana y, en particular, en este último año también en empresas repartidas por todo el territorio nacional. Ya que fue, precisamente, un mes de noviembre de 1991 cuando lanzamos nuestro primer ejemplar y, por ello, estamos de cumpleaños.

En aquella década de los 90, Economía 3 comenzó como revista y en sus primeras portadas se hablaba de las cuentas de la Comunitat Valenciana; de infraestructuras pendientes; de la exportación como palanca de crecimiento; el turismo y también de la crisis que en esa década nos afectó, ocasionada por el estallido de la burbuja inmobiliaria en Japón y agravada por las tensiones del petróleo causadas por la Guerra del Golfo. Aunque también, en esa misma década, comenzó la recuperación económica de la mano del sector de la construcción.

Cambio de siglo

Con el cambio de siglo, en el año 2000, hablábamos ya de temas medioambientales, del impacto de la globalización superando a la revolución industrial y de la innovación como palanca de diferenciación de las compañías. Y de nuevo, otra crisis, en esta ocasión, la crisis financiera de final de década, originada por el colapso de la burbuja inmobiliaria y las hipotecas ‘subprime’. Momento a partir del cual tanto la Reserva Federal de EE.UU. como el Banco Central Europeo comenzaron con sus políticas de compra de deuda como mecanismo de estímulo.

Y con estas políticas monetarias y unos tipos de interés en mínimos históricos nos adentramos en nuestra tercera década de historia -ya como medio digital también-, de 2011 a 2021, época en la que estas políticas han seguido activas, y en la que también las empresas han buscado nuevos recursos financieros: financiación alternativa. Precisamente para no seguir dependiendo únicamente de un solo proveedor financiero.

Lo que nunca podríamos haber imaginado es que el cambio de década lo haríamos en plena pandemia donde, una vez más, las empresas han sufrido los efectos de esta crisis sanitaria sin precedentes y de la que todos estamos tratando de salir mirando al futuro con ilusión.

Afloran nuevas dificultades

Indudablemente, el tejido empresarial lucha contra viento y marea para sobreponerse a las adversidades. Lo sabemos de primera mano porque también nosotros hemos sobrevivido treinta años. Y lo cierto es que ahora que comenzábamos a ver la luz al final del túnel, afloran nuevas dificultades con las que las empresas están teniendo que lidiar: escasez de materias primas o encarecimiento de la energía y dificultades en el transporte, por citar algunas. Variables que a principios de año el plan de marketing no contemplaba y sobre las que tampoco se ven visos de solución en los próximos meses, con lo que la incertidumbre con la que tienen que operar es mayúscula.

He asistido a diversos foros esta semana en los que empresas de diferentes sectores como alimentación; cerámica; química y textil, han explicado cómo están haciendo frente a estas dificultades con soluciones reales en sus estrategias de aprovisionamiento con búsqueda de proveedores locales; estrategias de precios; implantación en nuevos mercados; incorporación de personal y gestión logística. Y lo que más he admirado es que no he escuchado prácticamente quejas, solo soluciones; lo cual pone de manifiesto, una vez más, que será la iniciativa privada la que sacará adelante esta nueva situación de entorno complicado que estamos viviendo.

Esperamos que sigáis con nosotros otros treinta años más para seguir informándoos.

Buen fin de semana.