Benguerel: “Las fusiones bancarias se están haciendo para ocultar mierda”
Luis Benguerel es consejero en Anattea Gestión SGIIC, entre otras tantas cosas. Es un broker, un auténtico profesional de las finanzas. Se dedica a impulsar nuevos proyectos; a innovar en el mercado -como es el caso de la primera sicav nacida de las redes sociales, Smart Social Sicav-; operar en ellos -sobre todo, en renta variable y futuros- y es gestor y asesor de patrimonios, de proyectos fintech e insurtech, además de creador de marcas.
Por si fuera poco, domina la faceta mediática y está subido a la ola que pareció crecer a partir de la crisis financiera de 2008, cuando los economistas y financieros pasaron de estar en la sombra a ocupar horas y páginas en los medios de comunicación. Pero su difusión no solo se da en los medios tradicionales. También triunfa en redes sociales. Y por eso ha sido elegido entre el selecto grupo de los #twecos 2021, personas con gran influencia en Twitter que siguen la marcha de la economía y provienen del mundo académico, el periodismo y el análisis de mercados.
Conversamos con este especialista financiero sobre la banca, el futuro de los trabajadores del sector, las fusiones y macrofusiones, el mercado de las criptomonedas y los peligros y oportunidades sobre los que echar un ojo.
- A la vista de los ERE de la banca… ¿Qué futuro tienen los trabajadores del sector y hacia dónde pueden o deben ir?
No lo sé. Yo trabajé en la banca en el año 1990. Desde entonces ya me especialicé en el sector de bolsa. No creo que lo tengan fácil, porque ya son muchos años y mucha gente en la calle. Por lo tanto, el famoso emprendedor… Me parece que algunos ya han emprendido, han fracasado y ya se han cansado. Es un sector que está desde hace muchos años en un cambio de ciclo. Nos han tomado entre comillas el pelo porque hacemos el trabajo por la banca, por internet.
Yo era broker toda la vida y es lo mismo. Cuando en el año 2000 empezamos a discutir el tema de entrar en internet, el trabajo del broker que era estar todo el día introduciendo órdenes se iba acabando. A día de hoy quedan cuatro, que quedan en cuatro mesas de bancos porque hay gestores que aún quieren hablar con ellos. Pero el cliente ya no te llama, pasa la orden online. Y eso es un trabajo que le haces gratis al broker asumiendo tú el riesgo porque cuando lo hacía el broker, si se equivocaba al meter la orden se equivocaba él, no el cliente. Ahora si en vez de a compra le da a venta se ha equivocado el cliente. Y se come él la pérdida, cosa que es mejor para el broker.
O sea, les haces el trabajo, cobras la comisión y asumen los riesgos. Y lo mismo está pasando en el sector bancario. Haces tú la transferencia, te cobrarán una comisión y como te equivoques, busca el dinero. La sociedad ha aceptado estas condiciones y el sector cada vez necesita menos personal.
- ¿Tendrán que cambiar de sector?
Yo creo que sí. Porque en fintech sí, salen cuatro cosas. Pero fintech en España es un ‘copiar, traducir, pegar’ de lo que hay por el mundo, por alguno que podría salir innovador. Pero es un nicho muy pequeño, con la gran cantidad de extrabajadores de la banca que hay en España.
- A la vista de la progresiva transformación digital que estamos viviendo en el sector financiero, ¿hasta dónde puede llegar la reducción de plantillas en la banca?
Hasta donde quieran. El problema que tenemos en este país es que cada vez tenemos menos entidades. Eso es muy malo para el sector empresarial porque reduces la competencia. Al final, el tiempo y las condiciones las marcarán esos pocos, por lo tanto es malo.
Ahora te quitan hasta los cajeros para ir a sacar dinero. Y mientras la gente lo acepte, es lo que hay. No sé si funcionaría si alguien diera un paso atrás y dieran el servicio que se daba antes. Habría que analizarlo. Igual sería una estrategia.
- Se empieza a hablar ya de hacer fusiones transfronterizas, de macrobancos…
Ese es el gran objetivo del Banco Central Europeo (BCE) desde hace 12 años, desde la crisis del 2008. Al final estás ocultando toda la mierda y repartiéndola. No solo nuestras entidades tienen problemas, sino toda Europa. Sabes de unas y de otras que tienen cosas escondidas por ahí detrás. Ese es el gran objetivo a nivel europeo. Al final veremos algunas. Antes de la crisis del 2007 vimos absorciones y compras. Por lo tanto, ya vimos estas posiciones.
El problema de estas entidades tan tan grandes es que cuando en la crisis de 2007-2008 el lema era que eran demasiado grandes para caer. No las podíamos dejar caer porque se llevaban el sector financiero por el camino. Ahora ya desde hace ocho o nueve años, sobre todo de los grandes bancos a nivel mundial, es que son demasiado grandes para rescatar. Por lo tanto, si nos metemos a hacer macrofusiones europeas, serán demasiado grandes para rescatar, si alguien día la vuelven a liar.
El gran problema es que antes del 2006 o 2007, las fusiones eran para crecimiento y para entrar en nuevos mercados y ahora las fusiones son para ocultar toda la mierda y que por el camino se pierda. No son de crecimiento, son de ir tapando parches. Y llevamos así desde el 2009.
- Como especialista en mercados y en inversiones, ¿dónde está ahora la rentabilidad?
La bolsa está en máximos históricos. Hay que mirar la bolsa global. Lo peor que puede pasar es que la gente se fije solo en la bolsa española cuando hace más de 20 años que estamos en la zona euro. Son ganas de perder el tiempo. Sabemos que llevan 10 o 12 años intervenidas por los bancos centrales, pero siguen ahí. Hay que ser conscientes de que están ahí gracias a esta manipulación. Lo que nunca puedes hacer es ponerte contra mercado porque tienes más que perder que ganar. En nuestro caso hacemos inversión cuantitativa. Son los sistemas que se han programado durante mucho tiempo, que siguen funcionando. Lo que sí he aprendido en mis 25 años de carrera es que nunca hay que ponerse contra mercado y que nunca podrás averiguar el día que va a haber un giro.
En 2007 a mí me avisaron de que el sistema financiero americano estaba quebrado y no cayó hasta medio año después. Lo estuvieron aguantando y se fue a máximos históricos. Y de la deuda y de los bonos, todos sabemos que hay una burbuja hace seis o siete años y como te pongas en contra, cada vez hemos visto rendimientos más negativos. Yo eso no lo recomiendo. Tampoco recomendaría entrar en los niveles actuales porque son peligrosos. El año pasado, con el bofetón en todos los índices de la covid, nosotros fuimos la única gestora española con rendimientos positivos en todos nuestros fondos durante el primer semestre. Cuando el mercado se giró nosotros seguíamos con nuestra política hormiga de ir sumando y no pillamos los rebotes. No fuimos la mejor gestora porque otros se subieron al carro de la subida con más fuerza.
- ¿Hay algún peligro a la vista?
Peligros hay siempre. Por un lado, tenemos los índices en máximos históricos, sin grandes correcciones. Llevamos desde 2009, salvo algún sustillo. Antes de que los bancos centrales interviniesen se decía el lema de que ‘en la bolsa subías por las escaleras y caías por el hueco del ascensor’. Ahora subes por las escaleras, pero cuando caes, caes por el hueco del ascensor, pero subes como un cohete. Hay una generación importante de gestores que ya están manejando dinero y que no tienen ni pajotera idea de lo que es una crisis. Se piensan que una crisis dura un mes o mes y medio y que no puede durar años. ¿Qué puede hacer pinchar? La deuda hace años que sabemos que está, rendimientos negativos en Europa hay pero aguantan… Nunca se sabe.
- ¿Tienen futuro real las criptomonedas o se pueden quedar en un mero espacio de especulación a corto plazo?
¿Qué entendemos por criptomonedas? Ese es el problema. Detrás hay una ICO y la ICO tiene un producto. Si nos basamos en el caso del bitcoin, detrás tiene un producto que funciona y funciona muy bien, pero no tiene nada que ver con la cotización. Y los bancos centrales están empezando a utilizar el blockchain (¿Qué es el blockchain?).
El blockchain está muy bien; bitcoin, mientras a la gente le guste y se lo crea le va bien. Es una herramienta ideal para el blanqueo de capitales a nivel mundial, para el tráfico de armas, para el tráfico de drogas… Porque no hay rastros. Por eso los gobiernos las tienen entre ceja y ceja.
¿Hasta dónde puede llegar? Hasta donde esté dispuesto a pagar un loco. ¿Puede ser que bitcoin desaparezca? Y tanto. ¿Puede ser que sea un éxito? También. Yahoo era un gran buscador, apareció Google y se comió el mercado. ¿Puede aparecer dentro de un tiempo que tenga una funcionalidad nueva que desconocemos y sea mejor y acabe el bitcoin a cero o desapareciendo? Pues también. ¿Quién va a defender bitcoin? Pues nadie, porque en teoría no hay nadie.
Si nos basamos en las ‘criptos’ en general, depende de cada proyecto. Ahí hay mucha estafa. Hay mucho bulo. Y van sacando más y van jugando con ese pelotazo y la gente entra y se especula todo. Es más especulador que un casino a día de hoy. Es igual que las divisas, pero las divisas tienen detrás a un gobierno. ¿Puede llegar a funcionar? Sí. ¿Será esta o la otra? No lo sé. En el año 2000-2001 se creó en España un índice que se llamaba Nuevos Mercados y no queda ni una empresa de ellas. Yo no salgo a defender, como salen algunos locos, que es el futuro. Ya lo he vivido. Ya lo he visto otras veces.
- Entonces, ¿tu apuesta es que se encuentran en un valor excesivo y pueden llegar a caer hasta desaparecer?
Yo no sé qué futuro tendrán. Yo puedo analizar si se van a recuperar las compañías aéreas o el sector hotelero o si los coches van a ser eléctricos o no… Pero ahí detrás no hay nada. En el caso del bitcoin, no estamos analizando el blockchain. Si sabes cómo se hace, no necesitas bitcoin para hacer blockchain. Hay la confianza de los que quieran comprar bitcoin y mientras haya unos mineros que estén trabajando.
- Por tanto, ¿pueden morir por lo que en principio era su éxito, la falta de regulación y control?
Yo creo que pueden morir por falta de interés. ¿Por qué hemos dejado de tener las páginas amarillas en casa? Porque entró internet. No te digo que no salga una respaldada, pues igual sí. Pero yo, en el mejor de los casos, tendría un dos por ciento de mi cartera. Y en todas las criptos, no en una.
- ¿En qué sector o mercado aconsejarías entrar a alguien que quiere invertir cierto capital y no es un profesional?
Depende del capital, de la planificación, de la edad… Cada persona es un mundo diferente. Una vez analizado qué perfil de cliente es, nos basaríamos en una parte u otra. En renta variable, yo creo que la gestión cuantitativa tiene más futuro por una simple razón: yo he visto a gestores ponerse muy nerviosos cuando las cosas caen y no saben cortar pérdidas.
Por lo tanto, yo creo que es lo que mejor funciona y lo que recomiendo. Pero cada cliente es un mundo y hay que asesorarle de forma diferente. El problema de la mayoría de inversores que van por libre es que no diversifican y no controlan el riesgo.