El president de la Generalitat, Ximo Puig, espera que la posible fusión de BBVA y Banco Sabadell no suponga «una reducción importante de las prestaciones que hay en estos momentos» en la Comunitat Valenciana ni de los puestos de trabajo que existen en la actualidad.

En declaraciones a los periodistas en Castelló, Puig se ha referido a los contactos preliminares que mantienen ambas entidades bancarias para una posible fusión, que daría lugar a un grupo con más de 950.000 millones de euros en activos y un tamaño en España muy similar al que tendría la unión de CaixaBank y Bankia.

Puig ha dicho que por lo que respecta a la Generalitat, les gustaría que todo lo que es la relación del Sabadell con la Comunitat Valenciana -su sede está en Alicante-, y también la del BBVA, «se viera fortalecida» con este proceso. Asimismo, espera que «en ningún caso significara una reducción importante de las prestaciones que hay en estos momentos y de los puestos de trabajo que en estos momentos existen».

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